CUENTOS DE CIENCIA FICCIÓN

PROLOGÓ  Para Clea la viajera

En el siglo XVI, Ludovico Ariosto que un paladín descubre en la lu-   luna todo lo que se pierde en la tierra, las lágrimas y suspiros de los amantes del tiempo, malgastando en el juego. Los proyectos inútiles y los no saciados anhelos; en el siglo XVII, Kelper redacto un Somnium, que finge ser la trascripción de un libro leído en un sueño, cuyo volumen prolijamente revela la conformación y los hábitos de las serpientes de la luna, que durante los ardores del día se guarecen en profundas cavernas y salen al atardecer. Entre el primer y el segundo de estos viajes imaginarios hay mil trescientos años, y entre el segundo y el tercero, unos cien; los dos primeros son, sin embargo, invenciones irresponsables y libres, y el tercero está como entorpecido por un afán de verosimilitud. La razón es clara: para Luciano y para Ariosto, un viaje a la luna era símbolo de arquetipo de lo imposible; para Klepler ya era una posibilidad, como para nosotros. Muchos años después de Jonh Winkins guíen fuera un arriesgado soñador, quien con su discurso tendiente a demostrar que puede haber otro mundo habitable en cualquier planeta, con un apéndice titulado: Discurso sobre la posibilidad de una travesía, pero para esto hay que recordar que en las noches áticas de Aulio Gelio se lee que Arquitas el pitagórico fabricó una paloma de madera que era capaz de andar más allá de lo que vemos; Wilkins predice que un vehículo de mecanismo análogo o parecido nos llevara algún día a otros mundos.

Por un carácter de vislumbrar lo que va ocurrir, el Somnium astronomicun prefigura, este nuevo género narrativo que los anglosa-jones denominan science-ficción o scientifiction, los mejores ejemplos Herbert George Wells de los primeros pioneros de esta narrativa que con su imaginación nos cautiva, no podemos desmeritar el vuelo de otro como Ray Bradbury, en mi concepto el que llego más lejos y a la vez más internamente de nuestro ser, claro que no nos podemos olvidar al ru-so Isaac Asimov que propuso las primeras guerras intergalácticas; a Aldous Huxley que con su profundidad de ver esos nuevo mundos nos cautivara, y a otros menos conocidos J.G. Baillard, Peter S. Beagle, y a los norteamericanos Terry Cart, Curt Clark, Milfred Clingerman, Avra Davidson y otros. Pero no debemos que se nos escape a nuestro Jorge Luís Borges guíen en nuestra lengua escribiera cuentos como el: inmortal de una pulcritud que invoca a Francis Bacon.

Yo que siempre pretendo estar en lo más profundo de las cosas, que durante años en mis largos viajes he frecuentado bibliotecas, reuniones de escritores y poetas. Me atrevo a cabalgar en esas sinuosas aguas de este oficio de la ciencia ficción.         

                           

                                                       LA QUINTA ESCENCIA

Charles sosteniendo una especie de tabernáculo terminado en forma de parasol. Va marcando lentamente sus pasos, por la atmósfera fucsia de la ciudad de Randos, del planeta Arcos. Se detiene a observar la masa gaseosa de mercurio que esconden las modernas edificaciones. Piensa: que sería de este mundo si no existiera la atmósfera que rodea a este planeta, no hubiera el oxígeno por lo tanto sería dudosa la existencia del ser humano. Siguiendo la trayectoria empeñada del mismo color, escucha un sonido que lo atrae a un descomunal arco de apariencia enrarecida, donde casi sucumbe por la mirada de una muchacha que esta extrañamente parada sobre una plataforma de neutran (material de origen del planeta) y que a la vez toca un largo pianol, que es un piano evolucionado. La joven mujer al darle termino a la melodía, por los aplausos se da cuenta que esta entre una enorme concurrencia, confundido ve a la chica de brillante cabello, que se levanta y se vuelve a sentar para ejecutar con sus dos manos alargadas una rápida sinfonía. La música le produce un placer que lo lleva a ensoñar. Pero en el momento que ella termina la ejecución vuelve a la anterior realidad. No  muy  distante entre un grupo de estrafalarios personajes, estando confundido en la distancia vislumbra a otra mujer de larga cabellera azabache. La interprete vuelve a interpretar está vez una lenta melodía que donándole cierta calma logra tranquilizarlo, en un momento dado al sentir que suben las notas se es salta hallando en la distancia el rostro redondeado de la misma chica de cabello negro, que lo observa con una animosa mirada. El intuye y piensa que la conoce, pero por más que intenta a donde no recuerda el lugar, ni el momento. La chica de donde esta se levanta perdiéndose de su vista, que al no volverla a ver se introduce con su mente en la música, ensimismado con cada sonido percibe sobre el piso de jabolin una sombra y en el momento que voltea la cabeza se encuentra con la mirada de la chica de largo cabello negro, que con dulce vos le dice: desde que lo vi mi memoria me confirma que lo conozco- El temeroso le contesta: yo estoy en lo mismo, pero hace un rato trate de enfocarla pero desafortunadamente no logre recordar el momento, ni el lugar- Me gustaría que en el momento que termine el recital vayamos algún lugar tranquilo donde podamos platicar- De acuerdo. La ejecutante del largo instrumento luego que entona dos grandiosas sinfonías, se levanta de la silla y desaparece para volver aparecer inclinando su cuerpo y solo se escuchan los aplausos que se desbordan por el entorno. Con el extraño auditorio vacío la chica del pianol que es la misma joven de pelo azabache, con un ademan hace su aparición agregándole a la cuestión: vamos que es posible y seguramente encontraremos un herme-café. Sin salir de ninguna parte andan sintiendo el frio de la noche por una móvil avenida donde pasan a velocidades vertiginosas los coches eléctricos- Ella con su suave voz va diciendo: pasemos al oro lado. Suben atravesando un  puente  de  plataforma  eléctrica,  de  esa  forma se encuentran en una dimensionada bóveda luminosa donde ocupan uno de las tantas mesas. Él la observa detenidamente como está sentada- Diciéndole: explícame bien cómo es posible que seas dos mujeres en una?- No tonto, solo he usado mi aparato trasformador de ilusiones- Lo que no entiendo, mujer si eres la primera o la segunda- Ella riendo le contesta: claro, como podría ser la primera si no se interpretar el pianol, solamente realice un truco para confundirte y desviar tu atención- Pero si fue tan real- No insistas- Pero porque sé muy bien que te conozco- Tranquilo que a través de mi espíritu siento lo mismo. Él enfoca su vista hacia afuera observando los enormes anuncios tridimensionales- Ella: que vez. Nada del otro mundo. Se ríen llenando el espacio con sus risas. En el momento que acaban con el contenido del vaso ella va murmu-rando: ya terminamos que tal si nos vamos- Si está bien retirémonos. Al salir se posan en las escaleras eléctricas dejando atrás la variada luminosidad de los diferentes espacios- Él va hablando: tengo una sensación de hambre increíble- Este por lo que veo es un restaurante seguramente. Pasan a través de una puerta giratoria encontrando un enorme entorno circular, se sientan en los primeros puestos rodeando una pequeña mesa de cristal azulosa, acomodados son interrumpidos por un característico robot que les muestra con sus metálicas manos una luminosa carta y con su peculiar voz va diciendo: tenemos como pueden ver comida deliciosa, pueden disponer de lo que quieran- Ella suavemente habla: quisiera la torta de mitra, con helado super-chicleso- El: a mí me trae batido de luciferna con carne crespa- El robot: con que lo van acompañar- Ella tráiganos dos refrescos ultrasónicos- Ya regreso con el pedido- La chica por lo que veo ese robot se ve muy eficiente, pero sí que camina muy cómico. Se ríen- El mirándola a los ojos dice: desde que llegue a este planeta me invade la incertidumbre ya nunca se si lo que veo y siento es realidad o fantasía, y mucho menos no se con guíen estoy hablando. En ese momento el extraño robot va trayendo una redonda bandeja que gravita, dispone todo el pedido sobre la mesa- Habla diciendo: si necesitan algo más hay un timbre en el costado de sus asientos- Ella que rica se ve esta comida. Siguiendo al tema o a la pregunta que me y hicieras, aquí en este planeta constantemente todo está cambiando, ya que todo está programado para que dure poco tiempo- No  cabe  en  mi cabeza todo lo que he presenciado- Te comprendo, al principio es complicado pero ya te acostumbraras, pero ahora quiero saber exactamente de dónde vienes…- Luego de un trago de batido dice: vine procedente de la tierra, allá estudie antropología espacial y luego que me presente en la oficina de asuntos espaciales me enviaron a este planeta desconocido para nosotros los terrícolas. Primero vine a la ciudad de Prisa donde trabaje en una investigación de los asuntos sociales y cuando termine no quería quedarme. Pero tampoco estaba dispuesto de regresar al planeta tierra. Me fui con mi escaso equipaje al aeronave y en el salón de espera del nave-aeropuerto vi la enorme pantalla con los diferentes destinos, simplemente cerré los ojos para apuntar con este dedo índice, así di con esta ciudad que sin dudar tome un inter-vuelo y desde ese momento estoy aquí- Ella luego que se ríe dice: sí que eres loco- No creo ser tan demente solo creo en el destino, por eso hice lo que hice- Ella bromeando: eso desde cuando…- Eso desde tiempos inmemoriales y tú de donde provienes- No te lo puedo decir- ¿Porque motivo?- Ella poniendo cara misteriosa: simplemente porque pertenezco y trabajo en una organización que es secreta, como deber ético no puedo dar información- Acaso eres una investigadora, una detective o una misteriosa científica…- Bueno te voy a contar de mi vida lo que me permiten decir: bueno vine a este planeta procedente del sistema solar Orgulos, del  planeta Filiux, de una región llamada Plauxma y cuya capital es Noxtrix- Solamente sé que ese sistema  solar  está  regido  por dos pequeños soles y que hay un centenar de planetas donde la vida es posible, ¿de cuál de ellos vienes?- Eso es confidencial- Al menos puedo saber cómo te llamas- Solo te puedo dar mi seudónimo- Él mostrando con la risa los dientes: acaso pintas o escribes- Devolviéndole la risa agrega: si escribo en mi tiempo libre poesía- Que bien ya que me gusta en demasía leer aunque en estos tiempos nadie lo hace, no tienes algún poema que lleve tu sello. Ella saca de su bolso secreto la electro-libreta, él se la arrebata y lee un poema sobre la vida en el planeta, que  al  terminar  va murmurando con su voz: que belleza la de vuestro espíritu por eso te deben decir Crisálida, es hermoso, acaso existen en ese planeta mariposas ya que es lo único que extraño de la tierra- Allá abundan las crisálidas y variadas clases de insectos- Él se queda pensativo por un momento observando su belleza, luego saliendo del asombro dice: ¿porque sabes que me conoces?- Eso es una pregunta muy astuta, solamente intuyo que compartimos la vida en otra vida anterior- No sé, pero creo que estuviste en alguna vida anterior en la tierra-  Eso no te lo puedo decir- Como crees que sepa dónde te vi, si cada pregunta que te hago te me evades con imposibles- Ella sonrosada le contesta: no creo poderte despejarte tus dudas por ahora me tengo que ir- Si te vas me dejas con mucha intriga- Tengo algo urgente que hacer- Cuando y donde nos volvemos a ver…- Yo te busco- Pero ni siguiera sabes mi nombre y mucho menos donde duermo- Eso no es necesario, yo tengo todos los mecanismos para buscarte- Al menos te puedo acompañar- Es mejor que no lo hagas. Luego que paga ella con la migro-tarjeta salen a la trasluz de la calle, luego de un beso se separan viendo un sorprendente ultra-vehículo el cual abriendo la compuerta la apariencia de un extraño ser, la chica se monta y cerrando la compuerta desaparece de su vista, inmediatamente como llego desaparece. Él camina pensativo, será que la chica es un androide o algo así imposible de detectar. Al otro día no se aguanta de ir a mega-biblioteca, y una ultra-computadora ve el sistema solar Orgulos, donde halla el planeta que ella le dijera, lo mismo que la región y la capital, lo mismo ve que coincide con su escaso conocimiento sobre sus dos pequeños soles, y logra descifrar doscientos treinta y un planetas donde hay vida, pero queda completa-mente perdido cuando ve en el monitor que cada planeta es tan diferente y en cada uno de estos tiene un número infinito de naciones que son autónomas unas de otras. Se siente tan confundido que prefiere salir del establecimiento piramidal, dejando que sus pies se deslicen por la vereda o acera mecánica, llega al hiper-hotel, se acuesta sin querer saber nada de la chica, pero al quedar profundamente dormido sueña con ella envuelta en terribles imágenes. Se despierta suspirando, quiere calmarse sin que lo pueda conseguir. Deambula de un lado para el otro de la habitación, en ese divagar es interrumpido por un mega-monitor de donde sobre sale la voz de su hermana, pero aturdido confunde la voz con la extraña mujer- Él va diciendo: Crisálida, la hermana enciende la pantalla diciendo: te estás dando cuenta que no soy una mariposa- El viendo el rostro de su hermana le contesta: disculpa ya que creí escuchar la voz de una amiga- Ella ¿Por qué estás con esa cara de enfermo?- Estoy bien, solamente tuve una pesadilla- Estas seguro que solo fue eso…- Si claro- Pero que cara tienes, me comunico con la intención de hacerte saber de las bodas de plata de nuestros padres, ¿vas a venir?- No puedo ya que me gastaría los ahorros que tengo, me moriría de hambre- Acaso estas sin trabajo- Eso es exactamente lo que pasa, dales un beso de mi parte- Eres un ingrato- Vos no me entiendes. Apaga el monitor y piensa: es mejor que de un paseo. En la calle el sol resplandece que le muestra el abierto contorno de edificaciones satelitales y va en una dirección que nunca antes había caminado, pasa por un silencio aterrador y mirando hacia arriba  ve  las  raras  torres  que  se asemejan a gigantescos insectos terrícolas. Se detiene y entra en un lu- gar hexagonal del cual sale con una crema frugal espumosa con la cual se deleita, de frente ve las construcciones cinéticas, a un lado un sendero mecánico que lo lleva a un extraño bosque. Donde los arboles sintéticos se extienden con unas hojas descomunales. Se sienta a meditar y repentinamente al abrir los ojos ve a su amiga que viene por el césped naranja, ella se detiene a tan solamente medio paso de distancia y dirigiéndole la palabra le dice: hola, te interrumpo- No para nada, pero no entiendo como sabias de mi paradero- Ella con la sonrisa pintada en el rostro le contesta: ustedes los terrícolas son muy ingenuos. Él sin modular palabra da medio paso y al acariciar su rostro siente un cosquilleo en todo su cuerpo, pero ella ante eso ha retrocedido un paso hacia atrás- ¿Qué haces?- Te acaricie con la doble intención: porque siento algo que no se explicar y la segunda intención para dilucidar de que estas constituida- Ella algo así como rabiando le habla: ustedes los de la tierra y nosotros en mi caso concreto, tenemos la misma constitución pero con tan solamente un par de diferencias. Ella se saca el cabello de las orejas mostrando que son puntudas, luego le muestra el brazo donde tiene un circulo de piel que sobresale- Él va agregando con su voz a la cuestión: esta demostración me induce a creer que alguna vez estuviste en mi planeta- Porque estas tan seguro…- Debido a que ese círculo que tienes en el brazo se les aplica en la tierra para distinguir a los que vienen de otros mundos- No afirmo o niego, porque en mi planeta tiene otro sentido muy diferente- Acaso que sentido…- Eso no te lo puedo decir ya que es secreto- Debido a que permaneces con tus enigmas- Ella (agitando el cabello) tu sabes porque- Yo acaso voy hacer algo terrible contra tu organización- Sé que no te interesa complicarme la vida, peo en mi mundo existen reglas que no debo desobedecer- Mi interés no va por ahí, pero  si  quiero  saber  cómo te lo he dicho antes de donde me conoces…- Si tu espíritu no está en capacidad de recordar otras vidas, no insistas que eso para tu memoria no es posible- Acaso tú lo sabes…- Sí que lo sé, pero esa información es restringida para un terrícola- Como pretendes que al menos tengamos una amistad si te haces un bloqueo, así es imposible conocerte esencialmente. Ella se queda callada- Él arrugando la cejas agrega: no entiendo nada, estoy confundido- Es tu propia cuestión…- No te das cuenta que ni siquiera sé si eres real- Porque dices eso…- Acaso no sabes que me puedes hacer enloquecer, y solamente intuyo que te he visto- Ya te dije que sí, dale tiempo al tiempo- Si me pongo esperar que ocurra un milagro perderé el juicio- Tranquilízate- Si lo intentare. Andan por el jardín de extravagantes flores luminosas, al intentar tomar un luminoso insecto abre sus grandes alas metálicas echándose a volar. Ella se ríe y con  la  mano  derecha  le  tira  una  punta  del pelo; se acuestan sobre el césped y luchan en un juego continuo pero ella interrumpe el juego parándose de una, él hace exactamente lo mismo y ella sale a correr, él intenta alcanzarla al querer agarrarla por la cintura ella desaparece. La busca merodeando todo el lugar, al ver que no está empieza a dudar de su existencia, se dice a sí mismo: claro que la sentí al tocarla. Con una tristeza amarga se trasporta entre la gente con la única preocupación y preguntándose” como es posible que no pude atraparle por el talle”. Se enfurece con él mismo que le da tremenda patada al piso de metal, sintiendo un terrible dolor en el dedo grande del pie. Entra como un zombi en el hiper-hotel, el robo persona le dice algo pero él no está para entender nada, se acuesta sin tomarse sus pastillas alimenticias y tiene el siguiente sueño: él va caminando por un paisaje de enormes rocas brillantes y la chica lo sorprende tomándolo del brazo y haciendo que pierda el equilibrio va a rodar por un abismo, antes de caer se despierta en la madrugada sin poder volver a conciliar el sueño. Estando en la mega-cama  que  por  intermedio de un peculiar púlsor que hace que gire colocándolo al frente de la ventana de cristal que hace que vislumbre la atmosfera fucsia, piensa desbordantemente en ella, que en su locura solo recuerda que tiene que consumir algo que lo alimente, se viste con la ropa deportiva de poherón y sale al mega-restaurante donde digiere un abundante desayuno.

Pasan los días entre leer, caminar y soñar. Hasta que una clara mañana al atravesar un puente justo debajo la ve entre el tumulto de personas, en una carrera desesperada baja de dicho puente pero estando abajo por más que intenta no la vuelve a ver; en otra ocasión en el multi-cine después de ver una entretenida película la encuentra en la mega-cafetería- Ella al arrimársele en tono burlón le dice: sé muy bien que aquí te encontraría- De ante mano como lo sabias…- Mi intuición no me falla, salgamos. Salen del enorme lugar que aparenta ser una gran nave a la calle luminosa y entran  por  succión  girando,  para posarse en una especie de sala asimétrica, colgante y abierta donde divisan tranquilamente un circular panorama de diferentes tipos de mega-construcción, se sienta cada uno sobre una silla reclinable- El insistente le pregunta: ¿porque ese día en el jardín decidiste desaparecer?- Me fui debido a que tenía algo urgente que hacer- Sin despedirte- Si lo sé muy bien- Una mañana te vi en el momento que cruzaba un puente y porque cuando baje no estabas- Yo también te vi arriba del puente pero desafortunadamente no era el momento de que nos encontráramos- No sé qué pensar y estoy cada vez más confundido- Esta es la última vez que nos veamos. Al acabarlo de decir luego de aplicarle un beso en los labios desaparece de donde está para integrase en la quinta esencia. 

                                         EL MÁS ALLÁ

Gustavo Pinter director del centro espacial C.5, hace una convocatoria con la incursión de hacer una expedición al planeta Jarle14, donde el hombre de la tierra siempre ha querido llegar. Después de examinar físicamente y sicológicamente a varios astronautas, el doctor Pinter escoge a los más aptos para esta misión a los señores: Barley, Horwell, Cariets, a las señoritas: Moldest, Clar. Los cuales entrena en el simulador que tiene el mismo sistema de la nave PX21 con la cual se internaran en el espacio. En el momento que el doctor siente que están preparados para abordar la nave, él y sus colaboradores de antemano tienen todo listo para el despegue, los lleva en un vehículo a abordar la nave más moderna de los platillos voladores PX, que es insuperable por su capacidad de navegación. El doctor Pinter nombra por sus capacidades al astronauta Rober Horwell y como sub capitána a la astronauta Claudia Clar. Siendo las tres del meridiano de Sorba, ante una inmensa multitud y varios reporteros de los diferentes diarios del planeta que no se quieren perder un instante de la partida del plato volador. En un despegue formidable la nave comandada por el capitán Horwell, los presentes ven desaparecer mágicamente de su vista la nave que va surcando en un constante giro el firmamento azuloso. El señor Horwell comandando la nave ve a través del inmenso cristal de la sala de mando la grandiosidad del universo, la señorita Clar observa en la vi-pantalla la velocidad que ya sobre pasa la de la luz- Ella va diciendo: todo está bajo control. En esas aparece la señorita Moldest que trae en una pequeña cubeta las capsulas alimenticias, con varios vasos de agua magnético, en primera instancia las repartes a Sofia y a Robert que las toman disueltas en agua magnética, luego se dirige a la recamara de computación donde le proporciona la misma cantidad al señor Barley, lo mismo hace en el centro de robots al señor Carets y por último se dirige al centro de comu-nicaciones, de ultra-filmaciones, y de ultra-fotografía donde hace exactamente igual con el señor Daniels. La nave les permite de disfrutar de sensi-películas, de diversos juegos, y de deportes ya que cuenta con un suficiente espacio adicional que por un mecanismo de ilusión se amplía dejando disfrutar las diferentes actividades. Con un control auto-mático y un sistema sensorial de alarma, solo son suspendidas dichas actividades por la trasmisión ultra-satelital donde aparece el director de la misión el doctor Pinter, en la pantalla para dar algunas indicaciones, para enterarse del estado de los variados sistemas, de todo el funciona-miento conciernen te a la nave y en el gran universo de sus hombres.

Transcurren los días, la nave se interna en el sistema solar donde hace su primera parada en la estación del satélite OP24, donde los seis se trasbordan con el objeto de compartir una velada con el director de la estación el señor Palmer, quien a su vez les muestra el circuito de transito espacial, las potentes cámaras-ultrasónicas que registran todo lo que se puede ver, sumada a la información de todo el sistema solar. Luego de esta operación los convida a una gran cena que consiste: en enormes hamburguesas de poltangridad, ensalada con una extensa variedad de verduras de diferentes planetas, acompañado todo esto con una variedad de cervezas artesanales de uno de los planetas en lista, y por último de una gran torta de mega-chocolate. De esa manera observan diferentes representaciones teatrales y de danzas aeróbicas. Al haber compartido tan magnifica experiencia vuelven a la nave que los lleva a través del universo estelar al sistema solar Agust, desde donde el centro de comunicaciones el señor Daniels se comunica con la federación de este sistema solar. Con el único objetivo de pedir un permiso de ingreso en dicho espacio cósmico, sin problemas le conceden el permiso. Su primer objetivo  es  ingresar  en Linsus, cuyo satélite del planeta Alfanga donde Robert y Sofía se entrevistan con el responsable el señor Lávico Curtis del orden planetario, donde  después de una larga conversación se estipula en orden de ideas que sirve para ejecutar en los diferentes sistemas.

Ya sobre el raudal del firmamento la nave atraviesa la estela de los diferentes planetas, divisan la belleza de la atmosfera. Al querer ingresar en el uniforme planeta Limpus pero esta vez la gravidez los rechaza. Los dos astronautas hablan entre ellos para ver cómo pueden establecerse con la nave en ese planeta, al ver que no pueden resolver el problema llaman por el trasmisor interno a sus compañeros que en cuestión de segundos se presentan- El señor Barley opina: que a través del sistema H se puede desbloquear esa atmosfera, el señor insiste que es mejor primero: que mandemos un robot en la pequeña nave para que así entre en el sistema H. he inspeccione el planeta y podamos darnos cuenta si hay otro impe-dimento. El capitán al estar de acuerdo con la idea hace que se cumpla, mientras el señor Daniels se encarga de preparar todos los detalles del robot y de equipar la pequeña nave Y33. Con todo lo necesario agregando una super-cámara en la recamara de la nave hacia el exterior, donde entra en un acto seguido en la atmosfera logrando entrar en la órbita del planeta y girando surca con facilidad mostrando la belleza rojiza para  establecerse  sobre la ciudad de Esmirna donde hace la nave un ultra-aterrizaje. El robot sale de la nave operativa a una dimensionada calle iluminada. El capitán le ordena que haga un sondeo y con una potente cámara este personaje de ultrón va mostrando la mega-modernidad de la ciudad de edificaciones hexagonales, entra en un centro comercial que gira en su propio eje, donde con un peculiar altar le rinden culto a las nieves perpetuas de la gran cordillera de Ismiria; sigue con el movimiento de sus pies metálicos siendo sorprendido por algo imposible para el ojo humano de captar, que trasforma el ambiente en algo irreal, de esa forma ven emerger de la nada a varios seres de apariencia grisácea que entran en las diferentes dependencias obteniendo diferentes extrañas mercancías que al verlas en la pantalla no logran saber para qué sirven. El  capitán  extrañado  por  lo  que presenciara ordena al robot para que regrese a la pequeña nave, de esa forma el Y33 regresa a su nave madre, hace dirigir el gran platillo noventa grados, entra en una dimensión donde las estrellas son apenas una diminuta luz y además todo se aprecia como si hubiera un enigma en la atmosfera. Todo esto hace que la nave se estabilice y pierda el contacto con el director, la señora Clar llama al señor Cariets que se hace cargo de la interferencia, en compañía de su robot personal logra restablecer la misión y la misma voz del señor Pinter les explica: que en el pequeño planeta habido una rebelión y que la presidencia interplanetaria ha sido intervenida por un grupo de los Comunes, que eso obliga a que regresen. Desde un principio el capitán Horwell se opone a tal regreso, para esto se reúne en el salón auxiliar de la nave con sus compañeros, los que una mayoría están de acuerdo a que sigan con la misión. Solamente la señora Moldest está en completo descuerdo. Ella aprovecha que el grupo disputa un juego de sormert, que consiste en derivarse con una bola electromagnética , justo cuando le toca el turno al señor Cariets la astuta joven bloquea la puerta electrónica de la cocina y solo después de la disputa deportiva y en el momento que quien tomar un refrigerio se enteran del asunto. El capitán trata de comunicarse con la joven pero no tiene éxito, él decide con un desaparisol y al apretar el gatillo desaparece la puerta. Encuentran a la joven atemorizada, entre los señores Barley y Daniels la toman de los brazos y la llevan al cuarto ultra-óptico donde con una cuerda perdurable la atan de pies y manos a un electro-mueble dejándola encerrada. El señor Barley se hace cargo de descongelar las sustancias alimenticias.

El capitán al apoderarse de la nave hace que la comunicación con doctor Gustavo Pinter sea nula, lográndola bloquear culmine. En esa situación la nave sigue una ruta estelar precisa por el más allá donde cada situación que experimentan los va dejando asombrados. En la órbita del planeta Luxis de apariencia amarillenta ven a través de la mega-pantalla unas gigantescas hormigas,  que  a  través de sus extraños cuerpos despiden potentes luces que se proyectan formando increíbles círculos que van cambiando a otras formas geométricas, esto los aterra sintiéndose amenazados pero a medida que avanzan estas hormigas se desvanecen en la inmensidad. Al entrar en una gran zona de completa oscuridad la nave queda atrapada en medio de las tinieblas. El capitán manipula la nave para que vire en otra dirección logrando salir de ese hacinamiento de oscuridad a una órbita donde todo cambia interponiéndose, los aparatos de la nave en su funcionamiento sufren alteraciones, cada concepto se modifica por si solo y de esa manera pierden totalmente el contacto con el planeta Sorba quedando a expensas de la eternidad.

                                   UN PLATILLO VOLADOR

Úrsula se despierta, como de costumbre lo primero que hace es abrir la ventana de la habitación, ante su vista se presenta el paisaje de las montañas que son irradiadas por los rayos solares. Contempla las variadas formas de una geografía accidentada. En una de las colinas alcanza a distinguir una luz que nunca había visto antes, piensa sin comprender de qué se trata. En el momento que se nubla el cielo la luz metálica vibra de tal manera que ilumina tota la cima de la montaña, para luego elevarse y posarse en el ancho cielo, luego desciende proyec-tándose mucho más fuerte y girando a solo unos metros de la casa. Úrsula impresionada grita con la única intensión de que su hermano la escuche, inmediatamente este aparece con su piyama a cuadros- Va diciendo en tono regaña diente: porque gritas de esa forma no ves que me lograste asustar- Ella señalando en esa dirección le contesta: mira esa extraña luz, ¿Qué será?- Él (con cara de asombro) si, que podrá ser…- Si no estoy mal es un platillo, que estarán haciendo esos personajes galácticos a estas horas de la mañana… La luz del platillo volador se hace más intensa poniéndose de un azul más brillante, ven como desciende y al llegar al suelo se abre una compuerta de donde surge un sujeto verde con una cabeza descomunal, de su cara brotan unos sobresalientes ojos y es acompañado por otro sujeto más bajo pero con la misma apariencia- Úrsula impresionada dice: es mejor que salgamos a ver que quieren estos androides galácticos- Su hermano: si nos quieren hacer daño- Ella (en son de burla) ella no seas tonto, si nos quisieran atacar ya lo hubieran hecho- Si es así salgamos. Ella con el control abre la puerta saliendo de la habitación encuentran el living que atraviesan y sobre una mesa de un extraño metal él toma el otro control de la vivienda, el mismo acciona automáticamente se abre la puerta. Salen al encuentro de los dos extraños que los saludan con un apretón de manos- Celastro (el hermano de Úrsula) a que se debe esta sorprendente visita…- El más grande de los galácticos (en un idioma en clave) venimos de la galaxia Andorra, del planeta Miltrón que ustedes los terrícolas ignoran- El hermano dirigiéndole la mirada a su hermana agrega: ve y busca el super-portatil, así nos enteramos de donde vienen ellos. Ella va y vuelve guiando el aparato de roda chines mecánicos que lo coloca enfrente de las criaturas extrañas, lo enciende y automáticamente se ilumina la pantalla- Ella hablando dice: a ver busco la galaxia Andorra, ya la ubique ahora tiene que aparecer el planeta. Por qué no me aparece- El más bajo de los sujetos afirma con su voz: debido a que está protegido por un gas ultravioleta que lo oculta- Ella respondiendo: que interesante- El galáctico más grande: mi compañero se llama Timonel I, yo soy Tulco III. Si quieren venir con nosotros- Celastro (mirando directamente a los ojos a su hermana) mi  madre  antes  que  desapareciera  me dijo que una invitación no se puede desper-diciar- Úrsula: me parece bien que vayamos de lo contrario nos arrepentiremos. La creatura más baja con su sesto dedo les indican que ocupen el platillo volador- Úrsula haciendo un gesto dice: espérenos un momento que vamos por nuestras cosas- Timonel I (con un extraño ademan) no tenemos prisa lo esperamos. Ellos van de prisa al interior de la casa de donde vuelven con sus pequeñas mochilas cargadas sobre sus espaldas, así entran en el platillo que representa todo el sentido del confort, sentados en cómodas sillas giratorias, sienten que se elevan a una velocidad que supera muchas veces a la de la luz. En solo cuestión de instantes ven como se alejan de su sistema solar, perciben el cambio y comprenden que solamente con el hecho de pensar ya se están comunicando con las criaturas y que serán compensados con referente a sus gustos. Úrsula siente hambre y en ese preciso instante suena una agradable música para que en un acto seguido aparezca un robot con una bandeja con un enorme plato saturado de raviolis  con salsa de polcilicron, y una copa enorme con una rica bebida espumante, que comparte con su hermano. Satisfechos, un personaje que no han visto antes los convida para que ingresen en el living solar de la nave donde descubren una pileta circular con olas, y en una gran pantalla perciben con sus ojos el nuevo universo. Ellos se quitan lo que tienen puesto quedando a la merced de la naturaleza, no dudan en lanzarse al agua que los envuelve produciéndoles agradables masajes, más que satisfechos salen del agua, e inmediatamente una toalla suave los va secando y ya secos se vuelven a vestir con unas prendas aún más suaves. Se sientan a discutir con los verdosos personajes mentalmente sobre el estado de pobreza que viven la mayoría de los pobladores de la tierra- Tulco III agrega: que algunos estados de la tierra con su errada política de someter a otras naciones, que en pasadas épocas agotaron los recursos naturales dejando a esos pobladores en la más terrible miseria. El  nuevo personaje a través del pensamiento les muestra como sus antepasados trataron  una  y  otra vez de cambiar esta actitud inhumana, pero siempre fueron bloqueados. En ese mismo momento Úrsula y su hermano son trasportados por un sistema de traslación a una nave madre y son recibidos por un sujeto de la misma apariencia, pero cubierto de prendas luminosas que es el intérprete de la gerencia del planeta Miltrón. Ellos perciben a través de sus pensamientos que no pueden ser regresados a su lugar de origen ya que el imperio los desaparecería; por cuestiones respiratorias y ambientales no pueden bajar a Miltrón, que tendrán que deambular hasta que desaparezcan- Ursula tapándose el rostro con sus dos manos va murmurando con su voz: ahora que vamos hacer para zafar de esta situación ya que no quiero deambular sin sentido en esta inmensa nave- Celastro respondiéndole: yo creo que nada, ya que desde que aceptamos esta invitación nuestro destino se marcó y esta nave madre está preparada para que vivamos cómodamente  hasta que finalicen nuestros días. Los verdosos personajes telepáticamente se despiden para solamente en segundos desaparecer- Úrsula llorando desesperadamente le agrega a la cuestión: por lo visto quedamos a merced de los dioses- Tratemos de tranquilizarnos- Como quieres hermano mío que me tran-quilice si ni siquiera sabemos a dónde estamos- Yo creo que lo mejor es que tratemos al menos de enterarnos sobre todo lo referente a esta inmensa nave- No tenemos otra opción que indagar por nosotros mismos, debemos empezar por recorrer la nave- Entonces hagámoslo. Deambulan de un espacio a otro como perdidos, sin saber para qué sir-ven tantas máquinas  y los robots que van encontrando únicamente están programados para suplir sus necesidades básicas, tratan de indagar a estos autómatas de aluminio pero como es lógico no encuentran respu-está a su situación- Celastro interrumpe el silencio diciendo: vamos a la cabina  de  mando.  Después  de  mucho  esfuerzo  logran desbloquear la puerta, en el momento que la traspasan descubren a un grupo de robots que son los encargados de manipular la nave, un complicad tablero que con muchos teclados que al tratar de comprender para que sirven uno de los millares de botones. En sus mentes se anuncia que no pueden cambiar el curso de la nave. Viajando sin interrupción por los mundos infinitos de las estrellas ven cómo se van haciendo viejos, en tan solamente unos años desaparecer con todo y nave en el mundo de la eternidad.   

                                  LA TORMENTA ELECTRICA

En la prospera población de Llirmina en el planeta verde de Plansis, Viarna luego de un sueño alucinante abre los ojos claros de color avellana, se despereza viendo a través del alargado cristal el paisaje de los cerros nevados, haciendo un esfuerzo se levanta y al oprimir el botón la persiana de ultrano se cierra para quedar completamente en su intimidad. Decididamente va al baño y se sumerge en la pequeña pileta sintiendo el calor del agua que con la corriente centrifuga logra masajearla entrando en un relax supremo. Satisfecha con el baño se viste muy a gusto con un traje de tela flumine que le ciñe suavemente el cuerpo. Ya lista se hace trasbordar al multi-parqueadero donde toma su ultra-vehiculo que enciende y todo el andamiaje de su turbina la dirige suavemente hacia el aire, ella conduciendo va pensando en sus quehaceres viendo la inmensidad del valle, y al fondo el resplandor del sol que ilumina las montañas nevadas, en un giro llega a su destino al barrio colgante Blunsi, que está iluminado por el sol de la mañana que va mostrando sus bifurcaciones y sus construcciones monumentales. Ella maniobra para que descienda el ultra-vehículo, toma la gran avenida que la lleva al sur del enorme barrio donde llega a la orilla de un lago purpura, y luego al sumergido centro comercial donde sin dificultad esta-ciona su auto-nave, se baja caminando con pasos resueltos hiendo al elevador que la conduce a la oficina. Se sienta ocupando el moderno escritorio de cristal trasparente, enciende el ordenador viendo en la pantalla sus nuevos productos, que revisa uno por uno dejándola satisfecha; luego decide ver las competencias de sus productos y luego hace un profundo estudio de mercado, y en momento que comienza a diseñar su nueva razón comercial es interrumpida por un alto personaje que con su voz gruesa la saluda diciéndole: hola Viarna vengo a ver cómo te encuentras- Yo estoy perfectamente bien, ¿pero solamente vienes por esa razón?- No, quisiera que me acompañes esta tarde-noche a Fluniapolis a ver el juego de traquet- Claro que me gustaría ir ya que el juego va hacer increíble- A qué horas te vengo a buscar- Si no estoy mal el juego es a las diez, tranquilo que yo voy a tu taller un poco antes y te recojo- De acuerdo. Se despide de beso luego lo ve salir por donde entro. Ella aprovecha para seguir con su labor, al culminar con su nuevo diseño queda más que satisfecha, a continuación apaga el aparato y ve en la pantalla que esta ubicada en la pared el paisaje urbano con poca nubosidad. Piensa deliberadamente; si hay pocas nubes debido a que se siente un olor como a humedad. Luego que se toma un flujo-café, se para con el único propósito de alejarse de su trabajo. Ya montada en el ultra-vehículo surca la gran autopista donde ágilmente esquiva uno que otro auto-cilindro, llega a la periferia donde en un abrir y cerrar de ojos estaciona el super-auto, pero antes que pueda dirigirse con sus propios pies al taller, él la sorprende diciendo: me adelante para ganar tiempo- No te quedes ahí y sube. Ella hace que automáticamente se abra la compuerta y él entra haciéndose a su lado hablándole: terminaste con tu diseño- Si, me siento muy complacida con mí logro- Ella (maniobrando el timón) ¿cómo va el nuevo ultra-auto?- Casi estoy por finalizarlo solamente me faltan algunos detalles- Estas contento- Como no lo voy ha estar si ese vehículo va hacer un éxito. Al finalizar de decirlo le proporciona un beso en la boca. Ella manejando toma la ruta que los lleva a un largo descenso, pasan por un túnel muy bien iluminado que los deja directamente en el parqueadero del mega-estadio, se bajan para tomar la mecánica escalera que los lleva a la zona de palcos donde se presencia toda la marcación de la cancha, las otras tribunas atestadas de gente. Luego de un largo silencio ven salir uno por uno de los hombres-robot, unos con vestimenta blanca y azul y los otros con un uniforme de rayas rojas y negras. Los jugadores después del correspondiente saludo se preparan en sus respectivas posiciones. El juez pone la pelota ovalada en el centro de la cancha y haciendo una señal los profesionales del deporte corren velozmente, uno del equipo de los blancos se estira dándole alcance a la ovalada. Viarna grita y se abraza llena de emoción a su amigo. El jugador girando su cuerpo se lo lanza a otro compañero que corriendo se va abriendo paso entre sus contrincantes, desafortuna-damente una pierna lo derriba y la ovalada va caer justo en la mano de un adversario, que corriendo se la pasa a un compañero que con agilidad sobre pasa adversario tras adversario, en el momento que esta para anotar la extensión de un brazo se interpone en su camino- Viarna (tomándose el rostro) carajo le falto ser más rápido- El amigo (casi gritando) le faltó un pelo para anotar. El juego sigue en un ir y venir con muchas emociones de esa forma y sin que pase nada termina el primer periodo- Viarna va hablando: que juego más increíble lo único que falto fue al menos una anotación por lo menos, ahora quisiera al menos comer algo- El amigo le contesta: vamos a la cafetería a ver que podemos encontrar que satisfaga esta hambre- Vayamos de una que tenemos tiempo. Van por el gran elevador a la novena planta donde se mueven entre la concurrencia por un corredor movedizo, que en un pestañar de ojos los lleva a la enorme cafetería y un robot que les lee el pensamiento

les trae lo que desean a una de las tantas mesas, se sientan viéndose- Ella (comiéndose su copa de helado) seguramente el segundo tiempo va hacer más emocionante- Él (disfrutando de su postre de miel de ovelina) espero que en este segundo tiempo veamos muchas anotaciones ya que no pueden quedar empatados- Ella mirando a través del cristal hacia el firmamento va diciendo: desde esta mañana siento que va a llover y como está el cielo de nublado no lo dudo- No creo debido a que se ha pronosticado buen tiempo, veo que acabaste vamos que esta por reco-menzar el juego. En el momento que llegan al palco se pone la ovalada en movimiento, un rubio de uniforme blanco sobre pasa a uno de los rojos con negro, al intentar pasar a otro le comete una falta que el árbitro sanciona. Un moreno cobra dándole tremenda patada a la ovalada que sube para bajar en el interior del arco y termina en la red de fibra de vidrio. El estadio se para en una sola gritería, lo mismo hacen Viarna y su amigo que emocionadamente se abrazan. Después del griterío viene un silencio que es interrumpido por un relámpago que viene por un temple de luz ultra violeta, esto hace que el estadio cierre su techo de alumbre. El juego no desmaya en su accionar, en una acalorada disputa un jugador espigado de blanco luego de tomar un rebote con el pie izquierdo introduce la ovalada en la red, todos se paran a la vez festejando y con ese tanto el partido llega a la culminación- Ella (levantándose) que juego más espectacular si no lo hubiera visto no lo hubiera creído, ya que pasaron momentos muy emocionantes- Si tienes toda la razón del mundo, además estuvo muy disputado esto fue lo más increíble, ni hablar de las dos anotaciones. Acaso no eres fanático de los Cardenales- Si claro, pero un juego como este vale por la emoción que le imprimen los dos bandos. En el momento que quieren salir un relámpago ilumina todo el contorno haciendo un terrible daño en la iluminación del gigantesco escenario deportivo- Ella  distinguiendo  únicamente sombras va diciendo: ¿amor dónde estás?- El a grito herido: aquí, pero no veo absolutamente nada- Ella  tomándolo  de  la mano: que vamos hacer con esta situación de oscuridad- No podemos hacer otra cosa que esperar. En ese mismo momento se viene tremenda precipitación de agua, que al chocar las gigantescas gotas de agua con la techumbre del mega-estadio irradia una luz concentradamente azul, otro rayo se estrella contra las tribunas laterales y la chispa hace desaparecer a un montón de gente- El desesperado habla: no tenemos otra opción que no sea correr- Pienso lo mismo. Emprendiendo la carrera se abren paso, en el momento que están a punto de alcanzar el vehículo la luz inmaculada de un relámpago los alumbra que su reflejo queda convertido en siluetas sobre el piso de migaron, pero por suerte no les ocurre nada que tener que lamentar y rápidamente logran entrar en ultra-vehículo que ella hace arrancar velozmente distanciándose del lugar de los hechos.

                                             EL SATELITE

Héctor Burisi de profesión astrologo físico, siendo el propietario y constructor del satélite artificial Winsor G.14. Ubicado entre los planetas Gilver y Xavier, recibe un emisario del planeta Alfine, al señor Curt Clark especializado en turismo interplanetario. Que arriba en su nave personal con el único fin de solicitar la construcción de un hotel de cinco estrellas, al comunicarse en un dialogo directo con el doctor Francis Copelo que es el brazo derecho del astrólogo físico. Rechaza de plano tal solicitud que le parece descabellada, ya que atenta contra la tranquilidad y el bienestar de la comunidad.

El señor Clar que posee una gran red de suntuosos hoteles, al ser rechazada la petición, se dirige al planeta azul Xavier para que el presidente Ambur del imperio, de la corporación de planetas del sistema solar  intervenga  y  persuada al doctor Burisi. Si es el caso le deje sumi-nistrar escofra que es un tipo de mega-energía que se produce única-mente en el enorme planeta Gilver, siendo la única energía que posee tal voltaje que puede mover la maquinaria del satélite. El director del planeta al no obtener respuesta obstaculiza toda acción financiera, para que los proyectos de física astro cósmica se detengan, además le deja de suministrar escofra y por último al no existir un acuerdo suspende el suministro de gas daltónico para que el hidra-motor supersónico de su nave personal del doctor Burisi no pueda funcionar. El doctor en su desespero llama por vía satelital de la pantalla ultra-cósmica a varios planetas con el objeto de abastecerse de esos indispensables productos que son eje principal de su trabajo y de su supervivencia. Solamente recibe un rotundo no, pero esto no es motivo para que el profesional se desmotive, sino al contrario se prepare para la guerra política que le están haciendo. Sus amigos le aconsejan que insista en otra galaxia y al debido tiempo encuentra apoyo en la cooperativa de planetas del sistema solar Tinxis, que le proporciona todo lo necesario, haciéndose filial, y así seguir con sus investigaciones de astro-fisica, pero con la condición que sus inventos y sus investigaciones queden en esa coalición planetaria. El presidente Umbris Fiquerensis de esa organización de planetas quiere hacer una visita personal al satélite artificial Winsor G.14 con motivo de acordar proyectos científicos, comunitarios, y para estrechar más aún los lazos de amistad. Este presidente arriba un lunes en la mañana del 6.654 del calendario Otomán, custodiado por varias naves que llegan con grandes globos de colores que se dispersan en el firmamento. Es recibido: por la comunidad científica que pertenece y a la vez auspicia  el doctor Burisi; por sus amigos de la comunidad winsoriana, por su bella compañera  la  diseñadora de espacios artificiales la señorita Diana Kee-ton, y por el continente de robots obreros. El presidente acompañado de su  delegación  al  bajarse de su respectiva nave es recibido con todos los honores, este hombre importante con su charretera inter-espacial, con sus acompañantes son guiados por el mismo científico y por su compañera por el enorme satélite: primeramente le van mostrando el bosque artificial donde merodean entre los diferentes árboles traídos de los diferentes planetas, observando las diversas familias de monos; luego de este espectacular paseo los invitan a él y a su comitiva a la bahía de la hiper-represa de aguas verdosas a deleitarse con los productos frutales, todos satisfechos van a entretenerse a la pileta circular de mega-agua que consiste en un líquido que circula produciendo bienestar y de ahí son trasladados en una plataforma espacial a la alta colina folisiana de Vinfi, donde está establecida la única colonia de las pocas familias del satélite. Ahí visitan la bella casa construida sobre el aire, de manera ocular por Hector y Diana donde disfrutan en la amplia terraza de un ameno almuerzo, de último visitan las construcciones de los laboratorios de física espacial. Siendo testigo la misma comunidad se redactan los documentos que son traducidos a distintas lenguas oficiales que firman las dos partes. Recuperados en la sala de masajes, en la noche son guiados por todos los pobladores del satélite e inclusive por los niños al lugar de recepción, donde participan científicos y artistas que los acompañan a deleitarse de la gran variedad manjares, de deliciosos pasteles horneados con el ten blue, los fragantes cócteles y por el sonido de la música rock. Ya en la madrugada después de disfrutar del esplendor de la fiesta el presidente y su comitiva se despiden de cada uno de los pobladores partiendo del satélite dejando la tranquilidad de siempre.

Al pasar de los días el presidente Ambur del imperio, interviene con el poderío de su flota de naves de guerra, que es rechazada por un bloqueo estelar que desde cierta distancia no deja acercar a las naves armadas; por  más  que  este  inmenso  ejercito  amenaza  siempre es aislado por el bloqueo que consiste: en un mecanismo de gravitación, que como un imán en sus polos iguales lo repela dejando que los habitantes del satélite vivan en paz. 

                                  

                                EN LA CALLE DE MARTE

Olivare va caminando tranquilamente a través de la penumbra de la neblina rojiza, que no deja ver las enormes construcciones, se detiene con un sentimiento de incredulidad, a un peor esa densa atmosfera mar-ciana no dejan de ver las cosas como son si no las invierte en un espejismo que es muy semejante a la alucinación. Siguiendo en la penumbra siente una contradicción en su espíritu, sin poder determinar nada pasa ante una silueta más azul que de costumbre, que es algo así como la salida de un túnel  que deja ver al fondo la la claridad que se presenta muy distante de su vista, En una calle amplia delimitada por las edificaciones, en un principio no ve a nadie pero en el momento que cruza el ancho de la calle vislumbra a una mujer de apariencia rubia, en el momento que se acerca su figura se desvanece. Él piensa: ¿será que lo que vi fue real o algo que me imagine? Muy atento sique con sus pasos, esta vez pasa en frente de una pareja al querer hablarle las dos personas se desvanecen igual que la rubia. Esto lo intriga aún más. Al estar confundido prefiere alejarse de la ciudad lo hace subiendo una ladera de frente ve surgir una enorme luna completamente naranja- Él (con su voz interna) pero si marte no tiene un satélite propio, no termina de calibrar eso cuando ve a tan solo unos pasos correr a un niño que lleva puesto una especie de overol, y que va acompañado por un espécimen de robot. Olivare pone a punto sus pies y va tras ellos, en la carrera la luz se difumina y hace que la imagen padezca una trasformación, en  esa  situa-ción el niño se convierte en una especie enana de jirafa y el espécimen de robot  en  una  especie  de  elefantito. Él  insistente en su carrera, en el momento que les está dando alcance vuelven a la primera apariencia, al niño y el aparente robot. En el momento que quiere agarrar al niño este desaparece por obra y gracia de no se sabe guíen. Él queda libido, sin saber que pensar, qué hacer?. Insiste en su caminar, con ese ritmo lento descubre la silueta de una especie de palacete, no duda en ingresar por la enorme puerta determinándose un espacio muy bien iluminado, descubre entre la multitud a una antigua amiga, en el intento de aproximarse no la haya donde la viera. Él dominado por el desespero ve a un hombre, se le arrima para hablarle, pero antes de que mueva la boca el hombre ya no está. Rabiando sale por donde entro volviendo a la misma calle donde siente un silencio placentero que lo hace insistir en su vagabundeo, dobla encontrando una calle más angosta que lo conduce a una pequeña plaza de pequeños arbustos, donde ve levantada la estatua de un hombre de larga cabellera y de barba que sostiene un libro, guíen pareciera que dijera un inmortal discurso- Él se dice a sí mismo: ¿es acaso un poeta?, que lugar extraño acaso donde estoy…, acaso es una plaza terrícola…. Se da media vuelta para ver la inscripción y encuentra sentada sobre el escalón a la misma amiga que viera en esa especie de palacete, ensimis-mada leyendo un libro de poesía. Piensa: que tengo que hacer, si desaparece. Ella reacciona dejando el libro en el suelo de adoquines y se levanta, en el momento que él está pensado que hacer al respecto- Tocándolo va diciendo: hola, que te sucede o será que ya no me reconoces- El con cara de asombro le contesta: ahora no entiendo si estoy loco- Ella (más asombrada que él) como así, por favor háblame claro- Perdóname que estoy muy aturdido- Acaso que te pasa…- No lo puedo explicar, ni mucho menos me atrevo- Acaso este planeta te ha hecho daño- Bueno ahora que me has dirigido la palabra estoy más tranquilo, pero aún sin poder comprender- Como así…- Bueno eso ya no tiene importancia, más bien dime desde cuando estás aquí en Marte- ¿Por qué?…- No por nada, solo quiero saber- Está bien, vine hace dos semanas a visitar a mi tía- A qué bueno, ya he tratado de hablar antes con vos pero yo no sé porque te escabulliste- Como así, explícate mejor- Está bien, te vi en una especie de palacete entre mucha gente y en el momento que intente acercarme ya no estabas- Eso hace cuanto- no lo puedo precisar pero calculo que fue hace más o menos dos horas- Ella mira su reloj para luego dirigirle la mirada, va diciendo: eso no tiene lógica porque aquí leyendo llevo más de dos horas, antes estuve arreglando mis cosas, y no estuve en ningún palacete ya que me encontraba en esa casa que ves allá, que es donde vive mi tía Luca- El poniendo cara de inocente: de veras…- Claro que sí, no estoy mintiendo. Acaso te pasa algo anormal- Que no me pasa- Cuéntame que tienes una cara de asustado que no puedes con ella- Bueno comienzo desde el principio. Me gane una rifa que consistía en este viaje que incluía ida y regreso, lo único que no incluía es la estadía- ¿Cuándo Llegaste?- Supongo, no sé- Ella rascándose la cabeza le va murmurando con su voz: ya se, te paso exactamente lo mismo que a mí- Acaso que te sucedió…- Cosas imposibles de contar, debido a que tengo una terrible confusión que si le pongo bolas me volvería loca. Es mejor que vayamos a la casa de mi tía y te doy un par de pastillas para que puedas ver las cosas mejor- Bueno, aclarar la mente me vendría bien. Caminan a un mismo ritmo, él sin entender nada- Ella tranquilamente le dice: siempre te vi muy pálido, pero nunca momo en este momento. Llegan ante la fachada de la casa- Ella porque te enmudeciste- Debido a que me criticas…- Ella luego que se ríe dice: no es mi intención burlarme de vos, al contrario me preocupas. Con su monitor abre la puerta, ingresan en el interior de la casa entrando a la sala se sientan cada uno en un sillón de mimbre-  Ella soltando su voz: ya vengo voy a buscar el frasco de las pastas, sube las peldaños de la escalera, al  entran  al  cuarto  donde  duerme  ve  el  antiguo  mueble  y abriendo uno de los cajones extrae el frasco repleto de pastillas, volviendo  baja  la misma escalera y va directamente a la co-cina donde consigue un vaso con agua que se lo lleva y al sentarse ella él se toma las dos pastillas- Al rato él va murmurando con su voz: que bien actúan muy rápido, que bien ahora si tengo la conciencia de todo. Que diría por esta casa, si no estuviera en este planeta pensaría que estuviera en Londres un siglo antes- No te preocupes que yo percibo lo mismo, además creo que mi tía se trajo incluido al fantasma. Se ríen de sobremanera- Él porque lo crees así, acaso has visto algo extraño. Ella se vuelve a carcajear- agrega: solamente tengo esa sensación que no me la puedo sacar dentro de mí- Acaso has visto u oído algo extraño- Vaya ahora tu eres el cuerdo, no he visto nada solamente son suposiciones mías. Vayamos al comedor que el robot nos dará algo rico de comer y tal vez alguna bebida. Se levantan, sin pensarlo dos veces van al comedor y se sientan ocupando la larga mesa- Ella viendo al robot que se aproxima va palabreando: por lo que he percibido aquí en este planta los terrícolas sufrimos de alteraciones de la vista, confundiéndonos o percibiendo cosas que imaginamos ver- Te doy toda la razón, ya que la atmosfera marciana sé muy bien que me afecta, no tanto como para creer lo que vieron realmente mis ojos- Ella le contesta con un sobresalto con su voz suave: no seas absurdo si dices que me viste hace cuestión de horas- Sé que no es una idea descabellada que aquí en Marte de apariencia múltiple dupliquen a las personas- No lo creo, porque lo harían. Hacen silencio comiendo la tarta de verduras y tomando la bebida espumante, al acabar- El haciendo un gesto elocuente agrega con su voz: por muchas razones- Ella con cara de burla le contesta: ¿cómo cuáles?- Espionaje, razones políticas o motivos que ni intuimos- No sé porque razón, pero voy a seguir tu juego.  Porque no te quedas estos días aquí en esta casa que sola me aburro- Me parece una buena idea y de antemano te lo agradezco ya que me ahorraría el dinero del hotel, solamente necesito que me acompañes a ese lugar a ir por mis cosas- Primero comamos algo más que he quedado con hambre y luego hacemos eso- Es perfecto. Se hacen servir del robot unas enormes hamburguesas que lentamente van disfrutando- Ella luego de comerse un pedazo va diciendo: que opinión tienes sobre esta comida marciana…- Es un poco desabrida, cuando se tiene hambre sabe mucho mejor. Acabadas las hamburguesas salen, sobre la calle sobrepasan la pequeña plaza hablando de diferentes temas. En la gran avenida entran en un lugar aerodinámico, se sientan sobre unas sillas planas que solamente son sostenidas por la gravedad, a un peculiar robot le piden un multi-componente, que consta: de un jugo de una fruta exótica, con una torta de argula que un fruto semejante a la ciruela. Laureta comiendo al ver a través del cristal a su tía pasar y grita llamándola por su nombre, ella pasa como si nada- Laureta espera que ya vuelvo. Corriendo le da alcance la tía sin inmutarse se mete entre la gente sin poderla volver a ver, ella consternada regresa en frente de él- Va diciendo: tú tienes razón aquí pasa algo raro o cómo crees tú hacen el duplicado de las personas. Ya mismo llamo por si las moscas por el ultra-celular a mi tía Clara- Ella con el pequeño aparato en la oreja va diciendo: ¿Tía a dónde estás?- Como siempre aquí en la oficina trabajando, acaso no sabes…- Sí que se, simplemente quería comprobarlo- Seguro que no es nada más- Te importa que haya invitado a un amigo a dormir- Para nada, al contrario me agrada preciosa el hecho de que estés acompañada, eso me hace sentir mejor- Bueno tía gracias. Al dirigirle la mirada le va diciendo: lo confirme ella para nada se ha movido de la oficina donde trabaja, eso confirma lo de los duplicados- Vamos a ver qué más podemos descubrir. Se levanta, salen dispuestos  a andar de esa manera pasan ante una vitrina- Ella  señalando  un vestido de tela fluina va hablando: sí que está comprobado, ¿pero con que objeto?- Ya lo sabremos. Después de observar a la gente toman un trans- -taxi que sin demora los conduce al mega-hotel donde sin inconveniente recogen el equipaje. De vuelta en la casa ella le muestra en la segunda planta la habitación donde él dormirá, se sientan sobre la alargada cama- Ella enfrenta al silencio diciendo: ¿cómo vamos hacer para investigar?- No tengo ni la menor idea, bueno se me ocurre que vayamos al mismo sitio donde vimos el duplicado de tu tía- estoy de acuerdo, si es así movámonos. Salen a la calle, luego de atravesar la plaza van a la avenida que los conduce al centro comercial aerodinámico, se sientan sobre un pequeño muro de mármol a observar pasar a la gente que va y viene, sin presenciar lo que quieren ver se les pasa el tiempo- Ella desperezándose  rompe el silencio diciendo: todas estas personas si se les pueden llamar de este modo- Tienes razón ya que mi intuición me dice que la mayoría son androides que aparentan ser humanos- ¿Qué más podemos hacer aquí- Si vamos que no hay caso. Sobre la calle andan viendo hacia todas las direcciones- Él dice: se me ocurre que nos separemos- ¿con que objeto?- A ver si se parados cada uno de nosotros podemos ver algo que llame la atención, pero eso si tenemos que estar en contacto con el super-movil. Ella sale con pasos decididos hacia el sur, va caminando observando con atención a todo el que transita, al ver otro centro comercial, decididamente lo recorre viendo a la gente que transita, y las grandes tiendas. Entra en una donde se exponen en la vitrina suntuosas prendas de diferentes formas y materiales de textiles- Una mujer bastante alta con una bella sonrisa, gesticula sus labias interrogándola: quiere probarse algo en especial- Ella le contesta: solamente entre por curiosidad. Dándole la espalda se retira de la tienda para entrar en otra donde venden juguetes electrónicos y viendo un extraño juguete siente que suena el  super-celular- Ella lo contesta diciendo: ¿dónde estás?- Caminando por la avenida y vos- En un centro comercial en un almacén de juguetes,  cómo  va  la  pesquisa- Por  ahora no visto nada anormal, te vuelvo a llamar más tarde. Él se detiene en la entrada de un mega-cine observando detenidamente sin logra ver algo extraño, emprende la retirada y lentamente se dirige a una plazoleta, pero antes de llegar ve andando a la imitación de su amiga, en sin dudar la sigue viendo que la mujer se monta en un ultra-taxi, él se monta en otro muy parecido y le indica al robot que conduce que siga al otro ultra-taxi. En el tablero del vehículo ve cómo va subiendo la velocidad. Marca la clave en el pequeño móvil- Ella le contesta diciendo: ¿ocurre algo?- En este momento estoy siguiendo en un ultra-taxi a tu doble, quédate donde estas que en el momento que sepa donde me lleva esta persecución te vuelvo a marcar- Está bien, pero ten cuidado que nunca se sabe del peligro. El vehículo con el doble de Laureta toma por un bulevar donde el ultra-taxi se detiene, el doble de su amiga se baja; él hace exactamente lo mismo. La dama entra en una cilíndrica construcción, él siguiéndola ve como la mujer se mete en una cabina haciendo su traslación. Él piensa: a donde se abra ido. Llama a su amiga que aparece en instantes, le da un beso en la mejilla y luego le dirige la palabra: se metió en esa cabina trasbordadora- Laureta le contesta: será que nos arriesgamos y vamos allá donde está mi doble- Por lo que intuyo se ve que es muy arriesgado. Ella saca de su bolso sus lentes con los cuales alarga la visión, se los pone y habla: a ver que percibo, si hay algo extraño que no me deja ver- Él nervioso le palabrea: es mejor que nos vayamos a la casa de tu tía- Ella con un gesto de sorpresa le dice: cómo vamos a dejar lo que comenzamos, para nada me quiero quedar con la intriga- Si es así entonces entremos sin dudarlo en la cabina. Se introducen y al cerrar la puerta de una vez comienzan a girar desapareciendo del contorno, para aparecer en una edificación cóncava donde se percibe una atmósfera naranja que los invade, sintiendo como si algo extraño  entrara  en  su  espíritu,  preocupados   por   la situación caminan con la sensación de in- gravidez viendo que flotan- Ella: siento una sensación de olvido y que mi cuerpo en vez de moverse flota- No te preocupes que yo tengo la misma sensación, hay que estar aleras manejando la voluntad para no extraviarnos de lo que somos. Van flotando por un sitio incompresible viendo un mundo estacionario de estrellas- Ella rompiendo con el silencio dice: intuyo que estamos en un satélite artificial. Lentamente siguen girando, siendo sorprendidos por un grupo de humanoides que los intercepta- él más alto que lleva una especie de casco muy ceñido a la cabeza les pronuncia lo siguiente: como se atrevieron a venir a este sitio, acaso no saben que está prohibido para ustedes los terrícolas, ahora tendrán que sufrir las consecuencias, y además serán retenidos aquí para siempre. Ellos intentan correr pero sus pies solamente responden a la lentitud que impone el lugar- El mismo humanoide (ellos se dan cuenta que del casco sale un cable que está conectado a la espalda) va hablando; tómenlos que los vamos a llevar a que nuestros científicos los estudien y los trasformen. Sin poder modular palabra son tomados cada uno por dos de estos humanoides, los conducen a una puerta que aparece repentinamente ante sus miradas, que se abre siendo empujados cayendo por sus propios pesos de espaldas en un sitio de dimensiones que se confunden unos espacios con otros y donde cada sensación en solamente segundos difiere de la anterior. Son dejados a merced de la nada- Ella va diciendo: siento tantas cosas a la vez que si no me contengo creo que perdería la cordura- Él le contesta: aquí por lo que veo nadie puede ser sensato- Ella luego que cierra los ojos entona su voz: me doy cuenta que tantos pensamientos a la vez me van a enloquecer- No perdamos la calma, tratemos de concentrarnos en una sola cosa  para  no  disolver la psiquis- Pero como vamos a salir de aquí- Olivare va hablando: creo que nuestra voluntad puede actuar si hacemos lo que creo conveniente, a ver qué pasa si caminamos en círculo. Hacen lo prescrito- Ella agrega con su voz: ahora dos vueltas a la inversa, si hacemos esto creo que nos podre-mos estar con un único pensamiento, de  cómo  podremos salir de esta si- tuación- Si la nada es lo contrario del todo, tiene que haber un mecanismo que nos devuelva a la cabina. Giremos pero cada giro lo terminamos con un salto, así nos opondremos a esta gravedad que nos envuelve. Hacen durante horas lo indicado, ven como nacieron, como fueron superando las diferentes etapas de su vida. Para volver a percibir lo que son, volviendo a caer en una especie de abismo y con ese sentido de las cosa terminan sentados sobre un suelo completamente blanco. Se levantan dándose cuenta que se encuentran en algo así como un hiper-hospital, con la ventaja que los humanoides no los pueden ver, pero ellos si pueden vislumbrar su accionar. Van agilizando los pies por un inmenso pasillo dejando cuanto puerta van encontrando atrás, llegan ante una gigantesca recamara, donde se percatan con sus propios ojos sobre infinidad de capsulas de un material semejante al cristal, dentro de cada una se aprecian dispuestamente cuerpos erguidos. Revisan capsula por capsula viendo diferentes cuerpos de particulares personajes- Ella indicando con su dedo índice va murmurando con su voz: mira ese es tu cuerpo, ese otro es el mío, ese más allá es el de mi tía. Si no estuviera viendo esto no lo podría creer- El colocando las manos sobre la cabeza va contestando: con que objeto harán esto- Que peligro, tenemos que ir a la tierra a denunciar esto tan espantoso- Por ahora quisiera comer- Ni me lo recuerdes, que no logro comprender que tiempo ha pasado desde que comimos por última vez- El (poniendo cara de asombro) mira esa capsula que esta incrustada en la pared de metal, ven que probamos a ver qué pasa. Entran en la capsula que al cerrarla los devuelve al mismo sitio, dentro de la extraña capsula se dan cuenta que están que están en la misma cilíndrica edificación. Salen de la cabina al exterior- Ella viéndolo le dice: desde que llegue  a  este  planeta  por si las dudas llevo siempre este frasco de pastas, cuyo efecto te vuelve invisible- Con razón que nos libramos de los humanoides,  déjame ver el frasco que leo las re- comendaciones. Ella le pasa el frasco- El lee con su voz: duración de cinco a seis horas, según el organismo. Sin dudar sin agua de un solo empujón se las toman, en instantes se vuelven invisibles, bajan por las escaleras eléctricas, ya sobre la calle al ver un ultra-taxi detenido se montan en el utra-vehiculo- Ella habla: amigo aunque no nos vea llévenos al aeronave- Pero porque no nos vamos primero a lo de tu tía- No quiero que nos arriesguemos, ella por lo que siento puede estar implicada en todo esto- Si tienes toda la razón del mundo vamos de una vez a la aeronave. El vehículo a máxima velocidad los lleva a la avenida aérea remontado sobre el paisaje urbano, los deja a tan solamente unos pasos de la plataforma de vuelo donde vuelven a fluir en sus imágenes, compran el boleto y de una vez abordan la moderna nave que en cuestión de nada los lleva de regreso a la tierra. En Londres entre besos y caricias escriben la crónica que solamente logran publicarla en un modesto diario ya que los otros periódicos más prestigiosos no quieren acoger dicha crónica, ya que existe una confabulación que  directamente compromete a la federación de planetas que tiene compromisos con el estado del planeta rojo.

                     EN LA CIUDAD MODERNA DE SATURNO

Gustavo E. Bequer siendo un ciudadano que quiere olvidar su verdadera ciudadanía, este personaje de orejas muy cortas semejantes a las de un ratón, pero con una inteligencia prodigiosa que la dispone para sus inventos. Una noche en que acompaña a una amiga a su hiper-casa, en plena avenida presencian un brutal accidente de un plus-vehículo se estrella de frente con otro muy semejante- Gustavo razona diciendo: lo que es mala suerte para unos, para otro es buena suerte- La chica murmura con su voz: aquí en esta memoria he puesto las placas de los plus-vehículos, con esos números pretendo comprar dos billetes de diferentes loterías, o que tal como son dos números vos compras uno y yo otro- Me parece una idea formidable vamos de una vez a comprar los billetes de lotería. Al llegar ante una multi-casilla encuentran a un robot que vende los billetes de lotería, al cual le compran cada uno un número de billete de lotería. A los días los números que compraron son los ganadores que les otorga una enorme suma de dinero, con los cuales quieren realizar su sueño que los dos tienen entre las manos. La construcción de una super-nave, para realizar este sueño adquieren todas las herramientas y materiales necesarios, con los planos que han acumulado durante años emprenden con la ayuda de sus dos robots la difícil tarea. Dedicados a cumplir su sueño pasan varios años, hasta que un buen día logran finalizar la construcción de la famosa nave circular y espacial, que usa como combustible energía solar. Con todo preparado de antemano una bella mañana despegan en la nave en constantes giros que le dan una velocidad que sobrepasa a la de la luz, velozmente ven como la nave va dejando la tierra empequeñeciéndola. Uno de esos momentos de oscuridad sobresaliendo los astros que se ven mejor dispuestos y la tierra la aprecian como un astro más. Tienen tiempo para el amor y el recogimiento sintiéndose a gusto. Al abarcar las horas en su viaje  por  el   universo,  estando  cómodamente sentados en la cabina de mando ven en la distancia nítidamente los anillos de Saturno, a medida que velozmente la nave va avanzando comprenden la enorme distancia de su cometido, con paciencia en un pequeño lapso de tiempo se encuentran con la maza gaseosa de hidrogeno de los anillos del planeta, sin inconvenientes los atraviesan y entran en la órbita del planeta sin que la gravedad los moleste, descienden para establecerse rápidamente al frente de laberínticas y enormes construcciones  de diferentes metales de la ciudad ultra moderna de Espum. Ocultan la nave en un terraplén, se bajan y muy tranquilos caminan por un camino que asemeja una enredadera yendo directamente a un elevado jardín donde se detienen sentándose sobre una banca de aluminio a apreciar la panorámica de la ciudad, al estar satisfechos se levantan y al caminar por un sendero movedizo descienden velozmente a una gigantesca avenida donde registran con sus propios ojos la impresionante velocidad de los ultra-vehículos, que desaparecen para volver aparecer mucho más lejos de donde están ellos; aún quedan más perplejos al ver las enormes mazas estructurales de las grandes edificaciones que con sus formas revolucionan tés les dan las más extrañas apariencias, más admiración sienten en el momento que vislumbran a varios seres dotados de un bello y atlético cuerpo. La primera que los aborda es una preciosa joven que por supuesto es casi el doble de sus tamaños, al hablarles escuchan un extraño dialecto que no entienden absolutamente nada, que prefieren alejarse evadiéndola.  Decididamente mueven sus pies con determi-nación ya que la inteligencia no tiene ningún tipo de complejo, hiendo por una calle de enormes esculturas que observan detenidamente, se detienen en una especial que por el realce de los rasgos y su formas se ve renacentista, y esculpida por el mismo Miguel Ángel. Ensimismados por la belleza de la escultura los sorprende un individuo que sobre pasa sus tamaños que pronuncia algo incomprensible- Ella le dice: por favor repí-tanos eso que acaba de decir- El bello hombre cambiando de actitud y  de  lengua a un francés melodioso les dice: bienvenidos a este planeta, discúlpeme si los molesto y si me equivoco. Ustedes por lo visto vienen del planeta tierra- Ella le contesta hablándole: si claro, que bueno que le caímos en gracia- Si, sus apariencias me agradan de sobremanera, ¿dónde piensan permutar?, aquí no van a tener problemas, si respetan siempre serán bien acogidos. Vamos que los guío por la ciudad. Tranquilos van recorriendo un sin número de calles cuyas construcciones reflejan el buen gusto de sus pobladores, los tres conversando entran a una edificación donde de las paredes sobresalen bellos murales. Al querer subir una repentina puerta que va a su encuentro y sin incon-veniente los introduce en un lugar giratorio, pero en realidad sienten como el inmueble gira- Gustavo va modulando su voz: no entiendo como todo puede girar de esta manera sin sentir mareo- El hombre le contesta diciendo: no se preocupe que son meramente simples sensaciones. Estando en la altura de la construcción observan los lugares y a los seres con sus diferentes actividades artísticas- Ella interponiéndose al personaje va diciendo: cómo te llamas o como te dicen- Todos me dicen Fedor ya que aquí no acostumbramos a poner nombres, a las personas con el tiempo le decimos el apodo que nos venga en gana- Ella: es extraño pero no importa, mi amigo se llama Gustavo y yo soy Sofía. Se saludan como si se conocieran hace mucho, con un beso y un abrazo- Sofía: porque no entramos en esa taberna. Al entrar sienten un zumbido en sus oídos, al instante sienten la más deliciosa música, al mirar hacia el fondo vislumbran a un grupo de bailarina que danzan increíblemente y en la otra dirección a la interprete que luce un vestido largo, colorido y lleno de estrellas luminosas. Que canta con una voz dulce y clara. Se sientan ocupando una mesa que gira al compás de la música- Sofía mirando  a  Fedor  dice:  aquí  en  este planeta que acostumbran a tomar-    Aquí es como en la tierra se bebe prácticamente lo mismo, lo único diferente que tienes que pedir por el altavoz- Gustavo: qué tal si pedimos cerveza para todos. Los otros dos con un gesto dan por entender que están de acuerdo. Fedor por el altavoz pide tres cervezas de litro, e inme-diatamente un vientecillo dispone sobre la mesa las tres botellas de cerveza y sus respectivos vasos de cristal rojizo y trasparente y en su efecto ven las botellas que llenan los tres vasos hasta el tope. Brindan chocando los vasos, al ir tomando los dos sienten primeramente un jubilo, a continuación la emoción hace que todo brille- Gustavo luego que se da un largo sorbo dice: que delicia de cerveza, sí que me siento como alucinado- Ella: a mí me sucede lo mismo, me siento así de maravilla- Fedor luego que se ríe habla: es que aquí se acostumbra a ponerle a la cerveza una sustancia alucinógena. Al terminar de danzar las bailarinas hacen una venia y ocupan una de las mesas, la música sube de voltaje haciéndose más rápida- Ella alegremente dice: la música es increíble debemos aprovechar para bailar. Casi de un salto se levantan, aparece de repente una pista donde bailan sintiendo como si se elevaran varios centímetros del piso de aldrovo, con movimientos acordes con la música sicodélica se mueven plácidamente. Al cubrir con su mirada toda la dimensión de la pista de baile ven a otras parejas del tamaño de Fedor que se integran con gracia y de cierta manera al ritmo de la música-Gustavo al oído de su amiga: nunca antes me había sentido así de bien- Sofía: así me gustas más. Suavemente chocan los labios en un beso prolongado y no dejan de mover sus cuerpos lentamente- Fedor luego que se carcajea mete la cucharada diciendo: conque esas tenemos- Sofía zafándose de los brazos de Gustavo va diciendo: en vez de burlarte de nosotros deberías sacar a bailar alguna de las chicas que están sentadas en esa mesa- Sí que voy a sacar a la que más me guste de ellas. Resuelto de la silla se levanta, se para ante la mesa que ocupan las chicas, le dice a una pelirroja, que inmediatamente se levanta lanzándosele. A los cuatro se les suman otras parejas bailando hasta no poder más- Sofía con voz de cansancio dice: no puedo más vamos afuera a tomar un poco de oxígeno. Los dos salen a tomar aire, contemplan las edificaciones que cuelgan en un alud estacionario- Gustavo quiebra el silencio hablando: no puedo entender la gravitación y mucho menos el sentido de las cosas de este planeta- Ella le contesta: no trates de descifrar el sentido ya que aquí la lógica es otra cosa y además siempre te aturdirás- Sí que tienes razón, es mejor vivir como venga todo. Son interrumpidos por Fedor y su amiga- Esta última dice: nosotros nos vamos hasta la vista. Ven como se pierden en la distancia- Sofía viéndolos desaparecer dice: nosotros que vamos hacer- Si no estás cansada caminemos- Estoy perfectamente podría caminar durante mucho tiempo. Movilizan los pies pasando por una rotonda, dando una vuelta por calles circulares llegan ante la presencia extraña de un parque, los árboles a pesar de tener abundantes hojas su tronco y sus ramas son metálicas, y sobre el suelo de aluminio se alzan enormes estatuas mitológicas, a la medida que pasan por las esculturas reciben mentalmente su correspondiente información, por último se estacionan al frente de una escultura que representa a una mujer que lleva en sus brazos cargado a un pequeño niño- Sofía con una mirada resplandeciente dice: esta es Ebea que surgió con su hijo de una laguna con la convicción de poblar este planeta. Todos aquí son hijos de su hijo Ultran y de ella- Gustavo: que buen sentido de la belleza tienen aquí en Saturno. Ahora si estoy cansado que tal si regresamos a nuestra nave- Después de esta travesía que bien me caería dormir. Al querer ir en dirección de la nave son sorprendidos por un par de sujetos interpo-niéndose en su caminar, uno de ellos le pone la mano en el pecho a Gustavo- Luego le dice: haber que usted nació en el planeta tierra, que es un  gran  inventor  y  que  viniste  con  ella en esa nave que entre ustedes  fabricaron. Gracias a la desgracia de otro que adquiriendo un numero desafortunado que es lo contrario de lo afortunad, que con esa lotería interplanetaria ganaron una gran suma de dinero. Que vieron con sus propios ojos los ultra-vehículos que se estrellaron de frente, pereciendo todos sus ocupantes- Sofía luego que empuja a uno de los personajes a grito herido le palabrea: cómo es posible que sepan tanto sobre nuestras vidas… . Ella al dictaminar aquellas palabras ven como se esfuman los personajes en el ambiente- Gustavo que extraño fue todo esto, si mi pecho no hubiera sentido esa dura mano, y si mis ojos no hubieran presenciado lo que vi. No lo creería- Yo creo que fue producto de nuestras conciencias, es mejor que nos marchemos cuanto antes ya que esto fue más que suficiente. Después de que son trasportados por un efecto del monitor a la nave, despegan y viajan hacia su propio destino.

                        CELIN EL PLANETA DE LOS ROBOTS

En el planeta Celin se está desarrollando un sistema cibernético bajo la dirección del doctor Fausto Gintesco, queriendo aplicar este sistema téc-nico para fabricar un poderoso robot que superaría la inteligencia más evolucionada. El proyecto al poco tiempo es aprobado por la organización planetaria y por el consorcio de Laurnica que maneja las finanzas, las propiedades y los proyectos secretos del planeta. Siendo la nación de Lupsa cuya capital Metrópolis I. Este afamado hombre de ciencia es trasladado de la capital a la secreta ciudad de Alfra donde se resguarda la edificación donde están los laboratorios y los talleres más modernos de todo el sistema solar. El doctor Gintesco al llegar se pone a la cabeza del ambicioso proyecto, al día siguiente convoca a los ingenieros especializados en robots Carlo M. Varela y la especialista de este reglón Emile Truman, a los expertos en mecánica espacial el señor Arnoll Pianchi. Con  todo  a  su  favor  comienzan  a  desarrollar el ambi-cioso, para poder cumplir con ese objetivo hacen traer del planeta Xilo triptano, del planeta Listi el material pliluxios que es un metal muy flexible que únicamente se encuentran en las profundidades de los volcanes de ese planeta; metales que son indispensables para poder conformar las extremidades y el celebro del robot. El doctor Gintesco con la ayuda de sus auxiliares comienzan a armar la parte ósea con un alambre oolítico que después de armado se hace muy fuerte, luego van haciendo todos los órganos y miembros con triptano y otros materiales que son diferentes metales. Dándole sincronización y una resistencia a toda prueba. Después de un merecido descanso, bajo la coordinación del doctor Fausto reanudan el trabajo construyendo con los metales ya mencionados el celebro y el recubrimiento del sistema operativo con una membrana centrifuga tan resistente como el hierro, a la vez flexible y liviano como una pluma. Ya lista la parte interna comienzan a fabricar la parte externa que le dará la agilidad y la velocidad para maniobrar y defenderse de un ejército si fuera necesario. Para culminar se le hacen los pies, las manos duras y agiles; por un dispositivo ultra-electrónico que tiene una pequeña saliente en el dedo índice que está hecho con el objetivo de que dispara un gas de plutonio que desaparece al más impecable de los mortales. El día que le dan vida al robot llamado: XV17 bajo la supervisión del señor Gintesco y de sus auxiliares cumple a la perfección complicadas tareas que a varios hombres le llevaría meses; lo utilizan para expediciones a otros mundos, de una forma y de otra cumpliendo su trabajo con cabalidad, sin tener en cuenta que a la medida que avanza el tiempo de operación va adquiriendo su propio espíritu. Una mañana que con sus capacidades inteligentes repara a otros robots, luego de un incidente con un humanoide auxiliar, con mucho odio lo toma por la cintura y lo lanza contra una pared del recinto dándole una destrucción inmediata y aliado con los otros robots sale hu- yendo, tienen que  llamar urgentemente al doctor Gintesco para que personalmente  se encargue de la situación, este en una super-moto vola-dora lo encuentra muy tranquilo al lado de los robots jugando en un parque con un centenar de niños- El hombre barbado va diciendo: por favor niños apártense de los robots que son peligrosos- Uno de los pequeños le contesta: no me quito porque ellos son nuestros amigos- El doctor se dirige a su creación hablándole: usted aquí jugando con estos niños, mientras tanto allá en la congregación lo están necesitando para desempeñar varias funciones de gran importancia- El robot le contesta con su voz metálica: que puedo hacer si no me divierte el trabajo, me revelo ya que fui hecho para a destrucción, prefiero quedarme aquí ju-gando con mis amigos los niños- Fausto: acaso lo fabricamos para jugar No insista que no quiero hacer nada que me comprometa- Los niños en coro gritan: déjelo en paz que quiere seguir jugando con nosotros. Él decididamente con sus pasos se cerca al robot y torpemente le manda la mano con el propósito de tomarlo que el robot ágilmente logra esquí-varlo cayendo el doctor de frente contra el suelo, todos se ríen inclusive el robot. Al volverse a levantar el doctor Gintesco el cilíndrico robot lo va tomando del pecho y lo levanta para ponerlo de cabeza, los niños gritando de la alegría se ríen saltando de un lado para el otro diciendo: láncelo. Al volverlo a tomar lo lanza hacia arriba para recibirlo con sus largos brazos, repite lo mismo varias veces poniéndolo sobre el suelo completamente pálido de la rabia y despelucado. Los niños no pueden parar de reírse. Al verse ridículo sale corriendo con el aplauso de los niños, entre este robot y los otros levantan a los niños para acomodarlos sobre los hombros de metal, y así llevar a los infantes de a uno donde sus padres o sus familias, terminando con la última niña. El XV17 se separa de los otros robots que vuelven a su lugar de origen, mientras él toma la travesía  por el campo abierto llegando a una pequeña chacra, al golpear la puerta de la vieja vivienda le abre una anciana que al verlo primeramente se asusta llamando a su viejo esposo- Este le va diciendo: que quiere de nosotros- El robot le contesta con su voz metálica: no se asusten que quiero ayudarlos en sus faenas del campo- La anciana más que aterrada le dice: usted señor robot si está capacitado para preparar la tierra y para la siembra- Mi mecanismo está desarrollado para cumplir cualquier tarea difícil que sea- El anciano: si es así se puede quedar con nosotros ya que nos va hacer de gran utilidad. Pasado el tiempo el robot hace prosperar a la viejitos arando la tierra donde siembra todo tipo de hortalizas, además moderniza la casa. Al tomarle aprecio la pareja de viejitos se convierte en parte de su familia. Al buscarlo por tierra y mar el ejército de la federación  de Laurnica ya intuyendo cuando sobre-vuelan ese territorio se esconde entre los desperdicios logrando que no lo encuentren. En sus ratos de esparcimiento el robot con su clara memoria, cuenta todo lo que le hicieron hacer en la organización: sobre las expe-diciones donde destruyo todo tipo de humanoides y como se enfrentó con otros robots, de cómo invistió a varias naves. Después de contar ese mal rato de su existencia de la cual se revelo, termina contando tiernas historias que alegran a los presentes, que en su mayoría son niños. El robot como todo lo ejecuta de una forma muy rápida dejando los trabajos impecables tiene tiempo de sobra que lo utiliza para jugar con los niños y como nunca duerme prefiere cuidar a los pequeños en los momentos que sus padres tienen que salir; claro a veces lo convidan a los bailes que disfruta haciendo reír con sus gestos alegres, al regresar siempre trae a los borrachos sobre su espalda para depositarlos como tontos en sus lechos respectivos.

Una tarde lluviosa en el momento que termina un enorme surco, varios agentes del servicio de inteligencia al estar merodeando por ahí lo descubren ya que descuido cubrir su apariencia. Uno de los uniformado con ganas de hacerse el héroe  da la orden para que lo detengan pero el robot para su desgracia le propina a cada uno de los agentes tales patadas que inmediatamente se derrumban contra el suelo, volviéndolos a tomar de cabeza los entierra como estacas dejando ni siquiera el rastro. Después del suceso el robot no quiere saber nada de su antigua existencia, que el mismo se trasforma en un extraño animal, y además se construye con toda la chatarra espacial una nave, con la cual viaja durante meses a un lejano planeta. Donde sin compromiso pero si con la debida voluntad siembra la tierra con el único objetivo de ayudar a esa colectividad, y siempre está dispuesto a entregarse a aquellas personas que aman la vida y a jugar debidamente con los chiquilines de su nuevo hogar.

                                     

                                    UN VIAJE A JÚPITER

Las sombras de los árboles se agita sobre el piso gris linóleo de tierra donde se alzan las extrañas construcciones, oscilando como verdaderas hojas y ramas. Bliurna al ver sentada el espectáculo saturado de naturaleza y los logros del hombre, cierra los ojos con el propósito de no perder su concentración y para que las hojas se vuelvan más verdes de lo que son. Al volver abrir los ojos lentamente se levanta dando unos pasos amortiguados atraviesa la luz solar viendo aparecer a su antigua amiga la señorita Glema Branson que su bondad de ver al mundo la hace que camine pensativa- Ella la llama diciéndole: veo que estas ensimismada en tu mundo por esa razón ni siquiera te has dado cuenta de mi presencia. La amiga reacciona yendo hacia ella, se detiene ante su presencia abrazándola descubriendo en su mirada la sombra de su amiga- Bliurna con un tono melancólico dice: me duele irme pero comprendo que aquí ya cumplí el ciclo, ahorra solo estoy esperando que arribe la nave- Ya entiendo te marchas a Júpiter pero lo que no se con cual propó-sito- Simplemente quiero ver y sentir otras cosas por esa razón me voy al planeta azul. Las dos se sientan sobre el césped divisando las diferentes construcciones que al darles los rayos solares parecieran que se movieran, y en el momento que más absorbidas están en la contem-plación, primeramente se escucha un ruido suave que va aumentando, seguidamente ven la silueta de la nave que desciende estableciéndose sobre la grama- Bliurna mirando a su amiga le palabrea: no quieres venir con migo- Tengo que hacer- Acaso no puedes suspender lo que vas hacer por unos días…- Si, espera y llamo por el multi-movil. Al marcar suena el timbre hasta que contesta una voz al otro lado del planeta diciéndole: compañía de seguros del universo en que le podemos servir- Soy Glema Branson voy a cambiar la fecha del trabajo para una nueva ocasión- Señorita si no viene en la fecha y hora convenida perderá el trabajo- No me importa perderlo ya que me ofrecieron algo mejor hasta nunca. Ella al haber terminado con la llamada se sonríe viendo surgir de la nave a un robot- que mirando a Bliurna dice: qué esperas para ocupar la nave- Voy con mí amiga te la presento ella es Glema Brason. El robot le estrecha la mano de metal- Diciéndole: mucho gusto, yo soy el encargado de esta nave- El gusto es mío- Entren en la nave que ya me dieron la orden de arrancar. Al entrar en la pequeña nave cilíndrica se acomodan en las cómodas sillas, enseguida al cerrarse la compuerta sienten que la nave despega hiendo a gran velocidad, ven a través del vidrioso cristalino la extensión del planeta verde que a la medida que avanzan se ve más pequeño, hasta volverse algo insignificante- Glema rompiendo el silencio con su voz: será que vamos a tardar mucho- El robot le contesta: con este tiempo favorable llegaremos en menos de lo pensado. Al dormirse las dos el viaje sigue en su normalidad, en un momento que pasan cerca de otro planeta la nave es interceptada por un enorme platillo volador, en  la  pantalla  se  ve  nítidamente  la monstruosa nave y al salir una voz amplificada las despierta escuchando: voy a manda a uno de mis hombres. Al terminar, en la capsula trasbordadora surge la silueta de un hombre extraño, al salir va diciendo: soy una invención, como las cosas que aparentan ser. He venido con el único objetivo de inspeccionar esta nave y de hablar con ustedes. Al ver minuciosamente la nave se sienta al lado del robot que conduce el control de la nave- De una le da movi-miento a su voz: ustedes por lo que me he dado cuenta vienen del planeta verde, lo que no se es a donde se dirigen- El robot le contesta: vamos a Júpiter- ¿Con que objetivo? Biurna: a descansar y a divertirnos, después ya se verá- Si es así no los hago perder más tiempo me marcho. El extraño sujeto vuelve a la capsula donde en breves segundos desaparece- Glema: que tipo- El robot: no es una persona como ustedes es un androide, que lo mandaron a buscar algo que mi mecanismo no me lo permite saber- Biurna: no hay porque preocuparse seguramente fue una búsqueda de rigor- Glema: lo que no entiendo que vino a buscar a esta nave- El robot: nada porque aquí no tengo nada escondido. En la normalidad del viaje ellas se vuelven a quedar completamente dormidas, solamente se despiertan por un sacudón de la nave viendo el contorno del planeta fucsia, lentamente descienden sintiendo la atracción del planeta hasta sentir finalmente el contacto con la atmosfera del planeta, al detenerse completamente el robot abre la escotilla y al salir los tres aprecian la extraña naturaleza que rodea un lago de aguas trasparentes y al otro lado del conjunto de agua las muy altas edificaciones circulares que a la vez están rodeadas de descomunales árboles que les dan sombra- Glema: que espectáculo de naturaleza si no hubiera venido nunca hubi-era sabido que me estuviera perdiendo, de verdad que todo aquí es bellísimo- Yo ya sabía dónde venía por eso te convide a venir, ya te darás cuenta lo lindo que lo vamos a pasar. En el camino que rueda por sí  mismo  aparece un elegante sujeto- Que les habla diciéndoles: bienve-nidas a este hotel de categoría, yo soy Lery desde este mismo momento estoy a su disposición, sigamos el sendero. Estáticas avanzan viendo el agradable contorno del lago, luego las inmensas columnas que sostienen las muy grandes edificaciones circulares, que hacia abajo bordean los bellos jardines de exuberantes plantas y con flores de diferente índole- Glema sonriendo dice: qué tal si no vienes te hubieras perdido tanta belleza- De sobremanera me gusta todo lo que mis ojos están descubriendo- El elegante señor las interrumpe palabreando: si quieren en estos parasoles pueden sentarse a tomar algo- Biurna: con este calor preferimos cambiarnos con una ropa más ligera ya que lo que llevamos puesto es inadecuado- Vamos por este lado que ya mismo las llevo al departamento que de antemano he preparado para ustedes, ahí van a encontrar ropa adecuada para este clima. Caminan por una extensión de enormes y variadas palmeras, para llegar a un enorme modulo circular donde en la distancia se ve la enorme piscina de olas- Glema: estoy impresionada ya que en este lugar todo es dimensionado a la última potencia- El elegante sujeto: es por este lado. Pasan por el camino que se bifurca en dos ramales, el derecho los lleva primeramente a un jardín de donde sale el más rico perfume- Biurna va murmurando con su voz: que olor más increíble si lo sientes Glema- Es imposible no respirarlo. Luego el mimo sendero los lleva ante la puerta circular y gira-toria que al entrar se dan cuenta que las camas y los muebles están flotando varios centímetros sobre el piso- Él indicando con un ademan dice: sobre esta pared pueden apreciar un botón que gira en los dos sentidos, a la derecha todos los objetos cambian de lugar, y a la izquierda la pared se gira apareciendo un mueble que contiene todo tipo de vestimenta apropiada para este lugar. Las dejo para que descansen y disfruten. Ella hacen que la pared gire surgido un enorme vestidor de fina madera muy brillante, ven colgada con su correspondiente gancho cada prenda de vestir, eligen uno de los tantos biquinis, luego de ir al baño donde en la tina toman un agradable baño, al secarse por intermedio de un secador electrónico se ponen Glenda un biquini azul turquesa que sale con su cabello negro, y Biurna uno de color naranja que hace juego con su cabello rojizo. Al salir andan moviéndose entre los jardines al encontrar  uno  de  los  parasoles se hacen servir de un robot cada una un delicioso jugo de frutas desconocidas- Biurna le habla a su amiga: que tal tu jugo de Golón- Sí que me agrada se asemeja algún cítrico sin poder determinar de cual se trata, debido a que es un poco asido pero a la vez es dulce. Que tal el tuyo- Yo diría que se asemeja a la fresa sin ser exactamente esa fruta, sí que me gusta y siento que me refresca. Al terminar con el contenido de los vasos de cristal se levantan- Glema: qué tal si vamos a la piscina de olas- Vamos. Se introducen de a poco sintiendo el agua cálida sintiendo el movimiento del agua, se meten una y otras veces entre las olas sintiendo la espuma suave, al retirarse un poco el agua llegándoles al ombligo se viene tremenda ola que al lanzarse la logran tomar llevándolas a la orilla- Biurna: qué maravilla que tal si lo volvemos a intentar. Vuelven por debajo del nivel del agua a traspasar la venida de una ola y se establecen en el mismo lugar de antes, vuelve a ocurrir lo mismo llegándoles el agua al ombligo, al retroceder el agua ven venir otra ola semejante a la anterior haciéndose arrastrar hacia la orilla- Biurna estoy extenuada- A mí me ocurre lo mismo, que tal si nos acostamos en esas camillas a tomar el sol. Al salir de la pileta se acues-tan sobre las camillas a asolearse, disfrutan viendo el pasar de las pocas nubes- Glema tranquilamente va murmurando con su voz: aquí veo que las nubes son más rosadas- Si yo las veo con ese tono de color. Se profundizan, al poco tiempo se despiertan sintiendo un ardor en la piel-Biurna saliendo del silencio dice: que ardor que siento en la piel- Mira como nos hemos quemado, lo  extraño  que en vez de estar coloradas estamos moradas- Si  por lo visto el sol pone a la gente con este tono de color. No debemos es ponernos más al sol, mejor vayamos al restaurante a ver que podemos pedir de almuerzo- Si creo que es lo más conveniente, además ya tengo hambre. Al estar acostadas lentamente se van levantando de donde están, andando toman el camino que las conduce a la zona deportiva viendo las diferentes canchas sin ver al menos un alma. Al cruzar un puente donde se aprecia hacia abajo un río de aguas de color azul turquí completamente trasparente que deja ver extrañas piedras semis preciosas, al detenerse a mirarlo- Biurna dice: que río más exuberante, parece de cuento- Tienes toda la razón ya que es supremamente precioso ya que parece de leyenda, vamos que ya no aguanto más el hambre. Al terminar de cruzar el puente caminan por un sendero donde de los dos lados hay un inmenso jardín de matas muy floridas, y árboles de hojas fosforescentes, con ese sentido de la naturaleza llegan ante el recinto del restaurante que es sostenido por grandes columnas jónicas, un robot con un bello delantal las hace seguir, al ver el lugar solo les cuesta decidirse que mesa ocupar- Glenda habla: sentémonos al lado de esa palmera que seguramente deberá ser más fresquito. Caminan hasta el lugar de la palmera poniendo sus culitos sobre dos sillas continuas, al verlas uno de los robots se le acerca- Diciendo: están cómodas- Biurna: más cómodas imposible, la cuestión es que tenemos un hambre terrible. El robot en un acto de magia hace aparecer la cartas y sin dudarlo se las entrega- Glenda luego que ve la carta va diciendo: amiga ya sabes lo que vas a pedir- Me he decidido por el bagre en salsa de mariscos- A mí me trae un estofado de carne de res- El robot con gracia agrega: de tomar que desean- Biurna: qué tal si pedimos un jugo de frenza- Acaso sabes que fruta será esa- Arrisquémonos y lo probamos- Está bien- Ese es el pedido- Glenda: eso hemos decidido, dos mujeres no se echan atrás. En menos de nada  mágicamente tienen lo que pidieron sobre la mesa de cristal de vidrio, no dudan en empezar a disfrutar el almuerzo-Glenda luego que prueba un bocado dice: Que delicia de estofado de carne, prueba el jugo a ver como esta… .Ella de la jara de cristal se sirve en el vaso y al probarlo- Modula su voz: está muy rico pruébalo. Ella misma se encarga de servirle en el otro vaso a su amiga- Ella luego que lo saborea dice: es magnífico. Comen en silencio viendo el bello panorama que las rodea, al acabar más que satisfechas- Biurna: ahora que terminamos con el contenido de los platos que hacemos…- Vamos a la sala de música a ver qué tipo de melodía podremos escuchar. De las respectivas sillas se levantan empezando a caminar por el sendero que va entre la floresta, a cada lado ven las extrañas flores que se asemejan al plástico. Excitadas llegan a la enorme construcción, entrando por la puerta al amplio salón donde en la distancia ven en la alargada y redondeada tarima se encuentra un enorme piano de cola, al ocupar dos sillas de tantas se acomodan los audífonos que al escuchar la música clásica las traslada mentalmente a otra realidad, lográndose irse en sus sueños solo regresan viendo la oscuridad que se ciñe a través de los enormes ventanales- Glenda abriendo los ojos dice: no sé cuánto tiempo llevamos escuchando música- La amiga quitándose los audífonos- Solo vi que modulaste los labios, acaso que dijiste- Que cuanto ha pasado desde que estamos aquí escuchando música- Solo veo que es de noche, que tal si vamos a dormir- No seas tonta vamos a afuera a ver qué más podemos hacer. Al salir se encuentran una inmensa luna que está saliendo de la floresta y que a la vez se proyecta en una pequeña laguna donde en el fondo se aprecian peces de colores, que hacen a la vez que contrasten con el reflejo lunar- Glenda sintoniza su voz: qué belleza lo que estamos presenciando con nuestros ojos, nunca antes vi algo ni semejante- Yo opino exactamente igual. No acaban de decir eso cuando sienten unas gotas gigantescas de lluvia- Glenda: corramos que nos mojamos- No jodamos más y vayamos a cambiarnos. Vuelven a la habitación donde están alojadas, luego de un baño en la tina se visten provocativamente con prendas escotadas, ligeras y coloridas, salen con la alegría reflejada en sus rostros, caminando encuentran una pared circular completamente blanca donde enseguida se proyecta diferentes imágenes increíbles del planeta de lagos, bosques y de montañas nevadas y en diferentes estaciones del año- Glenda al estar cansada de ver tantas imágenes dice: Biurna tengo un sueño terrible me voy a dormir- Vete tranquila que yo voy más tarde. Se despide de beso, luego desaparece en la profundidad del camino. Ella al encontrarse sola camina viendo los visos azules de la noche, en una banca extraña de formas de madera se sienta a contemplar la luna viendo sus destellos se queda dormida y es auto-trasladada a la otra cama donde no duerme su amiga.

Muy entrada la mañana, con el sol que viste de amarillo todo el contorno. Viendo el espectáculo a través del cristal de vidrio Biurna tocándole suavemente el rostro intenta despertar a su amiga, ella al sentir las caricias abre los ojos- Tocando la cama va diciendo- No lo puedo creer como he llegado a esta cama si viendo la luna me quede dormida en una extraña banca de formas de madera, me acuerdo como llamarme Glenda- Seguramente eres sonámbula- Que soy que…- Sonámbula- Sí que lo creo- No jodamos más y salgamos. Van cada una al baño a hacer sus necesidades y aprovechan de una vez a bañarse en la tina, listas con el mismo biquini del día anterior dispuestas a gozar salen luciendo sus lindos cuerpos, en el sendero lo primero que ven es a un enorme grupo de personas haciendo un escándalo bárbaro que van a las piscinas- Biurna viendo el bochornoso espectáculo dice: de donde salió tanta gente, que mala honda esto ya no es lo de ayer- Tienes razón esto ya dejo de ser un lugar tranquilo. Recorren todas las piscinas que están atestadas de gente- Glenda  viendo  a  un par de barrigones que se aferran al borde la piscina va murmurándole a su amiga con su voz: no aguanto tanta concurrencia- La amiga le contesta hablándole al oído: se me ocurre una idea, que vayamos al rio. Al quererse encaminar encuentran en el sendero a una pareja- La chica: a donde van- Biurna viendo su apariencia les dice: por lo visto vamos al río- El muchacho:¿podemos ir con uste-des? Biurna: preferiría que no- La chica: ustedes no caen bien ya que se ven interesantes, déjenos que las acompañemos- Glenda viendo directamente a los ojos a su amiga: qué opinas- Ya que insisten dejé-moslos ir con nosotras- Está bien- El chico hablándoles: mi novia se llama Florencia y yo soy Enehias- Ella es Glenda y yo me llamo Biurna. Se saludan de beso- La última va murmurando con su asentó: me suena que nos metamos por este lado. Caminan saliéndose del camina por el largo pastal al pisar el chico es sorprendido por una larga serpiente que asustada entona sus alas lográndolo asustar- Glenda: que susto el que te has llevado con esa extraña serpiente que como tiene alas afortunada-mente salió volando, tenemos que tener cuidado a donde pisamos. Caminan uno detrás del otro hiendo el muchacho de último, primeramente llegan a la zona de enormes palmeras que los conduce ante la orilla del río- Glenda metiendo sus pies dice: lo tratamos de pasar al otro lado a nado ya que se ve algo profundo- Florencia: y si mejor lo bordeamos- Biurna: la apoyo me parece mejor idea- Enehias: entonces hagámoslo. Caminan entre las grandes piedras, unas veces tienen que ir nadando a provechando la corriente, de lado y lado del río se aprecia una exuberante vegetación acompañada de enormes árboles, andan viendo en la distancia una enorme cascada que cae de una gran montaña- Enehias: si vamos por este lado tal vez podremos trepar la montaña. Siguen por donde dijera el amigo entre una vegetación alta que los lleva a un estrecho sendero de piedras cristalinas donde ven que se reflejan sus cuerpos impresionantemente- Glenda  viéndose  a  través de esos espejos de piedras va diciendo: como nos vemos reflejados en estas piedras cristalinas, definitivamente esto no es para todo el mundo. Al llegar ante un gigantesco árbol se detienen a ver las raíces que sobrepasan sus tamaños y la gran altura del árbol- Florencia Tomada de la mano de su novio dice: cuanto medirá este gigantesco árbol- El novio por lo menos ciento cincuenta metros- Brenda: realmente es altísimo no creo que haya otro tan inmenso. Luego de la contemplación siguen cuesta arriba, en un tramo difícil por lo empinado ven en la distancia algo terriblemente alargado que girando se pierde en la distancia- Biurna como asustada dice: que fue eso tan aterrador- Enehias: yo no vi absolutamente nada- Florencia: debes estar ciego porque yo si aprecie muy bien algo que mi entendimiento no puede explicar- Brenda yo no vi nada extraño sigamos y dejémoslo de ese tamaño, que falta poco seguramente para llegar a la cumbre de la montaña donde seguramente nace la cascada. Haciendo un último esfuerzo llegan a una alargada meseta, donde ven extenderse una enorme laguna que está rodeada de peculiares plantas, que se mueven con una agitada vibración y lo más extraño que el agua va haciendo un terrible movimiento de enormes círculos. Florencia al poner un pie sobre una piedra con la intención de amarase la zapatilla, es sorprendida por una de esas plantas envolviéndole el pie, ella al sentir que le desgarra grita con todas sus fuerzas: por favor ayúdenme a guitarme esta maldita planta del pie, el novio reacciona mandándole tremenda patada que la planta se retira casi volando, dejándole el pie a la muchacha sangrando de sobremanera. Entre el novio y ellas dos le curan con lo que pueden el pie notándosele una abertura que el novio al arrancarse la manga se la va poniendo- El muchacho nervioso dice: seguramente estas plantas son carnívoras tenemos que salir cuanto antes de aquí- Biurna asustada contesta: él tiene razón que sitio más terrorífico, salgamos de una vez sin dete-nernos. Tratan  de  salir de donde están aceleradamente, aunque la chica cojea quejándose, al alejarse un poco de la laguna de la profundidad surge una monstruosa y gigantesca serpiente de tres cabezas, que al salir del agua con movimientos zigzagueantes, al enredarse Enehias con una piedra le da alcance tomándolo por sus fauces para ingerirlo de un solo trancazo, luego hace lo mismo con la novia sin dejarla siquiera gritar. Al intentar tomar a Glenda hay algo en la atmosfera que hace desistir a la gigantesca culebra que velozmente se vuelve por donde vino seguidamente al laguna- Biurna asustada va palabreando: zafaste de ser devorada por la monstruosa serpiente- Estoy muy nerviosa que hacemos- no nos queda otra que devolvernos. Al querer tomar el camino de vuelta se dan cuenta que están completamente perdidas- Glenda nerviosa habla: todo esto es terrible, primero presenciamos por desgracia como esa impresionante serpiente, si a ese animal se le puede llamar de esa manera devoro sin ton ni son a nuestros amigos. Para empeorar la situación veo que estamos más pérdidas que por donde sigamos va hacer igual- No nos queda otra que seguir. Caminan con dificultad por el tipo de terreno arcilloso, por una tupida selva- Biurna sigamos y no miremos hacia atrás que lo que nos tiene que pasar sucederá, por lo menos tratemos de buscar agua. Agilizan sus pies tratando de esquivar el barro, con ese sentido de los acontecimientos llegan ante la profundidad de un abismo que al estar cerrado por las nubes no las deja ver más allá, más que cansadas se sientan sobre una enorme roca, para su fortuna escuchan el sonido del agua que cae con fuerza a las piedras del abismo- Glenda escuchando el torrente va hablando: si escuchas algo así como si de alguna parte callera agua- Si claro que lo escucho, vamos a ver de qué se trata. De la gran roca se levantan caminando con cierto temor por las extrañas orquídeas escuchando el torrente de agua y al bordear el abismo encuentran varias rocas  que  sobrepasan  sus  tamaños- Biurna palabrea: si trepamos  estas rocas tal vez descubriremos de donde cae el agua. Con dificultad empiezan a escalar la roca, al llegar bien arriba descubren entre otras dos rocas más pequeñas un manantial que cae estrepitosamente al abismo. Bajan con la misma dificultad  que  subieron  pero  haciendo  un gran esfuerzo llegan ante el manantial que saturado cae vertiginosamente a las nubes bajas que no dejan ver nada, se acachan logrando tomar gran cantidad de agua que las reconforta- Glenda sintiéndose mejor dice: que bueno que por fin pudimos saciar la sed,  tenemos  que  pensar rápidamente donde vamos a pasar la noche- Yo creo que en alguna de esas rocas estaremos más protegidas del frio y de las fieras- Entonces vamos allá. Caminan hacia la roca más plana donde se sientan entrelazadas tratándose de proteger del intenso frio, la noche se hace larga por ese motivo más aún cuando solo tienen un  biquini puesto. En la madrugada ya extenuadas logran dormirse, siendo despertadas por los rayos solares que le dan en el rostro. Al ver el panorama despejado se dan cuenta que están en la altura de un desierto- Glenda viendo la espectacular vista del desierto que se ve allá abajo va diciendo: tenemos que hallar algo de comer de lo contrario pereceremos del hambre. Algo animadas se levantan al caminar en la gigantesca roca ven una franja de tierra humedad, haciendo un gran esfuerzo logran descolgarse cayendo suavemente sobre la tierra que al dejar sus pies marcados se dan cuenta de la existencia de pequeñas lombrices, desesperadas las van tomando ingiriéndolas una por una logrando quedar satisfechas- Biurna carcajeándose va diciendo: nunca pensé que las lombrices fueran tan sabrosas- Sí que logre saciar el hambre, ahora tenemos que hallar a alguien que nos salve de esta situación tan maluca, tratemos de bajar esta tremenda montaña. Caminan bordeando la extensión del abismo, para su suerte encuentran un sendero que aunque cuesta de a poco van descendiendo, entre rocas logran tomar una loma que entre secos árboles logran llegar a la planicie desértica con su monótono suelo rojizo, ven hacia el horizonte el atardecer naranja- Glenda: si no estuviéramos en esta terrible situación me dedicaría por ahora a presenciar tan bello atardecer, tenemos que resolver a donde nos vamos a instalar antes que llegue la noche. Al  ver  una  roca  solitaria  se dirigen subiéndola, al estar en esa altura se acomodan una enzima de la otra viendo surgir la oscuridad acompañada de las primeras estrellas- Biurna con temor va diciendo: me asusta esta oscuridad- La amiga le contesta con su voz entrecortada: no creas que no tengo miedo, que debemos de hacer para calmarnos- No tenemos otra posibilidad que no sea tranquilizarnos, por lo menos tratemos de concéntranos en las estrellas. No le quitan la mirada al firmamento que está repleto de estrellas- Glenda sintiendo las pulsaciones de su amiga va diciendo:¿dónde estará la tierra?- Son tantas las estrellas y los astros que es imposible saberlo. Hablando de su triste realidad se quedan dormidas sobre la misma roca, para no despertarse ya que son presas de unas enormes aves que las devoran.

                                                 EL VIRUS

En las afueras de la ciudad de Ultranza, una madrugada aterriza una extraña nave. Que en las horas de la mañana encuentran abandonada las mega-autoridades, sin saber su procedencia. Sin hallar al menos señales o indicios de sus ocupantes. La gente es llevada por su curiosidad a observar la nave ovalada y plateada, cada día cientos de miradas la observan. Una noche muy estrellada desaparece misteriosamente, sin que las mega-autoridades, los científicos del centro de investigaciones planetaria la hayan visto despegar. Al pasar de los días una mujer al presentársele en todo su cuerpo extraños hematomas, que con el pasar del tiempo se convierte en profundas yagas, siendo trasladada al moderno hospital, los médicos por más que investigan la situación de la mujer no logran detectar de que se trata y muere desintegrándose para quedar reducida a mero polvo. Esto crea una ola de pánico que se expande por el planeta. Las autoridades médicas logran detectar el virus desconocido, pero no saben cómo detenerlo, que la mortal infección se propaga  entre  la  población donde de la misma forma van muriendo las personas que han contraído el virus. Un grupo de científicos de la medicina especializados en esta materia, entre los cuales se destaca por su trabajo y experiencia en similares casos el doctor Faculo Arcalasis, sus discípulos Simón Musch y la doctora Mariana Blans se ponen a estudiar en el laboratorio el caso de virus, que por su dictamen procede de otro planeta y concluyen que la única precaución posible que se puede ejecutar: es que la gente use trajes de plomisple, con máscaras enterizas para respirar y que a la vez los protege del oxígeno contaminado, y que no salgan de sus casas para no exponerse a la intemperie ya que no se sabe a ciencia cierta si hay algo más en el ambiente que contagie el famoso virus.

La doctora Blans por su cuenta en su ultra-laboratorio investiga minucio-samente el virus pero por más que se aísla usando un traje de plomisple adquiere el virus presentándosele los mismos hematomas en todo su cuerpo. De inmediato es atendida por su maestro el doctor Arcalasis que a través de una pantalla dimensional y un experto robot que trabaja con él en este tipo de casos. Que aplicando en todos los hematomas cataplasmas hecho con diferentes plantas y varios productos químicos, en un principio logra controlar los hematomas. Estos reaccionan y por más intentos fallidos y de probar con otras sustancias, no logra salvarle la vida. De esa misma forma muere su bella compañera a los cinco días sus dos hijas; las autoridades sanitarias van viendo como la población va disminuyendo, que inclusive del extranjero y de otros planetas se solidarizan con la comunidad del planeta, llegando médicos expertos en todo tipo de virus. Para mayor desgracia la mayoría mueren de la misma forma. Ya es tal el desespero que el doctor Lombardi con varios especialistas del tema de otros planetas se internan en el ultra-laboratorio del mejor hospital del sistema solar, a observar en un ultra-microscopio el germen que produce el virus si encontrar algo familiar que lo pueda al menos  identificar  como  tal,  hacen varias pruebas que son trasmitidas a un ultra-computador sin lograr éxito alguno. Los médicos llegan  la conclusión que es muy posible que el germen del virus lo haya traído la nave desaparecida, muestras de oxigeno que recogieran antes de la desaparición de la nave, utilizando el mismo robot que recoge muestras del piso radiactivo. Con un minucioso y exacto examen comprueban dicha evidencia pero sin un resultado que resuelva el enigma de la mortandad. Donde en capsulas aislados, viven distantes unos de otros, y las calles no son ni el recuerdo de lo que eran antes cuando la gente transitaba libremente.  

                                       UN HECHO EXTRAÑO

El mar en su extensión de enormes olas que disminuyendo llegan a la playa, mansamente resolviendo la marea que es alta debido a la influencia de la luna llena. En la arena repentinamente aparece la silueta acostada de un personaje, al trascurrir la noche con el movimiento del mar, llega la aurora con el sorpresivo sol que surge entre las colinas. Al iluminarlo los primeros rayos solares, él hombre abre los ojos sin saber dónde está, suavemente palpa la arena intuyendo que está en una playa. Decide sentarse, en el momento que lo hace ve a la poca distancia el océano convertido en una sola furia ya que el oleaje es más que notorio. Sin entender nada palpa sus piernas, su brazo, su pecho, y de último se toca su rostro y su largo cabello. Medita sobre su situación sin recordar nada, se desespera y se para viendo la inmensidad del mar. Al sentir sed y hambre cambia la dirección de su mirada hacia los largos cocoteros, decide ver que puede hacer para remediar su situación, va directamente hacia una palmera que al tratarla de trepar le queda única mente la desilusión, al ver cerca de ahí un enorme palo lo toma, con el cual al moverlo logra golpear varias veces dos cocos, que en un acto seguido caen sobre la aren, toma uno de los dos cocos, y al ver una roca con todo su vigor lo lanza estrellándolo contra la roca logrando hacerle una ranura. Con su mano limpia el coco debidamente toma el agua choreándole la cara sin lograr saciar su sed; hace exactamente lo mismo con el otro coco logrando esta vez quitarse la sed; con furia de la misma manera abre el coco en dos, comiéndose la pulpa blanca y blanda; hace exactamente igual con el segundo, con la energía necesaria mira los dos extremos de la playa decidiéndose por uno modula la entonación de sus pies tratando de saber por qué esta en esta playa con la ropa que lleva puesta. Camina con dificultad ya que sus zapatos se hunden en la arena algo delgada, viendo el mar completamente picado. Se cruza con un niño mulato que va sobre un burro- Haciendo que se detenga le pegunta: como se llama está playa, el niño se le burla en su propia cara y sique como si nada- El grita: carajo, que pasa que ni me toman en serio. Decepcionado por lo que le acaba se pasar sique su trayectoria por la playa y extenuado llega a una zona de inmensas rocas donde al trepar en la parte plana se sienta recostando la espalda en otra roca, en la distancia descubre el horizonte con poca nubosidad. Medita lográndose acordar que estaba en el desierto de la Tata coa allá en el Huila sentado divisando el atardecer, lo que no comprende es el hecho de estar en esta larga playa- se pregunta a sí mismo: acaso que ocurrió para estar aquí en esta playa. Solo sabe que no entiende nada. Al sentir calor se arremanga lo que más puede los pantalones, y se saca la camiseta. Como no quiere comer coco decide pararse a caminar, desciende la roca al encontrar unos huellas humanas sique la trayectoria, pasa una charca viendo pequeños pececillos, sique las mismas huellas que lo llevan monte adentro, en un recodo del camino vuelve a ver el mar que las olas envisten a las rocas tirando agua hacia todas las direcciones. Se detiene a ver si puede ver en la distancia algo que le indique la existencia de seres humanos, no ve nada al menos que le indique la presencia. Prefiere a pesar del a cosante sol seguir andando de esa forma después de un tiempo prolongado en la distancia mira lo que podría ser un caserío, eso hace que introduzca la mano en el bolsillo trasero donde encuentra su billetera, la abre viendo que tiene una buena cantidad de dinero, acordándose que ese día le habían pagado por un proyecto de antropología social. Al tratar de recordar, después de estar contemplando el desierto lo que sucedió para estar donde está, no logra recordar absolutamente nada. Estando en esas caminando se desespera pero su inteligencia le dice que con esa desesperación lo único que conseguirá es malgastar su energía, de esa manera logra tranquilizarse. Movilizando sus pies ve más nítidamente las construcciones de tejados de hojas de palmera, al llegar al caserío es recibido por un grupo de niños mulatos que se ríen haciéndole bromas, al encontrar una pequeña tienda él les indica que entren, en un rustico mostrador ve algunos panes, paqueticos de galletas, cigarrillos y otras pendejadas, en un costado ve una enorme caneca donde supone que puede haber algunas gaseosas. A Su encuentro viene una señora que viendo su apariencia- Le dirige la palabra diciendo: cachaco de dónde has venido- el vine al parecer en avión por eso creo que estoy aquí. Todos se ríen incluso la señora- El sique hablando: a ver cuántos somos. Cuenta uno por uno de los niños, de último a la señora y sumándose él a la cuenta- Agrega: como somos trece deme trece gaseosas, el mismo número de esos paquetes de galleta y un paquete de cigarrillos. Al irle dando los comestibles y las bebidas heladas gracias al efecto del hielo, los va repartiendo a los niños que le sonríen bellamente con sus dientes blancos, de último le devuelve la bebida a la señora y empieza a tomar su Coca Cola que toma velozmente, le pide otra a la señora al no tener le da una gaseosa de naranja, al encender un fosforo logra prender un cigarrillo y va fumando y tomando lentamente. Al darle término a las dos cosas- Le dice a la señora cuanto es toda la cuenta. La señora en un viejo cuaderno hace muy despacio la cuenta- le dice: vale tanto. El sin demora saca de la billetera tres billetes de diferente valor y se los entrega- Diciéndole: será que usted o alguien me puede fabricarme una comida- Ella muy amable le dirige la mirada a uno de los niños: Juanito lleva al señor a la casa de tu mama para que le prepare comida, el pobre se ve que no ha comido hace días- Luego le dirige a él la palabra: vaya con el niño que lo llevara a la casa de doña Carmen, ella cocina como para chuparse los dedos. Todos se vuelven a carcajear. Salen los dos, él siguiendo al niño que lo lleva a un humilde rancho como los otros, al entrar se sienta sobre un banco simple y ocupando la chueca mesa, al rato aparece la señora llevando el cabello enrollado en varios rulos de plástico- Que le murmura con su voz algo gruesa: ¿de donde viene usted con esa cara?- Él para no crear sosiego contesta lo primero que se le ocurre: Vengo de Medellín- Cuando llego y seguramente de Turbo- Si vine hace días, no me pregunte más que tengo un hambre del carajo- Quiere que le prepare un arroz de liza- no se imagina como lo anhelo por favor que sea mucho a ver si puedo saciar esta hambre, no se preocupe que se lo voy a pagar muy bien. Al ver retirarse la señora a lo que podría llamarse una cocina, piensa: seguramente estoy en el Choco más allá del golfo de Urabá, ahora solamente tengo que averiguar a donde pasan las lanchas para ir a Turbo. Ahí estaré pisando la civilización y seguramente podré volver  Bogotá. Al rato vuelve la señora con un enorme plato de vajilla china repleto de arroz de liza, empieza a comer empezándosele a subir el ánimo, va viendo detalle por detalle de la simple construcción de madera y palma, de esa forma muy ligero termina con el contenido del plato sintiéndose muy satisfecho- La señora al volver le mascullé con su voz: desea tomar un café- Me haría super bien. Al rato regresa con la taza de café, él va a la cocina donde con un tizón de leña enciende un cigarrillo, al darle una a la señora hace lo mismo, se acompañan fumando y tomando café- La señora le habla con su gruesa voz: como viene de tan lejos no me paquee- No por el contrario tome este dinero, saca un billete grueso y se lo entrega a la señora que agradecida le murmura: aquí tengo una hamaca de sobra si quiere se puede quedar aquí a dormir- No sabe cómo se lo agradezco. Al oscurecer la señora con la ayuda de una vela le coloca la hamaca entre los dos palos de la precaria construcción, se acuesta escuchando el sonido del mar, inmediata mente se queda profundo soñando lo que le ocurrió en el desierto: al estar solo sentado sobre la arenosa tierra muy concentrado viendo el atardecer, velozmente no se sabe de dónde aterriza una nave circular plateada algo azulosa, el sorprendido por lo que está presenciando va viendo cómo se abre la compuerta de la nave, de donde surgen varios personajes verdosos pero a la vez muy bien erguidos, con características largas pero evolucionadas, con una cabeza ovalada, con ojos grandes y muy ras-gados. Estos se acercan estudiándolo con la mirada, él asustado siente y ve que lo están tomando, y al alzarlo lo introducen en la nave donde lo desvisten íntegramente colocándolo  dentro de algo así como una plata-forma. El sin poder racionar ve primeramente a los extraños personajes y más allá a través del cristal de la nave el firmamento. Uno de estos personajes extraños con una extraño inyector que le coloca en una vena del brazo le extrae un poco de sangre, luego con otro aparatos muy sofisticados le toma el pulso, le fotografía los órganos y le hace otras cosas incomprensibles. Al acabarlo de estudiar lo dejan que se vista y que se siente en un cómodo asiento donde ve la tierra bastante pequeña, esto le produce un desmayo. Y solo como adormecido siente que la nave se detiene dejándolo en la playa. Con los primeros rayos del sol abre los ojos recordando todo lo que soñó y comprendiendo porque del desierto fue a parar a esa playa.  

                   CALIPSO Y TRUPSI, DEL SISTEMA SOLAR XIPSIS

El comandante Elio Brusis de la nave XD 21 va mirando por la ventanilla frontal de la nave el paso zigzagueante de los meteoritos, experimenta una extraña sensación de melancolía, al ver aquellos pedazos de roca encendida que surcan el espacio infinito ya que le recuerdan a oxilan, la segunda luna de Calipso, estallada ya hace varios años. Recuerda ese suceso como si fuera ayer. Es interrumpido por Liza Cuper que es la encargada de las comunicaciones de la nave- Que le dice: acuérdate que me has prometido que después de visitar el planeta Calipso iríamos a mi planeta Trupsi, no te imaginas las ganas que tengo de ver a los míos- Sí que lo comprendo y además tengo allá un trabajo para realizar. En la pantalla aparece el director del programa espacial el señor Eugeni Nin- Que va diciendo: hay que tener cuidado que al parecer en Calipso hay algo así como una vestía animal que está asolando a los primitivos habitantes, les recomiendo que primero manden alguno de los  robots en la pequeña nave a ver qué sucede con esa vestía- El astronauta le contesta no se preocupe señor director que esa recomendación se ejecutara como usted acaba de decir- Perfecto. Al entran en el sistema solar Xipsis recorren velozmente varios de los planetas. Ante el salón de mando se presenta la señorita Liliana Brinco que está encargada del mantenimiento y de la programación de los computadores- Ella dirigiéndose donde está sentado comandante Elio le dice: por lo que veo todo está en orden- Necesito hablar urgentemente con los expedicionarios Toni Macregor y Alberto Plaza- Si, ellos seguramente están descansando en sus respectivas recamaras, ya mismo los llamo- Necesito que a través del computador mayor busque toda la información del planeta Calipso- Luego que le diga a los muchachos que se presenten ante usted, busco toda la información sobre el planeta- Gracias. Al rato se presenta en el salón de mando los dos jóvenes, Toni va diciendo: estamos a su servicio- Estoy viendo la posibilidad que ustedes dos vayan al planeta Capliso a ver qué está pasando con los primitivos pobladores, para eso van a necesitar una plus-cámara que trasmitirán todo lo referente con el viaje y con lo que estén haciendo, además van a necesitar dos robots armados con pistolas ultra-desaparisol, váyanse alistando que cuando de la orden deben estar listos para ocupar la nave- Alberto. Ya mismo nos preparamos para la misión. El comandante y Liza a través de la ultra-pantalla ven el planeta del objetivo- El señor Brusis: toma el micrófono diciendo: como seguramente ya deben estar listos aborden la pequeña nave, el mismo capitán con el interruptor abre la compuerta, al entrar los dos personajes con sus robots a  la ultra-nave que en segundos despega de la madre nave al espacio sideral. Ven a través de la ultra pantalla como se va separando de ellos la pequeña ultra-nave. Al poco tiempo la ultra-nave se mete en la órbita del planeta anaranjado y azul logrando tomar la gravidez que ayuda a la nave aterrizar entre la selva, viendo la inmensidad de los arboles abren la compuerta para que surjan los dos astronautas acompañados de sus dos robots, estos se encargan de recolectar las enormes hojas con las cuales esconden la nave, al dirigirse en sentido sur empiezan a divisar la cordillera luego descubren en la distancia una gran familia de monos que van agarrados de las ramas yendo de árbol en árbol, que al verlos les lanzan enormes semillas que agachándose logran esquivar- Toni viendo a su compañero le dice: que monos si no estamos pendientes segura-mente nos hubieran al menos herido, sigamos que tenemos que ascender la cordillera para poder llegar donde los Maorí. Al avanzar se encuentran con un enorme río donde ven a través del agua de color fucsia las largas culebras que flotan. Alberto del bolsillo saca un pequeño estuche de dónde saca las pequeñas alas que al estar en la atmosfera se alargan varias veces su tamaño, al pasarle una de estas alas a Toni y a los dos robots, se las colocan amarándolas sobre la espaldas y al  impulsarse  empiezan  un vuelo sostenido encima de los grandes árboles, de esa forma de a poco van atravesando el ancho del río, viendo en la superficie las enormes culebras que nadan zigzagueantemente, otras peleándose, y en la distancia ven sobre las copas de los árboles grupos de exóticas  aves. Para volver a pisar la tierra oscura, al quitarse cada uno las alas se las pasan a Alberto que al volverse a su tamaño con facilidad las introduce en el pequeño estuche volviéndolo a meter entre su bolsillo- Toni viendo un guacamayo parado sobre una enorme rama va diciendo: que belleza de guacamayo véanlo allá parado sobre esa gran rama de aquel árbol, sigamos que el ascenso es largo. Empiezan a subir por un ancho sendero siguiendo las huellas entre una densa selva, en un momento dado de una gigantesca roca se les viene una enorme águila al quererlos investir uno de los dos robot saca la pistola y le dispara desapareciéndolo- Alberto aquí los peligros son múltiples siempre toca estar muy alerta, de lo contrario nos podría suceder algo bien macabro- Si, no podemos perder la concentración si no podemos perder fácilmente  la vida, sigamos. Siguen subiendo a través de las grandes rocas y de los inmensos árboles de gigantescas raíces, de esa forma llegan ante una fluida cascada que cae de muy arriba de la montaña con una fuerza indescriptible a una pequeña laguna rodeada de plantas carnívoras. Deciden sentarse a descansar viendo el torrente de agua que cae de la enorme montaña, al quererlos atacar aquellas plantas el robot no duda de sacar la pistola al disparar desaparecen la mayorías de las plantas y las restantes retroceden, al ver una muchacha aborigen lo sucedido sale corriendo montaña arriba perdiéndose entre la tupida floresta- Alberto impresionado por todo lo que ha pasado dice: si vieron a la muchacha- Uno de los robots le contesta con su voz metálica: a conque se enamoró. El amigo se ríe y luego palabrea con su voz: conque te quieres quedar aquí. Se vuelve a reír. El amigo al ver algo así como una rama, al tomarla se da cuenta que se trata nada menos de una pequeña serpiente que dé todo caso se la lanza a su amigo, la serpiente al caer para su fortuna asustada sale a perderse entre la floresta. Son sorprendidos  por  la  voz  del  comandante Elio que va diciendo: déjense de tonterías que eso no se les ve para nada bien- El mismo Alberto: tiene razón no volverá a ocurrir. Todo queda en silencio escuchándose únicamente el ruido continuo de la floresta- Ese silencio es interrumpido por Toni que habla: por ahora ya estuvo bien el descanso, debemos continuar. Se levantan pretendiendo caminar, avanzan despacio costándoles un enorme esfuerzo ya que ascenso es empinado y prolongado, algo cansados llegan a una amplia meseta donde a lo lejos entre los arboles ven las viviendas circulares de los maorí, al verlos la misma muchacha indígena que vieran antes, magistralmente silva, en el acto aparece toda una concurrencia de maorís que al verlos se tiran de frente contra el suelo arcilloso adorán-dolos como si fueran dioses. El brujo de la tribu luciendo bellas plumas se les acerca, al llegar al frente Alberto le entrega lo que parece una pipa, este no sabe qué hacer con ella. El brujo le indica lentamente con sus manos que fume, él hace exactamente lo que el brujo le indico colocan-dose la pipa entre los labios fuma botando el humo por la boca; luego se la pasa a Toni que fuma de la misma manera, este se la pasa al robot que al intentar fumar tose una y otra vez. Todos se ríen una y otra vez incluso el brujo, Éste último les indica con un ademan que lo sigan, van de tras de él ha una enorme vivienda circular, al entrar ven un enorme altar rodeado de exuberantes flores de diferentes tonalidades, en el centro una figura enorme tallada de madera, a un lado una vasija de barro con un líquido verdoso. El brujo se inclina acachando su cuerpo, los restantes lo imitan haciendo lo mismo. Estando en esa posición sienten que la tierra tiempla, el chaman dice algo que ellos no entienden, seguidamente sienten un ruido como si los maorí corrieran. Al salir de la vivienda ven como corren los pobladores metiéndose entre la selva, al rato divisan las patas de una enorme bestia con cuerpo de camello y boca de dragón que los inviste, el robot inmediatamente saca la pistola haciéndole varios disparos inmediatamente lo hace desaparecer, el brujo al ver como desapareció la vestía agachándose le besa los pies metálicos al robot, al rato van apareciendo los nativos indígenas con tambores, entre todos hacen un círculo perfecto quedando ellos en el medio, al empezar a tocar los tambores las mujeres ágilmente danzan, dos de los aprendices van a la misma vivienda donde entran desapareciendo en la oscuridad del recinto, al rato salen trayendo el recipiente de barro colocándolo en el piso de arenilla en medio de todos, con totumos extraen del recipiente el líquido verdoso primeramente le entregan al robot que le disparo al monstruo que lo toma, luego al otro robot que al toser lo van devolviendo al suelo.  De las propias manos del brujo lo recibe Alberto y por último Toni, que de un solo impulso lo beben sin dejar nada en los totumos, luego al recibirlo el chamán de las propias manos de su aprendiz lo bebe. Todos los de la comunidad toman e inclusive los niños. Esto hace que vayan alucinando cosas extrañas, los robots pierden completamente el sentido de la realidad, empezando a moverse con agilidad, al moverse como se mueven se desbaratan quedando todas sus piezas esparcidas sobre el suelo arenoso. Alucinando sienten los sonidos de los tambores más vibrantes y ven a las bellas indígenas danzar con los senos al aire que se convierten en diferentes animales, Ellos se contagian de los sonidos de los tambores, que al sumarse otros hombres con alargadas flautas la música se vuelve más armónica, se integran a la música moviendo sus cuerpos, A toni se le suma una bella joven completamente desnuda, bailan y bailan, en el éxtasis de la situación la chica lo jala sacándolo de donde está la concurrencia danzando, lo lleva a una de las viviendas circulares donde ella ágilmente con la boca le saca la ropa, al acostarse sobre un bello chinchorro, en ese éxtasis que los pose empiezan a acariciarse, el con sus labios le besa los redondeados senos. Esto hace que ella se excite de tal forma que con una de sus manos tome el pene erecto y lo introduzca lentamente en su vagina, al sentirlo se mueve salvajemente de un lado para el otro, entran en climas consiguiendo que ella se retuerza y gima de placer encontrando la belleza del coito, quedándose  abrazados  profundamente dormidos. En la mañana al sentir algo que se desliza con piel fría sobre su cuerpo se despierta viendo una colorida serpiente, al no moverse la serpiente se descuelga del chinchorro saliendo del lugar. Asustado se desprende de la bella nativa se pone los pantalones, la camisa y los zapatos de goma ultra nica, sale viendo que no hay nadie. Al ir en dirección de la vivienda del chamán encuentra a un grupo de niños que juegan con las piezas de los robots, con un movimiento brusco hace que se vayan, va juntando pieza por pieza y en el momento que considera que todas las tiene reunidas. Rápidamente arma un robot, luego el otro- Les dirige la palabra diciéndoles: como se sienten- Los dos robots al mismo tiempo le contestan: estamos con toda nuestra maquinaria a pleno- Bueno ahora tenemos que buscar Alberto- Uno de los robots le contesta: con nuestro radar va hacer muy fácil- Entonces vayan en su búsqueda. Los ve partir, yendo entre las viviendas se alejan de estás al encontrar una enorme roca bastante circular lo hallan acostado abrazando a una esbelta mulata, uno de los robot pegando sus pis a la roca sin problema la sube, al ver que la chica esta encima de el del dedo saca un espray paralizante que lo esparce en el rostro de la muchacha, a continuación tocándole con el dedo metálico el rostro logra que se despierte, el luego que se despereza retira suavemente a la muchacha, al levantarse tranquilamente se vuelve a vestir- Luego le preguntad al robot: dónde está mi compañero…- Nos está esperando delante de la vivienda del brujo- Vamos. Al buscarlo donde lo dejo el robot lo hallan comiendo una extraña fruta- Amigo de donde sacaste esa fruta- De aquel árbol- Robot alcánceme una de esas frutas. El robot con su dedo índice a punta con certero tiro se desprende cayendo suavemente en las manos de Alberto, que la come disfrutándola.- El primero dice: regresemos a la nave. Sin inconveniente  como  vinieron vuelven a la nave, al tenerla le sacan rápidamente las grandes hojas, al abrir la puerta con el interruptor se introducen en el interior de la nave, que Alberto se encarga de conducir. La nave logra hacer un gran despegue tomando altura vence la gravidez, al estar en la inmensidad- Toni le habla al director: ya estamos listos para abordar la nave madre, estén pendientes. Al divisar en la distancia la enorme nave rápidamente se acerca, al abrir la escotilla entran en el sitio donde se suele parquear la pequeña ultra-nave, se bajan saludando de mano a toda la tripulación- El capitán luego que se carcajea dice: veo que cumplieron a cabalidad con la misión, lo otro que hicieron no se los aclamo pero veo que se divirtieron- Toni contestándole: sí que cumplimos y la pasamos de maravilla- Aquí nos consta a todos, aunque no vimos mucho más. Los dos astronautas se van a descansar a sus recamaras, los restantes vuelven al salón de mando- Al sentarse comandante viendo a Liza le dirige la palabra con su voz: ahora si tenemos que cambiar de dirección para poder ingresar al planeta Trupsi. El capitán al poner el piloto automático le ordena que cambie la dirección, la nave velozmente vira hacia otro sentido. A través de la ventanilla frontal divisan claramente el planeta Circus con su atmosfera verde y violeta, más adelante el satélite XL 17 de donde le habla su director- diciéndoles: Amigo capitán Elio Brusis le mando un saludo a usted personalmente y toda su tripulación, cuando quieran visitarnos les mostraremos las cosas que estamos haciendo, seguramente hasta pronto y buen viaje al planeta Trupsi- Él le contesta: desde esta nave todos le mandamos un gran saludo, de vuelta seguramente pasaremos a ver todo lo que están haciendo, gracias por la invitación y hasta la vista. Al presentarse los astronautas Alberto y Toni se levantan todos con el propósito de ir al ultra-comedor, al llegar la chica encargada con su aparato abre automáticamente la puerta, al entrar ocupan la larga mesa sentándose cada uno en su correspondiente silla, los robots encargados van  poniendo las diferentes bandejas, cada cual ordenadamente se sirve el pollo, las legumbres, la variada ensalada. Comen en silencio viendo a través de la ventana un asteroide iluminado por las potentes luces de la nave- El comandante Elio va hablando: todo en la nave está funcionando a la perfección, señorita Liza cuando terminemos con esta cena tendrá que averiguar cuál es la situación del planeta Trupsi, a ver si podemos ingresar con tranquilidad, por ahora alimentémonos que lo vamos a necesitar- Liza esta comida realmente está deliciosa, ya veré con tranquilidad en el multi-computador la realidad del planeta. Al terminar todos a la vez se levantan volviendo cada uno a su puesto, al llegar al salón de mando se sientan en su correspondiente sillón, Liza enciende el super-portatil, al abrir la sesión de los planetas de ese sistema solar, abre el sistema viendo el planeta que está en guerra- Ella le dirige la palabra al capitán diciéndole: vamos a tener problemas para ingresar al planta debido a que están en una cruel guerra, carajo con las ganas de ver a los míos, ¿qué vamos hacer? – Por ahora tú tienes que averiguar bien donde podemos descender y si es posible- Comunícame inmediatamente con la estación del imperio. Ella abre con su super-computador el satélite logrando que le contesten- Una vos le dice: ustedes por el registro que tengo están hablándome desde la nave XD 21- Correctamente, con guíen estoy hablando…- Con el comunicador Agustín Porro del estado Flumis el cual dirige el imperio, si siguen las indicaciones que le estoy mandando podrán ingresar en el planeta exactamente en la ciudad de Lindra- Si aquí en la pantalla veo las indicaciones- Las haremos  exactamente como están- Que así sea- Gracias por las indicaciones, ojala nos conozcamos personalmente- Entonces hasta la vista. Ella con su copiadora saca varias copias- Dirigiéndole la mirada al capitán le habla con su suave voz: He logrado obtener las indicaciones precisas para poder ingresar al planeta, aquí están- El comandante luego de poco tiempo  hace  que  la  nave tome la órbita del planeta, sin inconvenientes logra la nave ponerse en la parte central del planeta, aterrizando muy despacio como lo indica el papel en la ciudad de Lindra en la gigantesca aeronave, al detenerse completamente en la gigantesca pista, al abrir la compuerta el propio comandantes todos desocupan la nave, siendo recibidos por el secretario de la presidencia y por el ministro de comunicación- Con un saludo de mano se presentan ante el secretario Víctor drespucio, con el ministro de comunicación el licenciado Oscar Luchibin, los cuales los llevan a un enorme ultra- vehículo que conduce un particular robot, el mismo apara tejo les abre la puerta haciéndolos entrar- Víctor le dirige la palabra al robot diciéndole: llévelos al mega-hotel Danubio que la administración planetaria cubrirá todos sus gastos, descansen que mañana en la noche los visitaremos, hasta la vista.- El comandante le contesta: de antemano le agradecemos su hospitalidad. El robot conduciendo arranca el ultra- vehículo que al elevarse toma la avenida aérea, pasa ante una fila de ultras-vehículos lográndolos pasar, luego al atravesar un puente aéreo llega al mega-hotel, el mismo robot les abre la compuerta para que se bajen, caminan viendo el módulo adherido al enorme edificio del hotel, al entrar por un enorme portal no tienen caminar ya que son trasportados por el mega corredor que recorre todo el lugar con un movimiento propio, de esa manera llegan a sus respectivas habitaciones que tienen una piscina propia de agua caliente. El capitán luego de un prolongado descanso en la cama, va a la piscina donde encuentra una bella rubia que esta recostada sobre un sillón reclinable- Ella al verlo le dice: comandante Elio venga se sienta a mi lado ha si nos conocemos- El comandante sin creer lo que está viendo le contesta: usted de donde salió, como sabe mi nombre…- No Salí de ninguna parte solo estoy para servirlo, y ya de antemano he sabido su nombre, quiere tomar algo- Si me gustaría tomar un ultra-whisky. Ya mismo lo tendrá. Ella con su mirada hace que del enfriador surjan dos vasos de hielo y de un escaparate  sale volando la botella que sutilmente  sirve  en los dos vasos buena cantidad del líquido, los toman con sus propias manos y chocando los vasos brindan- El comandante luego que se da un largo trago modula su voz diciendo: ahora si me podrás decir tu nombre- Soy Liliana Amberes, como vera nací aquí en esta ciudad y me dedico a hacer feliz por eso estoy aquí donde estoy- Su belleza me confunde- No se confunda y véame como soy- Lo que no comprendo es que estando en guerra, como puede haber gente que este festejando- No sea tonto la guerra está extendida en otras naciones aquí siempre estamos en paz, esa guerra a nosotros no nos concierne ya que la política no nos interesa, además tenemos todo para suplir todas las necesidades. Al acabar con el conte-nido- él le dice: vamos a meternos en la piscina- Vamos que el agua esta deliciosa. Se meten tirándose en un clavado al agua, nadan a sus anchas en el momento que intenta besarla, todo se trasforma en una total destrucción viendo a lo lejos un volcán en erupción, el dándose cuenta de todo lo que está pasando a su alrededor- Se dice a si mismo; todo fue una farsa cómo es posible que me hallan engañado de esta forma. Al querer encontrar a sus súbditos los halla en una sola montaña de cuerpos sucios y muertos  Al abrir los ojos ve el interior de su habitación, desesperado llama gritando a Liza. Que al llegar corriendo se detiene en el umbral de la habitación- Dice: ¿qué le pasa? –No, nada simplemente tuve una pesadilla.    

                                 LO EXTRAÑO DE UN RAPTO 

Camila Grime no estaba preparada para la violencia aterradora de la luz y el sonido, pero aún menos para la presión, la increíble presión de la atmósfera sumada a la extraña gravedad del planeta Iglus, ejerciendo sobre su cuerpo un presión difícil, cuyas reacciones no ha podido controlar, su cuerpo extrañado por el ambiente en un mundo desconocido. Ahora cuando, luego del dolor y de la angustia del pasaje, espera encontrar alguna forma de alivio, todo el horror de la situación se le hace presente. La nave en que va no responde  a sus exigencias, menos sabe porque está en la nave, ya que fue raptada por estos extraterrestres en el momento que dormía en su cama, ella sumada como en un sueño viendo desde donde está sentada a los extraños personajes de caras alargadas, de cuerpos deformes pero firmes- Ella tratando de entender si por lo menos la entienden les dice: porque a mí fue la que me raptaron, porque no a otra persona…- El deforme personaje solo la mira sin obtener respuesta. Ella ve atreves del enorme ventanal duro de la nave las incomprensibles estrellas, llora amargamente pensando en todas las personas que dejo allá en la tierra. Uno de los extraterrestres se le arrima viendo que llora, toca con su rara mano la cara con lágrimas. Ella lo aparta con sus dos manos, el sujeto la toma suavemente del cuello pensando que la va ahorcar. Al soltarla vuelve al mismo lugar donde estaba sentado. En un momento de la incertidumbre, de lo que va pasar se duerme soñando: que la meten en una recamara donde con extraños aparatos estudian su cuerpo, luego le hacen otras cosas. Al despertarse no sabe a ciencia cierta cuanto tiempo durmió, al verse de pies a cabeza se entera que está en otra parte sentada libre de ataduras, ve  a  través  de

sus ojos un césped morado y en la lejanía arboles de gran tamaño. Con su desnudes se levanta caminando sobre la grama morada, va al encuentro de los árboles viéndolos que sus troncos son rosados, que al estar enramados con sus hojas rojizas y amarillas dándoles una apariencia de otoño. Ella se sienta sintiendo la espesura del pasto morado a meditar a donde se encentra tan desnuda como está…., se vuelve a parar, girando mira todo a su alrededor descubriendo lo uniforme de la floresta. Desde la lejanía escucha como un torrente de agua, va en esa dirección metiéndose entre los espigados árboles que a la vez son extraños y bellos, velozmente pasa un curioso pájaro que se estaciona en una rama baja de un enorme árbol. Se acerca lográndolo observar se da cuenta que no es un pájaro común ya que esta hecho como de hojalata, el pájaro en segundos vuelve a retomar el vuelo desapareciendo en la distancia. Ella sigue movilizando sus pies escuchando más nítidamente el torrente del agua, al aproximarse con su vista descubre a lo lejos una cascada de múltiples colores de una belleza que no tiene nombre, que cae ruidosamente sobre lo que puede ser un gigantesco lago de agua turquesa. Ella como sorprendida por tanta belleza se aproxima lentamente a la orilla del enorme lago, de esa forma llega ante una alargada playa de arena muy naranja, al seguir caminando por la arena muy colorada llega ante la orilla viendo en la poca profundidad alguna que otra piedra, seguidamente introduce sus pies dentro del agua, y al pisar una piedra se da cuenta que no son como las que ella conoce, que son bastantemente acolchadas. Al lanzarse suavemente al agua nada sintiendo el agua tibia, percibiendo tanta belleza. En un momento dado halla a poca distancia lo que puede ser un árbol, que surge de la misma profundidad. Haciendo un esfuerzo se logra trepar a una gran rama, al escalar las otras ramas de esa forma llega a la copa donde se sienta a ver la dimensión del lago que está rodeado de gigantescas montañas nevadas. Observándolo todo piensa: será que en este planeta, o lo que sea donde, o donde me encuentro habrán seres humanos u otro tipo de seres. Al ver volando a muchos pájaros que se estacionan en otras ramas más bajas del mismo árbol, se agacha logrando descubrir que son bastante semejantes al primero que viera. Al enderezarse su pensamiento se enfoca: que debe proporcionarse  algo  que  le  abrigue, un lugar algo confortable para dormir, y sobre todo alimentos. Decide bajarse del árbol, lo hace descolgándose de rama en rama y en el momento que está cerca del suelo de grama morada, de ultimo de la rama se descuelga logrando caer parada. Empieza a caminar con el propósito de encontrar al menos algo que le pueda quitar el hambre que lleva con ella, al ver un bosque de pinos se interna viendo diferentes árboles, por suerte encuentra un árbol de redondeados frutos semejantes a las naranjas, fácilmente logra treparse en el tronco amarillento tomando una rama se sube a otra rama más alta donde al tener cerca varios de esos frutos, con la mano izquierda ya que es surda logra arrancar uno dándose cuenta que es durísimo, al no poder abrirlo piensa que debe intentar abrirlo con algo fuerte, para eso mismo va arrancando otros dejándolos caer. Se baja como se subió lográndose descolgar de la gruesa rama para caer de culo contra la grama, se levanta con la intención de encontrar algo con que pueda abrir el duro fruto, al ver un palo lo toma dándose cuenta que es lo suficientemente macizo para su objetivo, con el cual golpeando al fruto logra abrirlo hallando una pulpa que al llevársela a la boca y mascarla se da cuenta lo suave y lo deliciosa que es, al terminarla abre la siguiente que come deleitándose, y al comerse varias de esas pulpas quedando más que satisfecha se acuesta tan larga es sobre la grama, quedándose profundamente dormida. Al seguir la secuencia de los momentos el aire frio procedente de las montañas nevadas la despierta, al querer protegerse del aire frio ve a lo lejos debajo de lo que podría ser un alargado pino, una especie de musgo. Al acercarse con sus dos manos va tomando cierta cantidad dándose cuenta que es muy lanudo y suave, al ponérselo viendo que se puede cubrir todo su cuerpo, al sentirse cálida como  protegida se acuesta sobre el mismo musgo. Al dormirse duerme durante largo rato, al abrir los ojos vislumbra que una particular criatura la mira a los ojos, arrastrándose se aproxima dándose cuenta que se trata de algo así como de un extraño duende, que al contrario de asustarse con curiosidad se le acerca y al mirarla le sonríe, y suavemente le da como símbolo de amistad su mano. Ella no duda en besarlo suavemente, el personaje de la alegría salta repetidas veces y se vuelve a sentar tocándole el largo cabello negro. Este con una seña le indica algo que ella por más que trata no entiende, el duende vuelve a intentar hacerle un ademan que ella esta vez entiende: que lo siga. Al moverse el personaje ella se levanta siguiéndolo, la lleva a través de la floresta a un bosque de ciprés, se internan en el bosque escuchando una algarabía musical, llegando ante lo que parece una fiesta de duendes, se integran a los personajes. Que cuando la ven a ella la rodean haciéndole todo de bromas, ella grita tratando de alejar a los personajes que la encierran- Ella va diciendo que es todo esto. Inmediatamente su amigo les indica a los músicos que toquen, estos haciéndole caso omiso empiezan con sus extraños instrumentos a interpretar una bella melodía, la toma de la mano para que bailen, lo hacen moviendo sus cuerpos. Las demás parejas se integran al baile, bailan y se mueven hasta no poder más. Los personajes al dar por concluida la tanda musical ya cansados dejan los instrumentos amontonados sobre la grama morada. Se empiezan a reír de tal forma que el bosque se llena de risas, al acabar de carcajearse se sientan para que las mujeres de las viviendas subterráneas traigan varias tortas que las reparten entre todos, la chica al probarla con un movimiento de sus manos da la aprobación. Comen en silencio que es roto por ella que dice: se ve que ustedes viven muy bien. Una chica duende se le sienta diciéndole con señas que quiere ser su amiga, al entenderle la toma sentándola en sus rodillas, y la abraza sintiendo su cuerpo cálido. Al bajarse de las rodilla de ella la toma de la mano con el propósito de que la acompañe, ella la sigue a una cueva sin lograr entrar, en segunda instancia se desespera haciendo un gesto de impotencia. El amigo duende al ver lo sucedido con su amiga, le habla en su dialecto a sus compañeros indicándoles que busquen las herramientas. Varios de ellos se introducen en un pequeño hoyo de donde vuelven trayendo: martillos, serruchos, puntillas y otros tipos de herramientas de construcción, ella serenada se sienta acomodando en sus piernas a su amiga a ver lo que van a realizar los otros duendes. Entre todos los machos al ver un enorme ciprés, lo rodean empezándolo cortar con un enorme serrucho, al ver que el árbol se les viene encima corren hacia el otro lado sin lastimar a alguien, si haciendo templar la tierra. Estando el gigantesco árbol sobre el suelo le cortan con otros serruchos las largas ramas, luego con el mismo serrucho con el cual derrumbaron el gigantesco árbol, cortan de tal forma que logran sacar varias tablas. Con toda la madera lista empiezan a construir una vivienda; mientras otros se dedican a hacer una cama del tamaño de ella, una mesa, una silla, y un mueble de ropa. Al trabajar como hormigas y hacer el trabajo velozmente termina todos a la vez, logrando una bella vivienda de un solo piso. Al darse cuenta que están los marcos de las cuatro ventanas y el de la puerta, con lo que queda de madera fabrican la puerta y las cuatro ventanas de dos alas. Entre todos disponen los mueblen dentro de la casa. Ella sin creer todo lo que está viendo toma a uno de los extraños personajes abrazándolo tiernamente y le aplica un beso en el cachete, lo vuelve a colocar sobre el piso de madera de la casa y esté dándole vueltas alrededor baila, al sentir un silbido se aleja yéndose con los demás, ella extenuada por todo lo que vivió se introduce entre la cama quedándose inmediatamente dormida, solamente se despierta al sentir el calor de la mañana, al querer salir abre la puerta, se encuentra con su amiga que esta con una compañera que han llegado de pura coincidencia, llevando la primera un plato de cerámica con varios alimentos y la otra una jarra llena de jugo de membrillo, ella los recibe agradeciéndoles con un gesto, las dos duende cillas colocan en la mesa, Ella al ver todo dispuesto sobre la mesa se sienta come viendo a sus dos amigas sentadas sobre la cama quedándoles los piececillos en el aire, ella sigue en lo que está lentamente va comiendo y al acabar las dos mujeres duendes van a su encuentro. Al salir ven a varias viejitas de la misma especie que en varios telares están confeccionando algo así como una manta, y prendas de vestir. Las amigas la guían a la enorme huerta  donde  los  duendes, unos  están  haciendo surcos con azadones, y otros agachados depositan las semillas entre la tierra abonada con todo tipo de desperdicios, ella con su sensibilidad alcanza a distinguir plantas de cebolla, ajo, pepino, berenjena, apio, acelga y  de último la alargada cerca de madera de donde cuelga una enorme planta de calabaza, dándose cuenta que le cuelgan muchísimos de estos frutos, y muchas flores amarillentas. Una de las amigas con una seña le da a entender que la siga, ella sin dudar va haciendo lo que ella le indicó, caminan las tres alegremente por un estrechísimo sendero viendo en la lejanía las sierras nevadas, se detienen en medio de un puente de madera viendo el río de aguas cristalinas de color turquesa. Ella no duda así como está en lanzarse al agua que al no calcular la profundidad levemente se da de cabeza con una amortiguada piedra, ella al volver a sacar medio cuerpo se ríe de ella misma, las duendas se carcajean de igual manera. Al acabarse de reir con señas les indica lo poco profundo del río, se vuelven a carcajear ella de igual manera se ríe de su error. Sin dificultad vuelve a posar sus pies sobre el puente, regresan viendo a las viejitas que han terminado con su labor, una de ellas que amablemente le entregan el fruto del trabajo de ellas, que consiste en varias prendas de vestir y una enorme manta. Ella agradecida agachándose le estampa un beso a cada una de las viejas duendas, en un acto seguido con el hermoso vestido se cubre su desnudes y al tomar de las manos de otra viejita duenda la manta  va directamente a la cabaña depositándola  sobre la cama, vuelve a su encuentro como muestra de su agradecimiento bailando alrededor de ellas, todas le sonríen y la imitan. Al poco tiempo De la cueva surgen varias madres con sus hijos y otras más que llevan alargados platos con comida, varias canastas con pan recién orneado, muchas jarras llenas de jugo de una fruta exótica y con sus correspondientes vasos. Ella les ayuda a extender un gigantesco mantel bellamente bordado con flores rojizas y amarillentas sobre la grama morada. Al colocar todo sobre el bello mantel, rápidamente aparecen todos los de la comunidad dundera los cuales  se sientan ocupando el enorme mantel, ella por supuesto se sienta de igual manera ocupando una de las puntas del mantel, se pasan mutuamente los platos, las jarras y los vasos. Al tener cada uno su correspondiente plato y su vaso. Un viejito se para pronunciando algo así como un discurso, al acabar  de  decir  ella  sin  entender  absolutamente  nada  aplaude,  todos  inmediatamente se ríen coloreando su rostro. Al acabar con las carcajadas ceremonialmente empiezan a disfrutar de los alimentos, van comiendo y haciéndose pequeñas chanzas, al culminar con los contenidos de los platos, de las canastas y de las jarras de uno en uno se van levantando, al pararse la última señora, entre las otras le ayudan a recoger toda la vajilla de cerámica y de ultimo entre las restantes recogen el mantel sacudiéndolo y doblándolo, todos se retiran a sus cuevas-viviendas, ella va directamente a su vivienda acostándose sobre la cama se cubre con la larga manta, al estar cansada y satisfecha inmediatamente se profundiza.

Al pasar de los días se mete de lleno en la comunidad, obtiene la amistad de todos los duendes e inclusive en sus tiempos libres juega con los niños haciéndose tomar cariño, colabora con todo lo que su inteligencia le permite, aprende a hablar la lengua de ellos lográndose comunicar perfectamente, a hilar el musgo lanudo e inclusive a realizar tareas de tejido en el telar, haciéndose indispensable en la comunidad.

Una mañana por osmosis siente que esta embarazada, esto la irrita de sobremanera ya que no quiere tener un hijo sin un padre, entre todos los duendes tratan de consolarla. Furiosa consigo misma una mañana huye de la comunidad, caminando sacrificialmente a la sierra nevada donde se instala en la profundidad de una cueva, al haberla seguido su primera amiga sin que la pueda ver se da cuenta de su escondite, al pasar de los días todos los de la comunidad van a buscarla, la encuentran dentro del interior de la cueva pálida y triste, al llevar sus raros instrumentos tocan diversas melodías en honor suyo, esto le sube el ánimo decidiendo devolverse a su bella morada, regresan cantado y como no quiere vivir sola, su amiga de su cueva-vivienda trae todo lo necesario para instalarse en la casa de madera. Al cumplirse los nueve meses de embarazo tiene las contracciones, una experta partera de la comunidad le ayuda a tener él  bebe  que  sale con las mismas características de los extraterrestres, al traérselo la misma duenda se da cuenta que lo que soñó es más que realidad, no se entristece si no como ya sabe se alegra y lo acepta a pesar de su rareza y le empieza a dar de su propios senos la leche necesaria para que crezca. Al cumplir un año de vida todos sus amigos duendes le celebran con una gran fiesta el primer cumpleaños, luego como suelen hacerlo de la cena y de la torta se retiran todos a dormir, estando dormidos aterriza la misma nave y sin que ella ni nadie se entere raptan los extraterrestres él bebe, perdiéndose la nave en la eternidad. 

                               EN UNA PARTICUAR SITUACIÓN

No se debido a que todo me sale al revés, mientras la gente viaja a la ciudad a estudiar o simplemente a trabajar. Yo me voy a un sanatorio a tratarme de curar de esta maldita enfermedad. Una finca-clínica perdida en lo más apartado del campo. Todos llegan rápidamente a la ciudad, yo para llegar aquí a esta clínica he tardado varias horas en colectivo, además he recorrido más de cinco kilómetros a pie. El clima es seco se hace agradable y eso me permite caminar en la extensión del patio abierto, cada día tengo una revisión médica, en las tardes en una camilla una experta me hace todo tipo de masajes. Me voy acostumbrando a mi reclusión, a veces hablo con otros pacientes que para mí son simples desconocidos. Una noche que decido caminar en el patio a través de los árboles empiezo a divisar una particular luz, que a la medida que se acerca se hace más fuerte,  y en un momento dado no sé porque ante mí se presenta lo que podría ser un gran ovni, aún más extrañado que de costumbre lo veo nítidamente comprendiendo muy bien de que se trata, no puedo dudar que se trata de un objeto volador identificado. El particular aparato apaga la fuertes luces haciéndose oscuro como la noche, a continuación suena un ruido estremecedor que nunca escuche antes. Esto  como  es lógico me hace retroceder. El ovni, o como lo quie- ran llamar vuelve a encender las luces y al sentir un aire caliente veo que el objeto volador se eleva perdiéndose en segundos de mi vista, dejando sobre la grama, que como es de noche se ve más oscura que lo usual. Puedo perfectamente observar una pronunciada huella circular, al tratar de moverme veo que lentamente desaparece, como si no hubiera ocu-rrido nada.   

                              

                                 CONCIDENCIA MACABRA

Viajo en bicicleta de la ciudad donde vivo a un pequeño pueblo de montaña, en plena ruta me sobrepasa velozmente un camión con un largo remolque, al rosarme me tengo que ir hacia derecha teniendo que parar en seco. Malhumorado por lo que me acaba de pasar vuelvo lentamente a reanudar la marcha, tomando la pequeña franja que divide con la línea blanca la vía del largo pastal, pedaleo suavemente sin pensar en nada pero si viendo hacia adelante. En un trayecto largo no encuentro a nadie, solamente siento de vez en cuando los automotores que van pasando, al doblegar una enorme curva estando en plena recta veo a alguien en otra bicicleta, acelero impulsándome con los pedales con la intención de acercármele, haciendo un esfuerzo en los pedales logro alcanzar al objeto de mi mirada. Dándome cuenta por su espalda que sobresale una larga cabellera que se trata de una joven mujer, al pasarla veo claramente que posee en su rostro suaves pecas y unos ojos claros que se ven bastante azulosos. Me le adelanto varios metros con la intención de volverla ver mermo la velocidad, al pocos segundos me da alcance saludándome con una de sus manos, como me agrada la saludo de igual manera- Diciéndole: ¿hacia dónde vas?- ella me contesta: que simplemente está paseando sin dirigirse a un lugar determinado, si quieres podemos pedalear juntos- Yo le digo: que la idea me agrada. Seguimos viendo como otros vehículos nos sobrepasan, luego de una suave pendiente que se desliza por varias curvas, pedaleando  vemos  a  lo  lejos  la iglesia y otras altas construcciones. En menos de nada arribamos por la avenida principal al pequeño poblado, ella al sacar del porta cantimplora la cantimplora se da un largo trago, luego de pasármela a mi hago lo mismo bebiendo, se la vuelvo a dar colocándola donde la saco. Seguimos por la larga avenida viendo a los pocos transeúntes  y a una pareja que pasa a tan  solo  unos metros pasando el ancho de la avenida. Llegamos a la pla- za donde nos detenemos al frente de la estatua del libertador, ponemos las bicicletas en fila apoyadas de los pedales sobre el andén- Ella me dice: que desea comer un cono de helado, yo saco un billete se lo entrego- Hablando: yo invito, ¿pero guíen lo compra?- Ella regresándome el billete ve tu que yo cuido las bicicletas- está bien. Al ver en la distancia la heladería, atravieso la calle al ponerme en la vereda o andén llego arribando, sin saber cuál sabor le gustaría, decido por dos dobles de vainilla y chocolate que se los pido a la empleada, salgo triunfal con un cono de helado en cada mano volviendo donde ella está sentada, al colocar un pie hacia delante se lo entrego- Ella con su suave voz me dice: como sabes que me gusta el cono de chocolate y vainilla- Simplemente me lo intuí- sí que acertaste pero ven siéntate con migo. Ya sentado al lado de ella, tranquilamente nos vamos comiendo lentamente el cono de helado- Ella me pregunta: ¿vienes con cierta frecuencia a este pueblo?- No para nada es la primera vez que vengo y tú…- Es la segunda vez pero la primera vez que lo hago en bicicleta, ya que esa vez vine con mi familia. Ya sin nada en la mano- Ella me vuelve a susurrar con su bella voz: qué tal si preguntamos a donde podremos ir- Está bien yo pregunto. Al ver a un campesino que lleva una ruana gris, me le atravieso en su camino- Diciéndole: usted debe conocer este pueblo bien- Claro que lo conozco porque…- Que podremos visitar mi amiga y yo- Les recomiendo que vayan al mirador, si se van por esa carretera destapada sigan que los llevara- Gracias. Vuelvo donde la chica me está esperando, al llegan ante ella me dirige la palabra: si averiguaste…- Si claro, hay un mirador- El campesino donde te dijo que queda…- Por lo que me indico el campesino, entendí que tenemos que tomar esa vía destapada y seguirla- No esperemos más y vamos. Nos volvemos a montar sobre los caballitos de metal, la dejo que parta primero, avanzamos un poco desnivelaos por la dificultad de la vía, trepamos siguiendo la ruta por una realidad de curvas abiertas y cerradas, de esa forma llegamos ante el precario mirador, descendemos de las bici poniéndolas contra la cerca de rústicos palos. Nos hacemos ante la baranda viendo la panorámica del pueblo, donde sobresale la imagen de la torre de la iglesia y alguna que otra edificación. Cansados de ver lo mismo decidimos de regresar a la ciudad. Nos volvemos a trepar, al pedalear descendemos rápidamente, sin entrar en la plaza seguimos por dónde venimos, en una curva se nos viene tremendo aguacero- Ella algo desesperada va diciendo: tenemos que buscar un lugar escampado donde nos podamos refugiar de este maldito aguacero. Seguimos a pesar de la terrible lluvia al ver una pequeña tienda nos detenemos poniendo las bicicletas al lado de la puerta, entramos y nos sentamos ocupando la pequeña mesa sintiendo el cuerpo mojado, casi al instante viene la señora- Que nos pregunta: como están de mojados me imagino que desean algo caliente- La chica va diciendo: yo quiero algo así como un café bien caliente- Yo le digo: a mí me trae lo mismo. Al rato nos trae los dos cafés, al empezar de beberlos ella saca del bolsillo de sus bluyines un paquete de cigarrillos, me ofrece uno y se pone otro entre sus labios, al encender un fosforo lo enciende, al pasármelo prendido logro prenderlo. Tomamos y bebemos el café caliente lográndonos reconfortar- Ella rompiendo el silencio me dice: que haces en la ciudad- Simplemente pinto- A qué bueno ya que yo me dedico a lo mismo, que coincidencia- coincidencia o no eso es lo que hacemos, por eso nos entendemos tan bien- estoy de acuerdo. Al ver que ha escampado nos paramos, cuando quiero pagarle a la señora ella se me adelanta- Diciéndome: como tú invitaste a los conos ahora me toca a mí pagar los cafés- está bien. Al pagarle ella a la señora salimos directamente hacia las bicicletas, al tomarlas nos encaramamos cada uno en su respectiva cicla, seguidamente  pedaleamos  viendo  un camión que nos pasa a gran  velocidad por supuesto encharcándonos más de lo que estamos- Ella es inamisible que la gente no tenga ni la mínima sensibilidad- Si son unos hijos de puta. Seguimos callados sin darnos cuenta arribamos a la ciudad, al recorrer la gran avenida en un semáforo de beso nos despedimos cada uno tomando su correspondiente ruta.

A los días al detener un autobús, me subo entre los pocos pasajeros, cuando estoy buscando un puesto la hallo a la amiga del paseo en bicicleta, ella con gesto me dice que me siente, se corre y hago lo que ella me dijo- Ella me dice: que sorpresa más grata, hacia donde vas… A comprar unos óleos para poder pintar, y tu…- A mi casa, mas bien como no tengo mucho para hacer te acompaño donde vayas a comprar los óleos y después si quieres te convido para que vengas a mi apartamento- Perfecto. El bus avanza lentamente debido al tráfico que casi recorre metro por metro- Yo viendo la situación en que se encuentra el bus le digo: bajémonos que andando vamos a llegar más rápido- Si tienes más que la razón, ella se levanta primero llevando una mochila tejida, yo hago lo mismo- Y al decirle ella al chofer: que detenga el bus. Nos bajamos sintiendo la contaminación, entre varios vehículos apurando los pasos llegamos a la acera donde casi tropezándonos con la gente. Logramos a avanzar, caminamos con el deseo de tomarnos de las manos, al rosarla nos las tomamos sintiendo el calor sumada a una emoción interna, con el sentido del amor llegamos a la papelería especializada en productos de arte, entramos viendo a varias personas que están en lo mismo, una joven al acabar de atender a una señora se me viene separándonos la pequeña vitrina- La chica va murmurando: en que les puedo atender- Yo muy relajado le digo: ustedes seguramente tienen tubos de óleo- Sí que los tenemos, que colores necesitas- deme los colores primarios, más un azul turquesa, un verde esmeralda y un amarillo  lo  más  claro  posible.  La  chica de una larga vitrina extrae los óleos y me los muestra uno por uno- Yo  le  palabreo: si exactamente son esos, por favor empáquemelos- Primero los tiene que pagar en la caja. Vamos hasta la caja al pagárselos a una señora ella misma me da el paquete que se los entregó a mi amiga para que los guarde entre su mochila. Al querer salir alguien nos empuja que vamos a caer casi de cabeza contra el cemento del andén, haciendo un esfuerzo nos paramos- Ella esta ciudad me tiene de la cabeza, ya no me aguanto tanto acelere- Si tienes razón yo no sé porque no me he ido a vivir al campo. Seguimos caminando entre la gente varias cuadras adelante- Ella antes de llegar a una esquina me dice: es por este otro lado. Doblamos por donde ella dijo, pasamos los carros que están detenidos por el semáforo en rojo, al llegar al andén empezamos a ascender por una angosta calle. Al llegar ante la vieja fachado del edificio, ella con la llave abre la puerta, subimos escaleras arriba y al arribar a la primera puerta con otra llave logra abrirla, me hace entrar como me siento aturdido y algo cansado al ver un alargado sofá no dudo en sentarme, ella se sienta al lado mío recostando su cabeza contra mi pecho, los dos al mismo tiempo cerramos los ojos logrando conseguir un aliviado sueño, al abrirlos impulsivamente nos abrazamos, en un acto seguido al rosarnos los labios nos besamos prolongadamente sintiendo una fragancia que nos eleva emocio-nadamente, separamos los labios para volverlos a juntar en un beso profundo y prolongado. Al volverlos a separar ella tomándome la mano me dice: desde el principio que te vi ya me gustaste- Yo le contesto: no te preocupes que a mí me ocurrió exactamente lo mismo- Ella meramente coincidimos ya que era el momento de conocernos. Nos volvemos a besar esta vez con lengua y todo- Al parar de besarnos ella me palabrea con su bella voz: Quiero que veas lo que pinto. Nos levantamos lentamente ella llevándome de la mano hacia una puerta que abre  presentándome  un  lugar  amplio  con un par de caballetes, y en las paredes hay varios tablones recostados muy bien pintados, en abstracto  con colores intensos- Yo  al  apreciarlos  uno por uno le hablo: pronun-ciando con mi voz: este se asemeja a un atardecerer, este otro es como la visión de un mundo exterior, y este último es como si vieras algo extraño desde lejos- Lo pinte con esa intención se ve que aciertas en los comentarios- Sí que me agradan. La abrazo, alzándola la llevo al sofá donde no dejamos de besarnos y acariciarnos, al darle término- Ella me dice: tengo ganas en este momento de sol, que tal si vamos a la montaña- Te acolito ya que me parece una idea increíble- Acompáñame a la cocina que busco a ver que podemos llevar de comer. Al entrar a la cocina ella en diferentes gavetas saca pan integral, jamón en rebanadas y de la pequeña nevera extrae queso, tomates y una cebolla redonda, con un par de tablas y cuchillos partimos en tajadas los tomates y la cebolla con los cuales fabricamos los san duches que empacamos en una bolsa grande, ella por último saca de su mochila los óleos que los coloca encima de un mueble, para colocar la bolsa dentro de la mochila, se la coloca cruzada mente sobre el hombro- y me dice: vamos. Salimos por la puerta que ella misma se encarga de cerrar con la llave, bajamos por donde subimos al lado de una pareja que discute a la calle, seguimos ascendiendo por la misma calle que al terminar por una senda que se abre en la misma dirección seguimos loma arriba, nos sentamos a descansar sobre un tronco de un árbol caído, al tomar aliento subimos viendo el panorama de la ciudad que se pierde en la distancia. Seguimos el ascenso entre enormes árboles nativos. Llegamos a un plano donde en el fondo hay una casa vieja bastante desbaratada, nos sentamos sobre el tronco de un roble a descansar- Ella me dice: qué lugar más extraño se ve que de tiempos inmemoriales nadie habita la casa, ahora que descansemos quiero que veamos detalladamente la destruida casa a ver que extrañeza podemos hallar- Yo le contesto: me parece buena idea. Respiramos profundamente viendo desde la distancia una parte de la ciudad. De pronto sentimos una agitación viendo los árboles que se mueven violentamente como si se fueran a desplomarse, en un acto seguido repentinamente surge del abierto firmamento un ovni que aterriza, atemorizados por lo que estamos viendo. De la extraña nave se abre una repentina compuerta, nos levantamos retrocediendo viendo cómo surge un extraño personaje iluminado, mi amiga reacciona mal al recoger una piedra la lanza logrando impactar con la piedra al peculiar personaje. Seguidamente se escucha una entonación, con una particular linterna la alumbra transfor-mándola en el ser más abominable que he podido ver en toda mi vida, al quererme atacar corro loma arriba logrando esconderme detrás de un gigantesco árbol, desde donde puedo ver elevarse al ovni que desaparece en cuestión de segundos. Confundido por todo lo que ha ocurrido en tampoco tiempo, la veo venir a la vestía y cuando quiero correr ya es demasiado tarde ya que me arroja mordiéndome bestialmente con sus colmillos dándome la muerte.  

                                  LA SECRETA EXPEDICIÓN   

El comandante Frederick recorre con ansiedad, una y otra vez, la longitud de su despacho ya que tiene algo en mente que quiere realizar. Al estar reunidos sus hombres al otro lado de la moderna edificación, siente que es el momento de hablarles sobre su proyecto. Al hacer un frio considerable, del ultra-armario saca la campera impermeable de un material aislante que no deja pasar al frio y que nada lo toque, se la pone. Al tomar de un mueble metálico el maletín abre con un interruptor la puerta, sale bajando por las escaleras eléctricas,  camina lo necesario encontrando el elevador que se abre automáticamente, al volverse a cerrar ve a través del cristal la intensidad de la lluvia, con ese sentido de la realidad llega al enorme salón donde ve a sus hombres ocupando la larga mesa, se sienta justo en la cabecera- Tomándose la palabra va diciendo: tengo el siguiente proyecto para esta tripulación, tenemos una moderna nave a nuestra  disposición, es la más veloz hasta ahora que haya visto logrando superar muchas veces la velocidad de la luz, aquí con migo tengo el plano de la nave. Saca del maletín una memoria que la instala en la enorme super-pantalla dimensionada, con su mirada la enciende e inmediatamente aparece en gran escala el plano de la nave- Va agregándole a la cuestión: él único que está preparado para maniobrar la nave es el teniente Emil Sotol que está aquí presente. El teniente se para con el propósito que lo vean sus compañeros, con él hicimos durante largo tiempo en el simulador idéntico a la nave un consciente trabajo de conducción, para esta secreta expedición por el espacio vamos a necesitar al señor Carlos Saura que se encargara con todo lo referente a las comunicaciones, él tiene la experiencia y la capacidad para cumplir con su trabajo a cabalidad, para manejar los espacios de la nave tenemos a la señorita Ada Brisen, para el manejo de los robots tengo al señor Listón Arman, para el manejo de las armas mortales tengo al señor Humberto Almagro, además la tripulación va a necesitar de los señores: Peter Windows, Lam Cuper, las señorita Liliana Brandon y Margarita Contreras. La misión que vamos a realizar es para posarnos en el planeta Luxa, que posee gran variedad de metales que le interesan al sistema planetario de nuestra galaxia. Descansen lo que más puedan ya que el próximo jueves a las diez de la mañana ocuparemos la nave, para despegar dos horas más tarde, en ese lapso de tiempo entre todos tenemos que ver que los circuitos y los sistemas de la nave estén en perfecto estado. Gracias por la atención prestada nos vemos en el aeronave media hora antes de ocupar la nave, o sea a las nueve y media de la mañana. Todos hablando van saliendo al elevador que los deposita en el primer nivel donde se despiden de apretón de manos y abrazos.

El día convenido todos aparecen a la hora exacta en el salón de espera del aeronave, a la  hora  establecida  ocupan  la enorme nave, entre todos revisan parte por parte de la nave, los circuitos, los aparatos, y los instrumentos dándose cuenta que está en óptimas condiciones,  a  la hora  señalada parte la expedición. Va tomando velozmente la secuencia del firmamento, superando varias veces la velocidad de la luz. Estando atravesando el contorno del espacio sideral ven en la distancia una nave que inmediatamente desaparece de su vista, el conductor experimentando hace lo mismo para surgir cerca de un ovoide planeta llamado Altrux,  entra posándose en su órbita dándole la vuelta alrededor, sale como entro surcando el espacio cósmico- El comandante Frederick viéndolo a través de su monitor- Le dice al teniente: lo veo muy bien- Para eso me entrene con conciencia- Me gusta oírlo hablar de esa manera, su capacidad me tiene satisfecho- Gracias comandante por esas halagadoras palabras. Al encontrarse de frente con un encendido meteorito el teniente maniobrando sin problema lo esquiva. Todos cansados se van a sus respectivas recamaras solamente se quedan la señorita Liliana Brando y el teniente conversando, al hacérseles tarde el teniente abre el piloto automático y cada uno se va a dormir a su respectivo dormitorio. Luego de cumplir con el objetivo de sus sueños cada uno vuelve a sus posiciones que le fueron asignadas. El comandante con su vista hace que aparezca el ultra-micrófono desde el cual habla: tripulación buenos días necesito que todos estén alertas por si acaso, hay alguna necesidad que suplir y gracias. Al ver a través de la pantalla el planeta de su interés, enfoca la profundidad donde están las diferentes minas que le interesa explotar a la organización del sistema solar, en el monitor ve la distancia en horas luz calculando que son doce las horas que separan la nave del planeta. El teniente al ver una nave enemiga trata de esquivarla lográndolo, repentinamente en la nave aparecen varios de esos soldados interestelares  que le apuntan al ateniente que maniobra la nave y a los otros astronautas- Uno de los uniformados apuntándolo con ultra-revolver le dice: desvié el curso de la nave de lo contrario lo desaparezco. El hace lo que le dijo el tipo uniformado. A los soldados los sorprende el grupo de robos comandados por el señor Listón que  con una  ultra-metralla les dispara que inmediatamente desaparecen, logrando que reaccione el teniente que toma por el cuello al amenazante personaje que fue el único que no desapareció- El comandante desde la distancia cósmica llama a los señores Perer y Lam, el primero para que se lo lleve y el segundo para que ponga la barrera que no dejara entrar a la nave a ningún intruso. Al operarse la situación el mismo teniente vuelve al curso con destino del planeta. Al paso de las horas el teniente logra que la nave entre en el circuito del planeta dejando flotar la nave estacionándola sobre el aire planetario- El comandante Frederick piensa diciendo por el micrófono: que se alisten el señor Lan y la señorita Liliana Brandon con el objeto que ocupen la pequeña ultra-nave, ya que van hacer una expedición al planeta, con objetivo principal que vean la situación de orden público y si hay una confrontación interna o algo por el estilo. Al escuchar tanto ella como él se instalan en la pequeña ultra-nave, al abrir el propio teniente la compuerta velozmente sale volando la ultra-nave, al tomar la dirección correcta abarca la atmosfera del planeta, algo después llegan a la nación Julia que está en guerra con la nación vecina Luxis, al querer aterrizar no pueden ya que hay una batalla campal con todo tipo de artillería pesada, Ella tanto como él ven a través  del ancho vidrio  de cristal de la nave las bombas de criptón que caen en cualquier parte- la señorita Liliana inmediatamente se comunica con el comandante diciéndole: que es imposible hacer un aterrizaje en esas dos naciones ya que hay una guerra constante- El capitán le responde: que dirijan la nave hacia el otro lado del planeta. Al cumplir la orden giran a la velocidad de la luz llegando al poco tiempo al otro lado del planeta, al ver el enorme desierto de grandes dunas que comparten varias naciones deciden aterrizar, lo hacen exactamente en una especie de cráter muerto. Al bajarse sienten la alta temperatura que ensequida los azota, esto sumado a un viento endemoniado que arrastra la arena dándoles en la cara, esto hace insostenible que tienen que regresar de una a la nave. Se vuelven a dirigir a la madre nave trasmitiéndole al teniente: señor no sabemos que hacer ya que al estar fuera de la nave es insostenible por la altísima temperatura y el viento incesante que inclusive es capaz de arrastrarte- El comándate lográndose meter en la comunicación les responde: sin moverse de donde están, anclen la nave con el sistema. Con el super-rastreador de metales que al conectarlo hará una sistemática operación que al salir los resultados en la pantalla de la ultra-nave la deben gravar para poder saber los resultados- El señor Lam: contesta afirmando sus labios: comandante ya que usted confía en nosotros haremos tal cual como usted dice- Perfecto. Al ver en el tablero el interruptor de la sonda, ella al encargarse de accionarlo esta sonda sale a máxima velocidad bordeando la arena del desierto, con una capacidad increíble va mandando las diferentes informaciones sobre donde se encuentran las famosas minas al computador de la pequeña nave, estos de una vez la dirigen a la nave madre logrando de esa manera descubrir los metales que hay bajo tierra. Acabada la operación hacen que la sonda vuelva a su lugar de origen. Al quererse retirar son interceptados por un ovni que desde la distancia les dispara una ultra-componente destructivo. Por suerte logran bloquearlo con el ultra-escudo, al despegar y querer ir hacia la enorme nave, el ovni los persigue ellos haciendo un giro saliéndose de la atmosfera del planeta logran perderlo, a volver a la órbita del planeta lo tienen que enfrentar, lográndolo destruir con su arma letal, en instantes regresan a la nave siendo felicitados desde la lejanía por el comandante, el teniente y la tripulación por el éxito obtenido. 

El día siguiente al ser el centenario de Ada Brisen se reúnen todos con el compromiso de hacerle una fiesta sorpresa, al estar ella desprevenida, el mismo señor Lam haciéndole una broma pesada, se disfraza con carácter de ser un enemigo, ella al salir del mega-baño, él escondido aprovecha y la sorprende, ella  al  verlo  con  la  apariencia que tiene empieza a correr pero él  no  tiene  problema  para  darle  alcance. La  toma  de  la  cintura  sintiendo que tiembla rápidamente le coloca las manos hacia atrás poniéndole las ultra-esposas, de esa forma la lleva por el circuito interno de la nave al salón comunal, al entrar es sorprendida por toda la tripulación y por el mismo señor Lam que se desprende del disfraz- Ella siendo desposada grita: señor Lam casi me mata de un susto. Todos se carcajean inclusive ella. Al ver la torta todos se dirigen a la mesa donde se encuentra, todos en corro le cantan el feliz cumpleaños, ella reacciona saliéndose las lágrimas- Va diciendo: valió la pena el susto porque hace tiempo que alguien o alguienes que aunque está mal dicho no suena tan mal, no me celebraban desde hace centurias mi centenario. El robot preferido se encarga de encender las velitas, ella al agacharse soplando logra apagarlas, inmediatamente de esa forma alborotada entre todos le vuelven cantar el feliz cumpleaños, luego de partir en pedazos iguales la torta que el mismo robot se encarga servir en platos desechables y la crema de helado de chocolate. Satisfechos se entrelazan a bailar con la música que interpretan los restantes robots, al subir el tono del ambiente todo se vuelve una confusión y terminan tan solo en la madrugada si a esta se le puede llamar de esta forma.

Salen de la órbita, satisfechos con la información que lograron conseguir hacia otro rumbo. 

                                                     INDICE

     pag.1------------------------------------------------------------------- Prologó

    Cuento No. 1, pag.2---------------------------------------La quinta esencia

    Cuento No. 2, pag. 11--------------------------------------------El más allá

    Cuento No. 3, pag. 15-----------------------------------Un platillo volador

    Cuento No. 4, pag. 19---------------------------------La tormenta eléctrica

    Cuento No. 5, pag. 23---------------------------------------------El satélite

    Cuento No. 6,  pag. 26---------------------------------En la calle de Marte

    Cuento No. 7,  pag. 36------------------En la ciudad moderna de Saturno

    Cuento No. 8, pag. 45------------------------------------Un viaje a Júpiter

    Cuento No. 9, pag. 57------------------------------------------------El virus

    Cuento No. 10, pag. 59-----------------------------------Un hecho extraño

    Cuento No. 11, pag. 64--------Calipso y Trusi, del sistema solar Xipsis

    Cuento No. 12, pag. 74-----------------------------Lo extraño de un rapto

    Cuento No. 13, pag. 81------------------------En una particular situación

    Cuento No. 14, pag. 82------------------------------Coincidencia macabra

    Cuento No. 15. Pag. 88------------------------------La secreta expedición.