miércoles, 9 de marzo de 2016

CUENTOS DE BOYACÁ
El CASO DEL CORONEL ANTONIO ARRENDO
En la época de las luchas libertadores, el moreno Antonio Arrendo. Al venir de África (de Lenda) a Cartagena de indias, es enviado por un emisario a Santafé de Bogotá donde se entrevista con Simón Bolívar; quien lo manda a Corrales a que se entrevista con Francisco de Paula Santander, quien al ver el valor aguerrido que posee lo nombra coronel de las filas del batallón cazadores. Al desempeñarse con éxito en la sangrante batalla de Pisba, dirigiendo a esos hombres llaneros con una estrategia minuciosa e inteligente, donde derriba en su caballo y con su espada a cada uno de los chapetones que se le van cruzando en su camino. Terminada la batalla con un gran triunfo sobre los españoles, decide conocer la región. Una mañana nublosa sale montado sobre su caballo, acompañado de dos de sus mejores hombres, por un sendero montaña abajo. Luego de andar por diversos parajes y al llegar a un pequeño caserío donde sus pocos pobladores le dan una buena bienvenida. En una fiesta donde asan una vaca, al ritmo de tambores y de instrumentos de viento bailan con gozo acampanándose de guarapo, estando bailando con una matrona ve sentada a una joven mestiza que lo cautiva por su belleza, al zafarse de la señora saca a bailar a la joven de un rostro del cual sobresalen unos bellos ojos negros y llevando un cabello bastante largo. Ella no se hace rogar y bailan uno y dos piezas hasta que el impulso hace que seduzca a la joven, no duda de retirarse de la enorme fogata a un risco donde al ver una explanación, en pleno campo le quita la ropa y él se desviste, confundiéndose sus cuerpos sumergidos en la espesa hierba, hacen de una y otra forma el amor quedándose dormidos abrazados. Solo son despertados por los rayos del sol, se levantan de donde están poniéndose sus ropas, y volviendo al caserío, luego que ella lo convida a un suculento almuerzo, se despide de besos prometiendo su regreso. Parte loma arriba uniéndose a su ejército donde los dejara. Al pasar de los días se alista al mando de sus hombre y en Topaba al encontrarse de frente con los españoles, después de una intensa batalla los derrota, pero con la mala suerte que una brizna de cañón lo toma por sorpresa haciendo una profunda herida dejándolo de muerte. Agoniza rodeado de sus hombres, pensando en la hermosa mulada sin poder realizar el sueño de su vida.
VIAJE A LA LAGUNA NEGRA
Arturo al llegar en bus con su bella novia a la plaza del pueblo de Mangua, luego que el chofer detiene al automotor entre los distintos personajes se bajan llevando sus mochilas en la espalda, al ver en la distancia la iglesia construida en los cuarenta, ocupan una banca que está cerca de una figura de piedra que representa una mujer indígena que sostiene una especie de vasija completamente redonda- Irene (mirando su reloj) son las ocho de la mañana a qué horas llegaran Ernesto y Camila- Arturo (luego que la besa) quedamos de estar aquí a las ocho y media, esperémoslo que ya llegaran. Pasa lentamente el tiempo ya que cuando se espera a alguien el tiempo se hace una eternidad, en la hora fijada escuchan el motor de un vehículo, ellos se levantan y haciendo su aparición el bus que instantes parquea justo donde ellos se bajaron, luego que se bajan varios campesinos descienden Ernesto, Camila y la hermana de ella, se saludan cálidamente- Camila: ustedes trajeron lo que acordamos en Tunja- Irene y algo más, tengo curiosidad a que altura sobre el nivel del mar estaremos- Arturo (tomándose la barba) esperen que le pregunte a ese señor. Él se aproxima al señor preguntándole a quemarropa: amigo por casualidad sabe a qué altura estamos- El señor: por  lo  que he oído este pueblo está a dos mil ochocientos cincuenta metros- gracias. Al estar satisfechos con la inquietud, empiezan a caminar loma arriba por las diferentes cuadras de casas dispares. Al alejarse del pueblo se van cruzando con varios campesinos e incluso con una viejita que lleva enlazados dos ovejas, al dejar las últimas casas tomando por un estrecho sendero se hace más pendiente, al hallar unas gigantescas piedras que están entre varios árboles de eucaliptos y otros tantos pinos- Irene va diciendo: este lugar está bueno para hacer una parada- Laura (la hermana de Camila) que buena idea ya que necesito reposar al menos un rato. Se sientan sobre las hendiduras de las piedras viendo el paisaje de diversos cultivos y de los mismos árboles, Camila de su bolso saca una caja de galletas surtidas que reparte- Ernesto luego que se come una de las galletas va diciendo: que faya que en la mayoría de las tierras boyacenses no hayan árboles autóctonos, seguramente la colonización española acabo con lo natural de estas regiones- Camila: si, tienes toda la razón, pero continuemos que todavía nos falta la mayoría del camino. Se levantan y empiezan de nuevo a mover sus pies, cada vez el camino se hace más pendiente que Laura al perder el oxígeno se tiene que tomar de su hermana- Esta última: detengámonos que mi hermana está asfixiada. Hacen lo que dijera Camila sentándola sobre el pastal- Arturo: se me ocurre darle panela- Ernesto es muy buena idea ya que cojera fuerza. Arturo saca una bolsa repleta de pedazos de panela y la reparte, al comerla Laura se restablece retomando el color su rostro y va con su voz murmurando: ya me siento mucho mejor sigamos. Al seguir por la pendiente son invadidos por la niebla que para no perderse uno de los demás, se toman de las manos- Arturo que poca visibilidad, procuremos caminar con cuidado de lo contrario puede ser fatal. Estando  mirando  tan  poco, por  suerte  el panorama se despeja volviendo todo a la normalidad.  De ese modo caminan más tranquilos empezando a divisar los primeros frailejones, pero los envuelve otra vez la niebla dejándolos sin ver absolutamente nada- Laura dirigiéndoles la palabra: este lugar posee un tono demasiado mágico, seguramente la laguna tiene su inconveniente para llegar hasta ella, que hacemos- Arturo: que frío tan terrible, es mejor volvernos agarrarnos de las manos no vaya hacer que se pierda alguno de nosotros. Al tomarse de las manos se quedan quietos casi paralizados, esperan ensimismados. Por suerte la niebla se retira y en la lejanía ven la laguna abajo en forma alargada- Camila: que espectáculo y sin pagar entrada. Todos se ríen produciendo sus risas un eco aterrador- Ernesto: que eco tan increíble no sé cómo se multiplico, bajemos. Descienden con la dificultad de las pequeñas piedras que al pisarlas ruedan de tal forma que producen un sonido muy peculiar, al arribar al pie de la laguna la claridad del agua trasparenta las nubes que van pasando, de cierta manera se dibuja sobre la superficie del agua la figura de una mujer que carga un niño pero en minutos se diluye- Irene: vieron a Bachue y a su hijo como se dibujaron en la superficie de la laguna, que tendrá que ver esta laguna con la de Iguaque- Arturo: yo creo que mucho, tengo algo en el estómago deberíamos apro-vecha y comer. Irene saca de la mochila unos emparedados de jamón y queso que con antelación preparo en su casa, los reparte entre todos ellos y luego saca el suyo que no duda en meterle los dientes, comen en silencio absorbidos en la contemplación de la laguna que está rodeada de pequeños frailejones, en un momento mágico comienzan a caer del firmamento gotas luminosas y enseguida del otro lado de la laguna se forma un arcoíris de una belleza increíble- Camila va soltando la lengua: que magia si no lo estuviera viendo no lo creería. Luego que pasa el fenómeno deciden devolverse por donde vinieron. 
LA DESAPARICIÓN
Alina en una reunión de amigos que se realiza en el apartamento de un amigo de Felipe, escucha a una amiga del dueño del lugar hablar del salto de la candela, que se trata de un lugar de una magia increíble. Pasado los días llama por celular a su amiga Lina obteniendo un no rotundo, ya que ella tiene un asunto pendiente. Al ser ella una aventurera empedernida decidirse irse sola, la noche anterior empaca lo que considera necesario para hacer ese viaje. A la mañana siguiente después de un sueño reparador, se despierta gracias que de antemano ha puesto el despertador. Con su mochila sobre la espalda sale de su pequeño aparta estudio, que queda en la Macarena a la quinta. Sin problema toma un taxi que al no haber en esa primera hora de la mañana trafico llega supremamente rápido a la terminal, al entrar en el recinto le pregunta a un policía bachiller: usted debe saber dónde salen los buses que van a Sogamoso- El joven le contesta: en el segundo módulo salen los buses con destino de Boyacá- Gracias. Al alejarse del uniformado arriba a dicho módulo, va viendo los pequeños lugares de las empresas de buses, al ver en la ventana un pequeño aviso con ese destino, después de un señor compra el pasaje, de una se va donde le indicara la señorita que le vendió el boleto y fácilmente estando en la plataforma de la empresa aborda el autobús sentándose al lado de una señora. Al arrancar el bus como tiene un sueño bárbaro se queda dormida y solo abre los ojos en el momento que el bus está entrando en la terminal de Tunja, al detenerse el bus se sube un señor vendiendo varios comestibles, ella  como  tiene  ganas  de probar las habas, le compra un paquete que al probarlo le queda gustando. Luego que se montan varias personas en el automotor, arranca tomando la vía en cuestión de cuarenta minutos que ella está entretenida con el paisaje el bus llega a su destino, se baja detrás de varias personas y se instala en el interior de la terminal, con suerte le pregunta a un señor campesino y este señalando le indica la buseta que va para la vereda Aguazul. Al ver el bus con el letrero con ese nombre se sube ocupando la primera silla al lado de un muchacho que no para de mirarla, al llenarse el pequeño vehículo arranca saliendo del lugar de los buses, toma la avenida y ella va viendo por la ventanilla como van dejando diferentes construcciones disimiles, al salir de la pequeña ciudad ella comienza a ver el campo y en menos de nada el bus se detiene al lado de una pequeña tienda de lata donde pregunta por el camino al salto- La señora a la cual le pregunto le contesta: camine en esa dirección más o menos tres cuadras y hallara a la izquierda el camino. A la misma señora le compra una gaseosa y un paquete de cigarros Piel roja, se sienta al borde del andén a fumarse un cigarrillo el cual lo acompaña con sorbos de la gaseosa, al terminar le entrega a la doña el embace y sique las tres cuadras y un poco más hallando el sendero, anda tan fresca como una paloma de la paz entre grandes eucaliptos, luego sube una montaña que el camino al darle vueltas al cerro encuentra el enorme salto que cae vertiginosamente. Ella alegremente escuchando el torrente se sienta sobre una piedra a ver la caída vertiginosa del agua, en esas se le pasa el tiempo y al sentir hambre saca de su mochila varias frutas con las cuales calma el hambre. Satisfecha se levanta y desde varios puntos estratégicos ve el torrente de agua que cae, al ver que está oscureciendo busca un lugar donde colocar el iglú, lo halla al lado de un inmenso pino al creer que este la puede proteger, de la parte posterior de la mochila desenrolla la funda, de la cual saca el iglú que al extenderlo sobre la grama lo arma, colocándole las estacas en los extremos. Al ver que oscurece apareciendo repentinamente las estrellas a pesar del frío se sienta a presenciar los astros proporcionándole una calma mezclada con una satisfacción increíbles, al pasar un lapso de tiempo sintiendo un frío terrible decide abrir su mochila y de un tirón saca el saco de dormir de plumas de ganso, mete acomodando la mochila y luego el saco, cierra la carpa con la cremallera y por último se introduce en el saco durmiéndose escuchando el torrente de agua y el zumbar del viento. Al estar completamente profunda es despertada por una tormenta que confunde los sonidos, y que mueve la carpa de una manera que la asusta, seguidamente al arrancarse las estacas sale con carpa y todo volando a la corriente que al caer desaparece sin dejar el menor rastro.
LA RUANA EMBRUJADA
A una bella amiga llamada Mónica
La siguiente historia ocurrió durante afínales de los años setenta, me la conto tal cual una de las tejedoras de ruanas de Nobsa en una de mis correrías.
La señora como es su habitual costumbre abre su tienda de tejido, como siente calor se saca su ruana de color café y se pone a tejer en su telar de madera, estando concentrada en su tarea se presenta una muchacha con el cabello alborotado y que le va diciendo: Estoy buscando una ruana puedo ver las que tiene- La señora le contesta: pase por este lado. Ella haciéndole caso va a una estantería donde la señora tiene las diferentes ruanas dobladas, va viendo una por una midiéndose todas las ruanas dejando un desorden terrible. En el momento que la señora desesperada se levanta- La chica se le adelanta: me encanta esa ruana que tiene sobre el respaldar de la silla- Esta ruana no se la puedo vender por que tiene más de cien años, además la hizo mi abuela imagínese el cariño que le tengo- La chica (insistente) es que esa bella ruana me es familiar,  es hermosísima no sabe cuánto la apetezco. Soy capaz de pagarle el triple si es necesario- La señora (nerviosa) es que además esta embrujada- Aun así me gusta más, véndamela por lo que más quiera. No me queda otra opción se la vendo por esta suma,  pero por lo menos quiero saber quién se la lleva- La chica: mi nombre es Mónica vivo en Bogotá y estudio en la universidad de los Andes antropología. Mónica luego que le paga la suma que le dijera a la señora se la pone, sale de la tienda irradiante de felicidad. Como siente sed pasa la calle al parque principal, al ver en un toldo a una señora que vende jugos y golosinas va al lugar diciéndole a la campesina: de que son jugos:- Está le contesta: son de fresa, pera, y mora- Por favor deme uno de mora. La señora tomando la jarra se lo sirve y ella se sienta en una de las bancas y observando las gruesas palmeras se lo toma lentamente, al quererse levantar siente en su interior algo que la conecta con otra cosa diferente a la que está viviendo,  se olvida de la realidad y por supuesto de la señora que le vendió el jugo, camina con una misión predestinada sin saber de qué se trata, anda en esa sintonía subiendo las escaleras y pasa al lado de la iglesita viendo a unas monjas que están entrando, sin detenerse, sin mirar hacia atrás toma la loma, luego una montaña llegando a un rancho derruido por los efectos del tiempo, donde sale una viejecita que le va diciendo: tenga  cuidado  que esa ruana que tiene puesta esta embrujada. Al volver por un momento a la realidad se da cuenta que la vivienda es inexistente y aún más la anciana; sin poder detenerse ya que siente que tiene que llegar a un destino. Despreocupada anda subiendo la cuesta sin entender porque no se cansa, avanza y avanza hasta llegar un páramo donde siente como las nubes pasan por su cabeza. Al ver en la lejanía una laguna esto le da más fuerza y sintiéndose como diosa llega al pie de la laguna donde el fondo no se ve, sí al contrario se trasparentan las nubes y el sol, de este astro o sea de la profundidad surge un hombre con vestido blanco largo y unas extrañas sandalias, cuando ella le mira los ojos ve unos ojos cafés que irradian una fuerza increíble, seguidamente le ve el rostro dándose cuenta que posee una larga barba y que está apoyado sobre un bastón de jade. Este hombre en chibcha le dice algo que ella por más que quiere no puede comprender. Volviéndolo a mirar a los ojos su mundo interior tiene un giro increíble que cuando se da cuenta esta en su cama viendo la ruana que esta sobre el respaldar de una silla.
EL ESPÍA
Estando Simón Bolívar en el pequeño caserío de Tibasosa en compañía de Francisco de Pablo Santander, En una tienda de campaña ocupando una mesa comiendo, Bolívar (sosteniendo el tenedor) le dice a Santander: sé dé una notable persona que se llama: Francisco Marino y Soler que nos puede servir de espía ya que este hombre tiene cualidades innatas para desempeñar esa función, yo mismo lo he confundido ya que imita al que le venga en gana con una facilidad asombrosa. Qué tal si le decimos si quiere espiar  a  los chapetones ya que le podría sacar su estrategia militar, la cantidad de hombres y de armas que cuentan para darnos batalla- Santander: me parece excelente idea.
A la mañana siguiente Bolívar llama a dos de sus buenos soldados, al venir ellos dos les dice: vayan a Tunja y busquen al señor Francisco Marino y Soler, díganle que es de parte mía que lo necesito con urgencia- Si mi general Simón. En cuestión de días se presentan los dos patriotas acompañados del señor Francisco, se bajan de los caballos y se presentan ante Bolívar que está leyendo el acta de la revolución francesa. Este último al verlos se levanta y le va diciendo al señor Marino y Soler: bienvenido a la libertad ya sabía que mi llamada no sería en vano, necesito un favor para estas tierras que quieren ser liberadas del yugo español. Vaya a la guarnición de los chapetones y hágase pasar por alguien importante que viene de España, dese cuenta de las estrategia que van a poner en curso contra nosotros, de las armas y por su puesto si hay algún nuevo invento en esta materia. Dese prisa que pensamos sorpren-derlos en el puente de Boyacá. Al darle un uniforme de un prisionero de primer rango, al ponérselo le queda como añillo al dedo y de una va a la guarnición de Tunja, se presenta hablando mordazmente como si fuera de Cádiz ante el general Murillo como un espía mandando de la corona, con la ayuda de un preso patriota se hace que lo imita como un criollo, al ver los españoles que tiene cualidades increíbles para imitar al que le venga en gana; pero les hace entender a los españoles que necesita más entrenamiento para ganar seguridad en este aspecto. En las noches mientras todos duermen, se presenta como el propio Murillo ante los centinelas que logra confundirlos, de esa forma se entera de la estrategia y de los variados  mosquetes  y de los cañones que poseen. Sabiéndolo todo vuelve donde Simón y lo entera de lo que él desea saber. Esto ayudo a la estrategia que utilizo Simón Bolívar para vencer en la batalla de Boyacá y en otras tantas batallas.
EN UNA DE LAS ISLA DEL LAGO DE TOTA
Siendo los nuevos tiempos de la república, un gobernante de la ciudad de Sogamoso desiste de su puesto de alcalde entregándole el puesto a su sucesor más inmediato, Deja a su familia y las cosas materiales vistiéndose de paisano. Al alejarse de todo lo concer-niente al poder del ser humano, va con unas pocas herramientas a la orilla del lago de Tota. Al derribar varios árboles construye una balsa, al ponerla en el agua dispone las cosas que le servirán y con un remo que fue lo primero que se hiciera, rema con su energía lago adentro llegando a una de las islas más grandes. Lo primero que se hace es un cambuche provisorio, seguidamente un sitio donde cocinar. Con esos dos lugares indispensables para la subsistencia se dedica a la meditación y a la pesca ya que en el lago existen peces en abundancia. Pasado el tiempo conociendo a la perfección cada rincón de la isla, en un enorme árbol (estratégico ya que esta en medio de la isla donde se protegerá en caso que venga algún visitante), comienza a derribar de diferentes sectores de la isla un árbol, reuniéndolos cerca del árbol elegido en una parte conside-rablemente alta y entre el grueso ramaje comienza hacerse una vivienda con gruesos palos que convierte en tablas. Aunque se demora con toda la paciencia y sus ganas trabaja aprovechando los tiempos secos, hasta que una tarde da por terminada labor de la construcción, y al pasarse a vivir en su nueva vivienda goza de la vista del lago. Al haber trascurrido el tiempo posee el pelo hasta la cintura, una larga barba y una musculatura que lo hace ver muy dis- tinto de lo que era en su vida pasada y asemejándose más a un mono. Una mañana navega hasta la orilla del lago, va a la ciudad y no se sabe de dónde se roba unas láminas delgadas de metal, a la misma vez alguien le regala semillas de diferentes plantas. Las hace trasportar y en su balsa las lleva a la zona que le será más fácil llevarlas a su casa si a esto se lo puede llamar de esta forma. Al subir las láminas con cierta dificultad se las ingenia haciendo una especie de chimenea, y terminándola de tal forma que no repre-senta riesgo de incendiar lo que ha construido y gracias a la chimenea se protege de las noches frías. Complacido de todo lo que ha hecho empieza empleando un azadón y una pala a preparar la tierra logrando hacerse varios surcos donde siembra papa, cebolla y otros vegetales que al crecer e ir consumiendo los multiplica. Una tarde que está pescando divisa una canoa que como lleva años sin presenciar a un ser humano teme por su tranquilidad, pero la canoa sique su ruta sin volver aparecer, a los pocos días luego de una tormenta ve en la lejanía la canoa volteada boca abajo. Él hiendo en su balsa la rescata volteándola y con un solo remo, al traerla a la isla sacándola del agua la esconde en la espesura de los árboles. Al seguir con las labores de la agricultura, la pesca y dejando momentos libres para su meditación. Una mañana como cuenta con la canoa, decide aventurarse a conocer el lago, luego que aprovechando una especie de pequeña playa vuelve la canoa a la orilla del lago. Introduce lo que considera necesario para realizar el largo paseo de varios días, una mañana muy temprano se instala en la canoa con la ayuda de sus remos arranca la aventura, navega uno, dos y tres días. Al cuarto al sentir el calor tan picante decide lanzarse, nadando ve algo que se mueve, al aproximarse a la orilla del  lago  ve alguien  que  se  está ahogando, al tenerla cerca se da cuenta que se trata de una joven. Al querer tomarla lo trata de agarrar del cuello pero antes que lo tome él la agarra del cabello y así la saca dándose cuenta que se trata de una bella indígena, al estar inconsciente sin poder respirar, suavemente la voltea boca abajo succionándole la espalda logra sacarle toda el agua que trago, acto seguido la vuelve a colocar como la encontró y dándole respiración boca a boca logra que respire, de esa forma ella al recobrar la vida abre la vista pero al verlo se asusta diciendo un solo sonido vuelve a quedar sin sentido. Él no sabe qué hacer hasta que decide acariciarla logrando a que vuelva en si- Ella (menos asus-tada) me ha salvado la vida ya que si no hubiera sido por usted me hubiera ahogado. Ella al estar acostada haciendo un esfuerzo logra sentarse dándose cuenta que no es horrible como la primera impresión en que lo vio y le va hablando con su melódica voz: de dónde has salido- Vez esa canoa que esta allá- Si claro que la veo pero donde vives- En una isla distante de aquí- No pensé que en este lago hubiera alguna isla y menos que alguien viviera en la orilla de este lago- En este lago aunque no hay muchas islas, si existen cuatro. Tu porque razón te estabas ahogando y de dónde vienes tan sola- Comenzaron las preguntas. Pintando su sonrisa retoma la palabra: al tener calor me metí al agua, al ver la claridad y sentirme segura se me dio por ir un poco más adentro, y de pronto al dar un paso más no toque el fondo y me hundí y si no es porque tú vienes no lo estuviera contando, bueno vivo en esa montaña en una pequeña finca con mi familia. Ya me tengo que ir- No quieres que te lleve a la isla donde vivo- No puedo. Sale corriendo perdiéndose de su vista, en el momento que reacciona es demasiado tarde porque al buscarla no encuentra ni la sombra y prefiere volver a nado a la canoa. Remando se le hace de noche está tornándose os- cura, decide volver a la orilla donde al sentir frio reúne varias ramas lográndose hacer un fuego y al lograr pescar asa el pescado que come logrando calmar el hambre, manteniendo el fuego logra dormirse soñando con la muchacha, se despierta debido al frio y con una angustia existencial que nunca antes había sentido. Se levanta con el propósito de quitarse lo que tiene corriendo, de esa manera logra sacárselas y ya con el sol vuelve nadando a la canoa. Navega dándole lo que le queda de arrestos, al llegar le da la vuelta a la isla sin poder desprenderse del sentimiento por la muchacha. Al volver a la orilla no puede evitar de pensarla y subida se trastorna en tristeza, que ya ni duerme. Un día decide buscar a la muchacha, vuelve a preparar sus cosas y algunos alimentos. Al estar todo en la canoa se monta y al navegar uno y dos días vuelve al lugar donde desapareció la bella muchacha. Luego que logra descansar toda la noche muy entrada la mañana camina loma adentro, en una pequeña explanación de la montaña encuentra una casa, como quiere saber si ella vive en la vivienda se esconde detrás de una roca que sobrepasa su estatura. Primero ve de la chimenea salir humo, al rato sale un hombre llevando un azadón que toma un sendero, luego al poco tiempo sale la cara de indígena vestida con un largo vestido y llevando sobre sus brazos a un niño pequeño. El decide presen-társele pero cuando está más dispuesto se arrepiente de lo que va hacer y sin que ella lo vea vuelve sus pasos por donde viniera y luego regresa a la isla. Al ver que la bella mujer tiene compañero y un hijo la olvida y todo para él vuelve a la tranquilidad.
DESATINO PARA ATINAR
Lucia al llegar de la capital de la republica al terminar de Tunja con su novio Camilo, se bajan del autobús mirándose para nada bien. Ella con la guitarra entre el estuche la coloca con rabia en el suelo y le va diciendo: estoy aburrida que siempre me estés atropellando. El sin decirle nada con rabia la mechonea y ella soltándose le vuelve hablar: hasta aquí llegue con tico no quiero nada más- Él le responde: eres una inmadura que no te sabes valer por ti misma, sin mi te vas a morir de hambre- Ella: siempre me has desvalorado te vas arrepentir. Y la intenta golpearla con un manotón pero solo logra un abaniqueo al viento ya que ella se agacha. Recoge del suelo la guitarra y se les adelanta a los que quieren recibir sus respectivos equipajes agarrando su pequeña mochila de viaje, antes que él la agarre corre alcanzando un bus del cual de un brinco se monta con la mala suerte que la guitarra se le cae sobre el piso del bus, agitada la toma viéndola los de las primeras sillas y el conductor, intenta ver si hay un puesto libre y al ver el único en las sillas de atrás camina lo necesario sentándose al lado de un muchacho de pelo largo y barba que lee un libro concentradamente, que la ve como llora diciendo: que amargura que cargas, que te sucede. Ella sique llorando y al calmarse de la misma manera le contesta: me acabo de separar del tipo que me subvaloraba, no sabes el daño que me hizo no sé cómo no termine antes- Deja el melodrama y piensa que tienes una vida por delante- Ella (más calmada) tienes razón, sabes a donde va este bus…- A Duitama- Tú tienes familia allá…- No me hables de la familia ya que nunca logre comprenderme con ellos y desde hace mucho vivo solo- Pero si tienes novia- No- Un hombre tan solo que va hacer a Duitama- No voy a Duitama me dirijo a Paipa- Que piensas hacer allá- Buscar el bar de un amigo a ver si puedo hacer un recital de poesía-Ha conque eres poeta- Solamente se escribir, claro que soy bastante tímido para leer, hasta ahora estoy tratando de llegar a los demás-Ella (sonriéndole) me caes supremamente bien además estoy segura que un poeta no puede ser mala persona, que tal si te acompaño- Me encantaría. Se dan la mano y ella la vuelve apoyar en el estuche de su guitarra- Él (devolviéndole la sonrisa) ¿desde hace cuánto que tocas la guitarra y que clase de música tocas?- Desde hace mucho pero desde hace muy poco tiempo que estoy tratando de interpretar mis propias canciones, lo mío es la balada rock y blues- Me encantaría escucharte- Ya abra tiempo para eso. Se quedan mirándose por un rato y el muy tranquilo sique con la lectura sintiendo que ella apoya la cabeza en su hombro. No se dan cuenta que el bus ha llegado a Duitama, solamente cuando se detiene y ven a los otros pasajeros- El (acariciándole el rostro) nena llegamos. Ella abre los ojos desperezándose y él al pararse le va diciendo quieres que te ayude a llevar la guitarra, Ella sale primero dándole el instrumento, él toma su pequeño morral y ella hace lo mismo, de esa manera caminan y se bajan del bus. Ingresan en la terminal- Ella: sabes dónde tomamos el bus para Duitama- Es la primera vez que vengo a Boyacá- En mi caso lo mismo pero preguntemos. Ella se adelanta unos pocos pasos y le pregunta a una señora que va con dos niñas: usted sabe por casualidad donde podemos tomar el bus que va a Paipa- La señora muy amable le contesta: siga por esa otra puerta que ahí se estacionan- Ella esperándolo le dice: es por ahí. Caminan saliendo del lugar de esa forma encuentran el bus para su destino, se montan, él amablemente le sede la ventana y se sientan ella tomándolo de la mano y él enseguida siente el calorcito- Ella: como que un tipo tan guapo no allá tenido novia- No es que no allá tenido si no la que tenia se fue con otro, no me importo ni un rábano ya que ella siempre estaba molesta y al recobrar mi libertad me sentí mejor. Qué tal si yo te acompaño con la guitarra a tu poesía, debes tener algo ahí en tu morral. Él al soltarse la mano toma la mochila y de un bolsillo saca un libro, diciéndole a ella: este es el primero libro que me atreví a publicar, lo hice con la ayuda de la casa de poesía Silva. Al tomarlo ella lee de seguido dos poemas y luego le palabrea: me encantaron los primeros poemas que leí son realmente buenísimos. Al llenarse el bus arranca por la avenida en el momento que pasa ante una fábrica de cemento ella le murmura al oído: son muy bellos, sobre todo dicen mucho ya que son muy profundos, léeme al menos unos. Al darle el libro el comienza a leer un poema, al terminarlo ella busca sus labios y suavemente se besan una y otra vez- Ella: estoy segura de lo que estoy haciendo eso me ha quitado la infelicidad con que estaba siempre, se que con tico voy a conseguir la felicidad que nunca tuve- Él la abraza de esa mismo sentido vuelven a besarse apasionadamente y solo son interrumpidos por el bus que se detiene en su destino, se bajan cargando sus cosas y el sique llevándole la fonda con la guitarra- Él saca del bolsillo de su campera un papel diciéndole a ella: mira este el mapa que me hizo mi amigo. Al salir del lugar de los autobuses siguen la trayectoria, al pasar la avenida se introducen en un pequeño restaurante donde se toman la sopa de maíz, luego un segundo con pollo, verduras y papas a la francesa- Ella paga murmurando: tranquilo mi amor que después juntamos el dinero de los dos para saber con qué contamos- Si me parece bien ya que mi dinero es el tuyo y viceversa. Al salir amorosamente se toman de la mano, viendo el papel caminan al lado de distintas construcciones de ese modo encuentran el bar Tierra de música, entran viendo el local desocupado y él ve a su amigo Carlos Alejandro que está sentado al otro lado de la barra dibujando, en el momento que lo ve se gira y sale a su encuentro dándose un gran abrazo y Carlos E. va diciendo: ella quien es…- Es mi novia- Él se ríe diciendo: este poeta empedernidamente solitario por fin encontró novia y eso cuando…- Hace como un tiempito- Ella riéndose va soltando la voz: hace como dos horas pero tranquilo que con este poeta me voy a quedar hasta el fin de los días- Entonces fue amor a primera vista- El poeta: fue simplemente porque tenía que ocurrir- Ella si fue como si un rayo de magia invisible nos marcara- El dueño del bar: esperen que traigo una botella del mejor vino ya que esto hay que celebrarlo mientras tanto acomoden en la mesa que les plazca. Al ver la mesa más próxima la toman poniendo las cosas sobre el suelo y se sientan, casi al mismo tiempo se presenta el amigo con la botella de vino y tres copas que coloca suavemente sobre la mesa- Al servir el mismo va diciendo: por este encuentro mágico y sobre todo por el de ustedes, de manera los felicitos y que por favor los atropelle la felicidad. Chocan las copas- Van tomando- El dueño: presiento que ni siquiera saben cómo se llama cada cual- La chica: sí que tontos que somos. Se ríen los tres Ella continuando para mi amor en especial y para mi nuevo amigo yo soy llanamente Lucia- El poeta: de las estrellas y con diamantes como la canción de los Beatles, pues yo soy Mauricio y nada más, y este genial amigo es Danilo. Se besan primeramente la pareja luego se saludan de beso cruzándose los amigos. En el momento que se están tomando la segunda copa los sorprende una pelinegra lo más de guapa que les dice (mirando a Danilo) este debe ser el poeta de quien me has hablado y ella supongo que la novia- Danilo: mi amor estas en lo cierto como siempre, pero por favor no te quiero ver parada, siéntate. Ella se saluda con ellos de beso y se sienta sintonizándole un beso en los labios a Danilo y este al traer otra copa le sirve el vino- Vuelve a la labia: quiero escuchar al poeta y por su supuesto a su novia tocar esa guitarra, que hay que hacerle el honor al lugar que por eso lo hemos matriculado como se llama. Ella toma la funda y extrae el instrumento semejante a un cuerpo de mujer- Poeta deseos son deseo yo te marco y vos comienzas a decir un poema. Él saca de su mochila el libro y va murmurando: este poema se llama Sol y comienza así: Ruinas doradas desde milenios/ el astro ardiendo en la dosificación/ de piedra en un mundo de espejismos/ hogar celeste de la memoria. /El sol sangrando en la entrada del poniente/ poesía en los rayos solares/ breve imagen del mundo. Todos aplauden. Va diciendo Danilo, ahora le toca lucia. Ella sosteniendo la guitarra interpreta: Las hojas del viento y al terminar con la melodía todos vuelven aplaudir- Sara: verdad mi amor que quedan contratados para esta noche- De una. Al acabar con el contenido del vino van llegando por grupos los clientes entre la pareja los van atendiendo. Al estar lleno el recinto el poeta se toma la palabra con el acompañamiento de Lucia, luego ella interpreta temas de su autoría, las distintas personalidades gritan a su favor y aplauden emotivamente. Al hacerse tarde se van retirando de a poco para quedar únicamente las dos parejas- Sara estoy rendida que trajín- Danilo bien chicos por el trabajo aquí está su paga, nosotros nos vamos cerca de Sogamoso a la finca de los padre de Sara. Me gustaría que fueran con nosotros, pero los viejos de ella son bastante complicados que prefirió que ustedes se busquen un hotel- Lucia: no se hagan problema ya que preferimos pasar la noche solos. Se despiden de beso y salen al exterior, caminan lentamente por construcciones disimiles y en un pequeño edificio ven el letrero de hotel Granada, Mauricio toca el timbre y al rato abriendo la puerta sale a su encuentro una señora que observándolos les dice: necesitan una habitación las tenemos bien confortable. La pareja se mira y Lucia va hablando: nos la puede mostrar. Al entrar suben por una escalera al segundo piso, enseguida caminan por un corredor donde la señora abre una de las puertas y entran a un cuarto con una cama doble, un sifonier y el placar de doble puerta- Mauricio: nos agrada por lo tanto no la quedamos- Vale tanto pero como veo que vienen de laborar se la dejo en esta suma. Lucia sin demora saca los billetes y separando la cantidad estipulada por la señora se la entrega. Al cerrar la puerta quedan en su intimida, se miran a los ojos besándose con un placer y amor sin límites, se sacan lo que tienen puestos quedando libremente desnudos, con el tacto van conociendo mutuamente sus cuerpos y sin decirse nada se sientan en la cama acariciarse mutuamente, sintiendo la alegría de la belleza. Se tocan de todas las formas posibles entrando en un clímax de hermosura, el con deseo le acaricia de muchas formas los senos, esto hace que ella sienta un poderoso deseo que la posea y él se mete en el cuerpo de ella sintiendo tal cosa que es imposible de describir y terminan amándose con sabiduría de piel a piel. En la mañana se despiertan y se abrazan besándose con voluntaria ternura- Ella al oído: me siento tan segura y protegía por la poesía, lo que siento no se puede describir con simples palabras. Se levanta tomando la guitarra disponiéndose tocar con sus manos agiles una improvisada melodía muy bien lograda, al darla por terminado él haciendo un movimi-ento la besa y ella sonriendo va diciendo: vamos a viajar por todos los pueblos de Boyacá que en este departamento la gente se ve bien receptiva y luego por toda América Latina. Al cerrarse el telón ustedes lectores quedan donde están leyendo con la magia de la tierra y de los astros, mientras los protagonistas de esta narración se van andar libremente en el nadaísmo.
                                    EN UN GLOBO
Lucecita al levantarse lo primero que hace es abrir la puerta dándose cuenta que hay un tiempo refulgente de sol, luego que se baña y desayuna en paz sale toma la bicicleta y atraviesa la puerta del portón, se monta en el caballito de metal pedaleando sale de Villa de Leyva por la vía viendo a grandes rasgos el paisaje como quiere llegar a Santa Sofía. Haciendo un esfuerzo doblega la cuesta y en un rellano de la carretera se baja y al ver que la cerca de púas está rota atravesándola por encima, camina a un bosque de pinos donde la luz cae perpendicularmente, se sienta asombrada por el resplandor que hay. En un momento dado sufre una trasformación en sus sentidos viendo la naturaleza diferente y más colorida, enfoca su mirada en un enano que viene hacia ella, como lo ve de un modo muy natural no se impresiona. En el momento que lo tiene a menos de un metro de distancia le va diciendo al pequeño personaje: tú de dónde has salido…- Este viéndola le murmura: vengo de un mundo que tú no te imaginas, si quieres vamos- Está bien pero como- El hombrecito (sonriéndole) camina que te muestro. Andan, ella sin creer lo que está pasando y pensando esto es realidad o es ficción imaginativa. Al tocarse el rostro y darse cuenta que es ella misma rectificando que es la realidad. Al entrar en un bosque que centella una luz extraña simplemente deja que las cosas sucedan, al otro lado ve un globo caminan y al tenerlo a la alcance de su mano el pequeño personaje abre una puertecita del canasto, le indica que entre y ella entra haciendo un esfuerzo por la estrecha puerta viéndose adentro, el enano jala una pequeña cuerda y el globo comienza a elevarse ganando altura, en menos de un sus- piro el globo esta sobre las nubes y avanza ayudado por el viento. Ella al mirar hacia abajo va viendo un panorama de pastos con las vacas, árboles y escarpadas montañas, luego el globo hace un pequeño giro desviando la dirección, de esta manera sobrevuela sobre la pequeña población de Sachica, luego sobre  Sutamarchán. Hiendo en ese sentido sobrevuela varias montañas desérticas y a los minutos vuela por encima de una montaña tupida de naturaleza que al avanzar va viendo allá abajo un páramo repleto de frailejones y varias lagunas pequeñas- Ella: es increíble este globo y más aun lo que estoy viendo, me intriga saber a dónde se dirige este globo. El enano a penas se ríe- Ella (insistente) a donde vamos a llegar…- No te preocupes ya verás lo mágico que va a suceder. Ella desiste de preguntar y llanamente decide no pensar en nada. El globo comienza a descender con dirección de uno de esos lagos, ella se asusta ya que va directamente hacia el agua pero al ver la belleza del entorno del lago y como se refleja el globo en la superficie se relaja. En un momento dado el globo se impacta con el agua, sin sufrir el menor daño se sumerge percibiendo que respiran normal, pero si sintiendo un poco de vértigo. Asombrada por lo que ve y más aún en el instante que observa las construcciones de una antigua civilización. Se despierta dándose cuenta que todo solo fue un sueño, al ver el día como en un principio lo soñó se arregla y sale en su bicicleta con el propósito de darse una larga vuelta.
EL TEMPLO DEL SOL
María acompañada de su amiga Clara y de su amigo Néstor recorre en su automóvil varios pueblos de Boyacá, hospedándose en dife-rentes  hostales  y  pensiones. Al llegar a Sogamoso Néstor abre el  mapa viendo el lugar donde queda el museo arqueológico de los muiscas, va hablando: según este mapa hay que ir en esa otra dire-cción. María al volante bordeando el caño toma por una  enchapada de ladrillo y doblando por la misma vía que bordea una loma ven sobre la alta tapia un mural concerniente a la cultura muisca. Siguiendo el mismo trayecto llegan a la entrada del museo que consiste en un enorme portón, al parquear se bajan empezando caminar, Clara al tocar con su puño en el portón en seguida les abre un celador diciendo: si vienen a visitar el museo pueden seguir. Atraviesan el portón entrando en la construcción donde al ver en la recepción a un muchacho de barba le paga cada uno el boleto de entrada, siguen viendo cada vitrina de vidrio iluminada, donde van viendo desde utensilios de barro con diseños precolombinos, pequeños objetos hechos en material carbonífero, anzuelos y otro menesteres en piedra acompañados de sus respectivas leyendas. Al salir al exterior María saca su cámara fotográfica, al divisar varias especies de viviendas circulares construidas con pilotes de madera y techos de paja, sobresaliendo por varios metros el templo de sol, María luego que toma las fotografías correspondientes va diciendo: qué lugar más increíble. En el momento que llegan ante la construcción hecha con los mismos materiales que las anteriores viviendas, al templo del sol que su altura sobrepasa las otras vivienda muiscas; le dan la vuelta viendo las diferentes representaciones hechas con madera, tierra y semillas. En el momento que se acercan a una de las puertas clausuradas, del interior se expande una luz tan fuerte que tienen que cerrar los ojos. Al abrirlos esta luz ha desaparecido por completo- Néstor de donde habrá salido esa luz increíblemente fuerte- Clara: que extraño aquí debe  haber  alguna  energía procedente de esa civilización o algún conjuro, vamos a ver que hay allá dentro. Al aproximarse descubren en el centro un palo que le da estabilidad a la cilíndrica constru-cción de paja, rodeándolo elementos de ritual como recipientes cilíndricos en barro que contienen semillas diferentes- María (dirigiendo la mirada a Néstor) tu que eres arquitecto podrás construir en la finca que herede de mis padres algo semejante- Si claro, pero para eso necesito madera, construir las paredes en adobe y paja, y por supuesto gente que me ayude- Hagámoslo que tengo el dinero para efectuar la construcción, luego se dirigen a un lugar donde está enclavada una enorme pared dibujada con un motivo circular acompañado de una pintura geométrica, de ahí van al borde de una piscina baja donde esta dibujada una rana tipo precolombino acompañada en la parte superior de la especie de piscina de tres medianas estatuas y un redondel con motivo circular. Al salir vuelven al carro acomodándose como venían y vuelven a su destino al pueblo de Villa de Leyva.
Con el pasar de los días María va a la casa cerca del parque Sucre donde vive Néstor, al tocar la puerta le abre el mismo personaje diciéndole: Su merced siga. Al entrar pasando por el taller y por un costado de la habitación sique al patio sentándose sobre un cómodo asiento de lona y madera y al hacer él lo mismo ocupando otra silla de las mismas- Ella le va murmurando: definitivamente quiero que me hagas el plano y que tú mismo te encargues de la construcción de nuestro templo del sol- El (sonriéndole) el plano ya está listo, Se para y al tomar un papel enrollado, en la presencia de ella lo desenrolla mostrándoselo- Ella (viéndolo) es exactamente igual cuando comenzamos…- Mañana  mismo  a la primera hora- Enton-ces me voy y vengo mañana a las siete de la mañana. Él la acompaña hasta la puerta y al ver que se monta en el auto y luego que le da arranque desaparece.
A la mañana siguiente a la hora acordada regresa María con su amiga Clara, al tocar en la puerta una y otra vez sale Néstor llevando sobre su cabeza un gorro de lana, al meterse de copiloto y Clara atrás, van cerca del cementerio a un aserradero del sector, se bajan con la suerte de encontrar al dueño que habla con un cliente, al verlo que se despide con el sujeto se le acercan y como es conocido de Néstor este lo saluda con un apretón de manos y luego le palabrea lo siguiente: le presento a mis dos amigas Clara y María. Como sorprendido entrelazan las manos con cada una de ellas- Este les va diciendo: veo que quieren algo de mí- Néstor: necesitamos que nos consiga ocho palos bien rectos ojala de eucalipto de cuatro metros y medio, uno más grueso de cinco y medio- Para mañana mismo se los tengo- Sabe dónde podemos conseguir guadua- Eso si no- Ya se me ocurrió algo, entonces mañana volvemos. Se despiden de la misma manera que en un principio se saludaran, toman el auto y conduciendo María les va diciendo: los invito almorzar a donde Custodia que es una cocinera nativa que cocina como los dioses. Ella dirige el automotor dejándolo cerca de la iglesia del Carmen, se bajan viendo el carro de Fernando el pintor y luego al seguir al parque doblan por la calle empedrada, al entran van al fondo viendo el patio central, se saludan como corresponde del artesano, de la fotógrafa y en el taller ven sentado a Fernando que habla con una chica de pelo negro algo alborotado. Al entrar al lugar de donde cuelgan varios dibujos de campesinos hechos en carboncillos por el mismo pintor- Néstor interrumpiéndolos: tú que eres más conocido que  una  papaya debes saber de alguien que tenga guaduas para la venta- Primero la papaya me la como al desayuno y segundo tengo un amigo que si del cine se trata es historiador, él vive entre el Quindío y a veces aquí en Villa, ya mismo lo llamo- Sí que bueno ya que allá es la mata y las deben cortar el primer día de menguante como corresponde así duran muchísimo tiempo- Mónica: usted porque no me saluda acaso soy una pintura de Fernando, es bro-meando yo soy Mónica- Néstor ( tomándose la cabeza y girando para quedar de frente a ella) que pena pero esta construcción del templo del sol me tiene en el aire- Fernando: si no planea bien como uno de mis aviones de papel le tendré que presentar a Pedro el piloto- Mónica: es mejor que aterrice. María riéndose va diciendo: es mejor que no porque quiero que le vuele la imagi-nación para que me haga una copia exacta del templo del sol. Mónica: que bueno sería ya que podríamos realizar rituales- Fernando (tocándose la cabeza) ahora si van a quedar todos ustedes zurumbáticos- Clara: tengo hambre- Fernando: esperen que le marque a mi amigo Lucho. Toma de la mesa hecha con cubos el apara tejo, de una le marca y del otro lado le contesta el amigo diciéndole: con guíen hablo…- Con Fernando- Que bueno pinta pinta a que se debe el milagro- Es aquí estoy con una amiga llamada María la cual quiere hablar con usted del asunto de una guadua, hable con ella- María (tomando el ridicular) hablo con Lucho yo a usted lo conozco ya que un amigo suyo llamado Oscar nos presentó la otra noche estando en la plaza- No me acuerdo pero que necesita de mi…- Necesito guaduas- cuantas…- Espere un momento que inmediatamente le confirmo. Al voltear el rostro en dirección del arquitecto le va diciendo: cuantas guaduas vamos a necesitar- Según los cálculos que hecho son noventa- Ella por el aparato: noventa pero necesito noventaicinco, como hacemos…- Poniéndoselas allá en Leyva le sale cada una a tanto- Esta tarde le mando el dinero de las noventa y cinco guaduas- Apenas me llegue el dinero le mando en un camión en el cual suelo hacer mis trasteos las guaduas a la dirección que usted me escriba por internet- Gracias- Néstor: por lo visto ya tenemos las guaduas. Se sientan almorzar todos espaguetis con trucha las cuales acompañan con ensalada- Fernando: (hablándole a María) como se les ocurrió esa idea loca de construir un templo muisca- María: desde el día que lo vimos en el museo arqueológico de Sogamoso- Ya se. Al acabar con el contenido del plato cada uno se va hacer sus cosas.
Al otro día hablan con el señor dueño de un camión que les traslada del aserradero a la finca de María la madera poniéndola parada y sostenida por un enorme pino; en el momento que llega del Quindío el camión con la guadua la apoyan parada contra el mismo pino. Un día miércoles cuatro obreros dirigidos por Néstor comienzan ya que antemano han traído arena, piedra y cemento la construcción, comienzan enmarcando un gran circulo con estacas y piola, después marcan la distancia donde serán los ocho huecos, los cuales los abren dándole  la misma profundidad a todos. Mientras dos hacen la mezcla con los tres elemento, los otros dos paran con la ayuda de una plomada los palos que al ponerle la mezcla quedan bien parados. Al otro día midiendo la exacta distancia de los palos al centro con una pala uno de los cuatro abre un hueco de medio metro enterrando el palo que lo cuadran con la ayuda de misma plomada, luego al hacer otro poco de mezcla agregándosela lo dejan como debe ser, luego rajan con machete a lo largo las guaduas en esta tarea duran tres días. Al quinto día colocan los largueros de guadua rajada alrededor, clavándolos con puntillas de tres centímetros a los ocho postes de eucalipto, en el momento que terminan un lado empiezan  con  la  cara  interna terminando la labor antes que oscurezca. Al día siguiente hacen con guaduas y otros palos la estructura de lo que va hacer el techo y al tener lista toda la estructura del templo sagrado cavan un hoyo del cual extraen el barro y al pasar el medio día ya que han almorzado empiezan arrellenar la separación de las guaduas con el mismo barro quedando todo cerrado, en ese momento se presenta las dos amigas ante el arquitecto, María diciendo: que bueno todo lo que han realizado hasta el momento les está quedando maravillosamente, si estos ojos no lo estuviera viendo no lo creería- El arquitecto: ahora tienen que conseguir el alambre de gallinero, más arena y cemento. Ya mismo voy a una ferretería a comprar todo eso. A la hora se presenta una camioneta donde en la parte de atrás traen lo que Néstor les dijo y entre todos descargan el alambre de gallinero, el cemento y los bultos de arena y con la presencia de ellas cierran sosteniendo clavando puntillas el enmallado de los dos lados muy templado, al dar por terminado ese trabajo cada uno se va a sus respectiva casa.
Vuelve el arquitecto y sus empleados obreros, y en todo un día empañetan completamente el lado interno y el externo dándole un toque de elegancia al templo, al estar completamente seco el cemento lo pintan de amarillo mate dándole una apariencia incre-ible. El último día de trabajo se encargan de poner un aislante sobre el techo y luego en las horas de la tarde le instalan la paja dando por terminado el nuevo templo del sol.
La noche de la inauguración con una ceremonia con un taita venido del Putumayo de nombre Chacín Vuelcuta, al entrar los partici-pantes lo hacen de último Clara, María y Néstor. Se sientan alrede-dor del madero central, de este descuelga el taita su larga túnica y el collar de plumas colocándose con la miradas de los presentes, luego toma un sonajero haciéndolo sonar a un ritmo pausado, mientras el aprendiz reparte de una olla de barro y sirviéndolo en un pequeño totumo, de esa forma lo reparte entre los presentes. Al agudizarse lo que van sintiendo les vuelve a repartir de la misma manera el  bebedizo sintiendo que se desdoblan hacia el infinito. En la mañana al terminar con la ceremonia el arquitecto entre los asistentes trata de ver a su amiga María, al no verla pone un grito en el cielo diciendo: que se hizo María- Clara sí estuvo todo el tiempo con migo como pudo desaparecer así no más. Se para y al salir ve el carro, la busca en la casa colonial sin éxito y regresa al templo diciendo: es como si se hubiera esfumado no está en ningún lugar donde la he buscado- Mónica: aquí ha pasado algo supremamente extraño. El chamán la trata de interceptar por medio de conjuros sin lograr absolutamente nada.   
PERSIGUIENDOLO LA MALA SUERTE
Un hijo adoptivo de este pueblo, al haberse ido durante varios años por ciertas circunstancias a Sueci, regresa con el objetivo de buscar a su familia. Al llegar a Raquira en un bus procedente de Villa de Leyva, lo primero que hace es dirigirse por un estrecho sendero caminando loma arriba, ve todo tan igual como si el tiempo no hubiera trascurrido. De detiene a descansar sentándose sobre una roca desde donde divisa una bella panorámica del pueblo. Al haber recuperado la energía sique por la pendiente viendo en la distancia una casa de donde sale un intenso humo, luego pasa cerca de otra vivienda donde con un torno de pie esta un hombre dándole forma a una vasija de barro,  sique  dejando  atrás las viviendas de los cera- mistas  y al tomar otro camino va dejando atrás las antiguas casas derruidas y va pisando antiguos pedazos de barro. Al entrar en el territorio perteneciente a sus padres ve en la distancia la vieja casa, al acercarse y tenerla prácticamente en sus narices ve la casa deruida con las pequeñas ventanas y las dos puertas abiertas, al entrar no encuentra absolutamente nada estando completamente vacía.  Le da vueltas pensando que habrá ocurrido con mis padres y mi hermana. Se sienta en una enorme piedra a meditar lo que tiene que hacer, al decidirse se devuelve por el mismo camino por el cual viniera, al llegar a otra casa toca en la puerta y abriendo la puerta va a su encuentro una señora que le va soltado las siguientes palabras: Si es Jaime el hijo de doña Vetulia, acaso tu no estabas en yo no sé qué lugar del extranjero- Si estaba en Estocolmo trabajando pero ya regrese- La señora tocándolo va diciendo: si de aquí desapareciste sin dejar rastro y hasta hora te vienes a presentar, no es el colmo- Si me fui con una mujer de la cual me enamore de nacionalidad sueca pero ahora he vuelto, que ha pasado con mis padres…- Tu papá a los pocos días de haberte ido murió de un infarto, como al año tu mamá de la tristeza agonizo y como tu hermana quedo sola yo no sé a qué pueblo se fue. Como la puedo encontrar- Sabrá dios porque estoy segura que en el pueblo nadie sabe. Al despedirse se devuelve loma abajo y fatigado llega al pueblo, entrando en una tienda le pide al señor una gaseosa y se sienta a meditar sobre su situación, estando en esos pensamientos lo sorprende un suave golpe en la espalda, al voltearse se da cuenta que es su amigo de toda la vida Osvaldo, de un solo impulso se levanta estrechándose los dos en un cálido abrazo- El amigo le murmura: como así que por aquí otra vez- Si vine a pasar una pequeña temporada, lo malo es que me heenterado que  mis padres han muerto y no sé dónde está mi hermana Carmelina tú de pronto sabes algo de ella- Desde que desapareciste como si te hubiera tragado la tierra, nunca volví a esa casa. Como aquí los chismes andan por todo el pueblo, por lo que escuche parece que se fue con un fulano- A donde…Si lo supiera ya te lo hubiera dicho- Con guíen crees que lo pueda averiguar- No sabría decirte pero si tienes suerte con algún conocido- Por lo menos este encuentro merece que nos tomemos algo como en los viejos tiempos, yo invito a una botella de guaro. Al pedirla al mismo señor que le diera la gaseosa, este en un Santi amen se las trae, empiezan a tomársela recordando viejos tiempos- Osvaldo: que ha sido de tu vida durante todo este tiempo…- Ya creo que cuando te fuiste ya aviamos terminado el bachillerato, al año me enamore de una bella mujer con la cual tenemos dos hijas- Con la cara de mujer que te mandas no creo que hubiera sido niños. Al ofendérsele el amigo se levanta y lo impacta con un puño, él reaccionando se levanta y le pone un puño en el mentón que lo hace ir hacia atrás cayendo sobre un bulto de papas. Osvaldo arrepentido le da la mano y lo sienta diciéndole: amigo solo fue una broma perdón que te hubiera metido la mano- Si tienes razón pero perdóname tú a mí porque yo fui el que empecé. Se levantan como si no hubiera pasado nada y se abrazan, luego se vuelven a sentar y al acabar con el contenido de la botella el mismo Osvaldo pide otra que se la toman hablando sobre aspectos de sus vidas y luego otra que no pueden acabar ya que están demasiado borrachos, salen tambaleándose el amigo se va a su casa y él queda tirado dormido sobre un andén.                          
En la mañana se despierta con un dolor de cabeza inaguantable, haciendo un esfuerzo se para sentándose sobre el borde de la acera y  reacciona  recordando que dejo en el bus su valija, esto hace que corriendo vaya a la empresa de buses, por suerte ve su maleta a un lado de la taquilla y al tomarla pierde el equilibrio cayéndole a una señora encima- Esta reacciona levantándose y de una con toda la fuerza le va dando varias veces con la cartera, dejándolo en el suelo y ella se va como si nada. Un señor levantándolo va diciendo: que señora tan brava así debe tratar al pobre de su marido. Alzando la maleta la toma y como siente que se va a volver a caer, entra en el primer restaurante que poniendo la maleta sobre el suelo se sienta, al rato viene una señora con un delantal puesto y le va diciendo: le traigo un desayuno: si claro que sea abundante. Le trae un desayuno estilo boyacense, caldo abundante con costilla y papas, al tomárselo rápidamente se siente mejor, luego le trae huevos con arroz y tajadas de plátano y más tarde un chocolate con pan. Que todo lo que se comió lo deja sin poder levantarse, solo se levanta a la hora cuando entra un grupo de turistas que ocupan todo el restaurante- La señora: lleva más de una hora sentado haga la de bondad su merced de pararse, el resignado se levanta sintiéndose mejor y al sacar su billetera le paga a la señora y tomando la pesada maleta sale a buscar un hotel, al caminar dos cuadras lo encuentra y como no tiene objeción de pagarle al dueño lo que le pide, al recibir las llaves sube haciendo un gran esfuerzo la escalera, pone la maleta en el suelo y de una abre la puerta, acto seguido entra la maleta y al cerrar la puerta prácticamente se tira sobre la cama como si fuera una piscina que al no resistir la caída sumado a su peso las tablas partiéndose seden y sin importarle nada se queda dormido con zapatos y todo hasta la siguiente mañana, al despertarse se da cuenta lo que ha pasado, al no preocuparle duerme un par de horas más y por fin se despierta haciendo lo de todo el mundo cagar, enseguida  se  quita los zapatos y la ropa, desnudo se baña dándose cuenta que por un hueco lo mira una joven, él como si nada se sique dejando que el agua le caiga y al salir de la ducha, después de secarse con la toalla abre la valija sacando ropa limpia se la pone. Piensa que tiene demasiada ropa y que esos regalos para que los sique cargando, al abrir la ventana que da sobre la calle al haber separado lo que no quiere desechar, va tirando todo de una vez cayéndole encima a un viejito que va pasando, que al darse cuenta se tiende de rodillas implorándole al cielo y va diciéndose a sí mismo: gracias dios por estos regalos. El resto de la ropa lo coloca entre una bolsa plástica y para que no lo pillen por lo que le ocurrió a la cama sale precavido y algo nervioso, al resbalarse va rodando escaleras abajo cayendo a los pies del señor dueño del lugar que al verlo delante de sus pies le va diciendo: que paso anoche que escuche como si algo se hubiera caído y ahora como se pudo caer rodando escaleras abajo sobre mis pies, por un poco más me lleva por delante. Él se levanta quejándose del dolor y al tenerlo de frente se levanta recogiendo la bolsa- El señor: que raro acaso en vez de esa bolsa no llevaba una maleta- Si claro, he desistido dejarle las prendas y las cosas en el cuarto, bueno me tengo que ir- No se puede ir sin que revise que paso en el cuarto. Él lo esquiva saliendo corriendo, de una toma la calle y se mete en la misma tienda de la borrachera, al verlo el mismo señor le va murmurando con su voz: que borrachera la de ayer si me va a pedir algún licor no se lo vendo- No quiero una gaseosa- De cual… la que tenga más fría- El saca una Coca cola y se la toma mirando hacia afuera, al pagarle sale viendo la calle y empieza casa por casa a preguntar por su hermana pero siempre la respuesta es la misma que se ha ido del pueblo con un fulano. Desistiendo sale por la calle de las tiendas de artesanías  y  al pasar  un bus poniéndole la mano lo hace detenerse, se sube al lado de una muchacha que le hace ojitos diciéndole: de dónde eres…- Del mismo Raquira- Pensé que eras de Bogotá- No me nombres esa ciudad que en un taxi el malparado se quedó con un maletín donde guardaba los papeles. Se quedan callados y el disimuladamente le toca las piernas y ella le responde con una cachetada, sin creer lo que le sucede se sienta en la silla de atrás a la de ella. Al llegar el vehículo a Sachica se detiene y el no duda en bajarse, caminando a lo lejos reconoce a su hermana, corre dándole alcance y en el momento que la toma del brazo, ella al verlo pierde el conocimiento yéndose al suelo. En el momento que se acacha con el objeto de ver que le paso recibe del marido una patada en toda la cabeza cayendo y al estrecharse contra el pavimento queda completamente inconsciente, al volver en sí no encuentra ni el recuerdo de su hermana que prefiere irse a Bogotá y tomar el vuelo de regreso a Estocolmo.  
UNA BELLA CAMINANTE
Liza que es de nacionalidad francesa, desde los cuatro años que lleva viajando a dedo por toda América no le ha sucedido nada negativo si no al contrario la ha pasado de maravilla. Al bajarse de un camión por la vía que conduce a Pesca viendo que el automotor toma otra vía, ella primeramente se saca el sombrero de gamuza que desdobla y se lo pone,  camina llevando sobre su espalda la mochila y con una de sus manos un estuche de un instrumento pequeño, despreocupadamente ve el panorama que la rodea, con ese sentido de la realidad llega al pueblo siendo dieciséis de diciembre en plena celebración decembrina. Al entrar ya caído el sol por una calle principal iluminada de luces de colores, viendo una comparsa que recorre en sentido contrario la calle, en el momento que pasa algui- en le tira harina dejándola completamente blanca eso la entusiasma y al detenerse saca del estuche su violín ejecutando en compañía de su voz bellos temas de la región de Bretaña de donde ella es, al verla caminar los que están en la acera viendo la comparsa la aplauden, al llegar a la plaza principal deja de tocar y de cantar, al sacarse el sombrero vuelve a su instrumento interpretando la misma música que acompaña con su linda voz, de cuando en cuando todos los que la ven le van poniendo monedas y billetes, y cuando menos piensa tiene toda una concurrencia alrededor. No para de cantar y al contrario toca otros temas hasta el momento que sus manos no dan más. Se acacha con el fin de recaudar lo que le han puesto en el gorro, luego de contar el dinero se pone el gorro saliendo satisfecha por la pendiente, al pasar una calle de casas coloniales ve una tienda donde entra sentándose sobre un pequeño banquito ocupando la única mesita, al llegar ante ella la señora con su asentó francés le dice: tiene alguna clase de cerveza- Si tengo águila, Club Colombia, y Póquer. Cual quiere- Deme una Club pero por favor bien helada- Solo tengo al clima- No importa deme una. Al darle la botella la señora comienza a beberla, prende un cigarrillo llenado el pequeño espacio de humo va fumando al acabar con las dos cosas se levanta hiendo a donde está la señora detrás de un pequeño mostrador con su asentó marcado de francesa le va palabreando: cuanto le debo- Simples dos mil pesos ella del canguro que le abre el cierre ve el billete y se lo entrega- Ella al volverle hablar: sabe dónde abra un lugar donde pueda al menos pasar la noche- Una hermana tiene en su casa un cuarto desocupado con una buena cama y un buen closet- Como hago para llegar a esa casa- Espera que llamo a una hija. La señora desaparece y al rato vuelve en compañía de su hija- Esta última: vamos que la llevo donde mi tía Clementina. Al salir toman loma arriba, al llegar a la última cuadra doblan y por un camino llegan en frente de la vivienda, la chica golpeando va gritando: tía Clementina. La señora enseguida abre la puerta diciendo: creatura de dios de donde sacaste a esta mujer y como viene la pobre- La francesa: yo soy Marion- Que bueno que mi sobrina me la allá traído, por lo que veo necesita urgentemente un baño que gente tan desocupada tirarle haría a una mujer tan bella, ni pena les da- Solo se estaban divirtiendo me cayó el hecho de tirarme harina en gracia- Que mujer más divertida. No le quito más tiempo váyase tranquila a bañar, que luego me interpreta con el instrumento que lleva en esa funda al menos algo-  Me voy a bañar y luego le toco mi violín- Que es eso…- El instrumento. Al abrir la mochila saca un pantalón, una camisola de algodón y se mete en el baño al sentir el agua fría se arrepiente y simplemente se pone su pantalón rosado acampanado y el suéter de algodón fucsia y saca de una bolsa un perfume que al aplicárselo deja todo impregnado con sabor a jazmín, al salir se encuentra a la señora con una niña con la cual juega a las escondidas, no se sabe cuál se  sorprende más o si la señora que juega a la escondidas o la que luce una pinta semejante a las que se usan en los circos, de todas maneras se ríen las dos y la niña haciéndoles la segunda. Marion saca de la funda el violín poniéndose a tocar bellas melodías que la señora y la niña entretenidas escucha hasta que las domina el sueño.
Siendo diecisiete de diciembre, reflejada la mañana por el sol se despierta, al salir de la habitación ya tiene el desayuno sobre la mesa cérvido, desayuna en compañía de la niña y la señora. Luego de bañarse sale a la calle encontrándola deshabitada, como de ante-mano le han contado sobre la existencia de la cascada, al pregunta tarle al único señor este le indica diciéndole: Al salir del pueblo vera un camino este la llevara a la cascada de las Moyas. Ella al despedirse hace exactamente lo que le indicara el señor, estando sobre el sendero camina en medio del campo viendo el resplandor del sol que cubre el contorno natural, al atravesar un enorme potrero donde las vacas pastan y al meterse entre un grupo de sauces loma arriba escucha el sonido de la vertiente. De esa manera encuentra la cascada que viene de la montaña cayendo sobre inmensas piedras, al sentir el calor sobre su cuerpo no duda en desvestirse y como vino al mundo se mete entre la caída de agua que le va haciendo deliciosos masajes. En esas se le va la mañana, al salir del agua se vuelve a vestir y regresa al pueblo. Al llegar primeramente visita la capilla deleitándose con el arte gótico; luego va a la la catedral de la señora del Rosario donde aprecia los vitrales, los diferente altares. Al tener sed va a la tienda de la hermana de la señora y pide la misma cerveza de la vez pasada que la disfruta tomándola lentamente y acompañándola de un cigarrillo, luego que le da el dinero correspondiente a la señora sale entusiasmada, de la tienda sube a la parte alta del pueblo donde encuentra el mirador, desde la baranda aprecia una amplia vista del pueblo. Al devolverse y volver a la catedral se sienta en el atrio de la iglesia donde la intercepta un muchacho diciéndole: usted por lo que veo no es de estas tierras- Eso depende de cómo lo tome, yo no me siento de un lugar determinado, claro que por estar en este pueblo soy de Pesca- Eso es correr con ventajas, pero realmente de dónde eres…- Si le importa tanto soy de una región llamada Bretaña pero mi origen es celta- Que hace aquí…- Lo mismo que usted ya que estoy sentada hablando con usted. Al sentirse fastidiada decide pararse dejando al muchacho solo, camina volviendo a la casa de la montaña, al llegar toca suavemente la puerta recoge sus cosas, se despide de la señora y de su hija y vuelve a la ruta donde la recoge un camión que la llevara a su próximo destino.
LA VISIÓN CENTRIFUGA DE  LAS COSAS
Con mi visión de escritor que al poder ver otros lugares y otras zonas del espíritu que otros no pueden ver, por su ignorancia y por falta de brújula alquímica. Al tener al alcance el camino del nadaísmo que con fervor me hizo ganar la tardecita, al estar recostado sobre el mundo donde veo surgir imágenes cinefilias que se proyectan en la vida, por eso esto aquí contándoles algo que nunca podrá concluir ya que una imagen se trasforma en otra diferente y que al ser discursiva se convierte en eso que moralmente cagamos.
PARA PONERSE A PENSAR
El correspondiente minimizor descubre que la ciencia como tal inadvertidamente confirma, la tesis de los tratados chinos más antiguos. Según la cual la forma del universo corresponde a la construcción miing-tang humilde construcción de adobe y paja.
CAUSA SIN EFECTO
Conocer en La nube a una joven idealista, generosa y valiente que se atreve a mudar un sueño a otro, siempre resulta al volar y ganarse todo el mundo de la imaginación que no la delata pero que si la divierte más que un beso pegado a la pared.
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                                              INDICE                      
C.No1,pag, 1--------------------------------El coronel Antonio Arrendo
C,No 2,pag. 2-----------------------------------Viaje a la laguna Negra
C.No.3,pag 5---------------------------------------------La desesperación
C.No.4,pag.7-----------------------------------------La ruana embrujada
C.No.5,pag.9------------------------------------------------------El espía
C.No.6,pag.11--------------------En una de las islas del lago del Tota
C.No.7,pag.14--------------------------------------Desatinar para atinar
C.No.8,pag.21------------------------------------------------En un globo
C.No.9,pag.22---------------------------------------En el templo del sol
C.No.10,pag.29--------------------------Persiguiéndolo la mala suerte
C.No.11,pag.34------------------------------------Una bella caminante
C.No.12,pag.38----------------------La visión centrifuga de las cosas
C.No.13--------------------------------------------Para ponerse a pensar
C.No14----------------------------------------------------Causa sin efecto.

                                                                                         
COMENTARIO
Esta antología de cuentos boyacenses está escrita en el mismo lugar de los hechos, aquí se destaca todo lo concerniente a nuestra cultura como tal, favoreciendo los aspectos vivenciales de los personajes, que en muchos de los cuentos son reales.
Este escritor nació en Cartagena de Indias, viajero infatigable desde su juventud. Pedro José Martínez es autor de una obra literaria profundamente original, reveladora de una inagotable capacidad de fabulación. Sus notas de viaje, su poesía, su narrativa han respondido siempre al afán de experimentación, una de cuyas manifestaciones siempre predominante es la creación artística, inmersa en un entorno mágico inscribiéndose siempre en los sueños ya que de ahí nace todo.                   Carlos Mahecha.
OBRAS DEL AUTOR
Cuentos argentinos, cuentos bolivianos, cuentos ecuatorianos, Cuentos e historias de Salento, Salentoscopio, cuentos e historias del eje cafetero, cuentos colombianos, cuentos latinoamericanos, cuentos de ciencia ficción, cuentos fantásticos, cuentos infantiles. Poesía tiene lo siguiente: Paralelos, los caminos del sur, otredades, movimiento en el camino, la canción de la vida, una forma de mirar, como crece el abismo, proverbios y cantares, el canto dela naturaleza. Ensayos: libro de ensayos, La conciencia y los hombres de la tierra.
  
                   
 CUENTOS DE BOYACÁ 2 PARTE
TODO POR EL POZO LA VIEJA
Angelita abre los ojos viendo a su amor Gonzalo dormido al lado de ella sobre la cama, se despabila emitiendo una larga sonrisa, para no despertarlo se levanta sin hacer ruido dirigiéndose y abriendo la puerta a la pequeña cocina, decide abrir la ventana lográndola penetra la luz matutina, va a la cocineta donde rápidamente se prepara un café. Al estar listo lo sirve en un pocillo y al sostenerlo se sienta al lado de la mesa de rombos que ella misma pintara, enciende un cigarrillo de esa forma lo acompaña disfrutando lentamente y va recordando el sueño que tuvo cuando estaba sumergida durmiendo, se ve en imágenes en un bosque paradisiaco acompañada de diversos animales. Al acabar con el resto del café dispone la colilla en el cenicero y resuelta se para con el propósito de plasmar la última imagen del sueño en acuarela, atraviesa la puerta tomando el corredor que la deposita en su pequeño taller. Lo primero que hace es abrir los dos ventanales, luego aprovechando la claridad pone sobre la mesa de dibujo una especie de papiro y con acuarela va plasmado concentradamente y ágilmente la imagen primordial del sueño, estando en esas siente a Gonzalo que se levanta y seguidamente escucha cerrar la puerta del baño, al rato siente un tremendo pedo que esto si logra sacarla al mundo de la realidad, se levanta gritando: acaso eso es el nadaísmo- Gonzalo desde el interior del baño a todo pulmón: es que nadaísta es esto que estoy cagando, no ve que cuando suelte este maldito inodoro simplemente desaparecerá- Angelita contestándole: si así es todo que se le puede hacer. Al rato ella vuelve al taller a ocuparse en su labor, al rato sale el poeta del nadaísmo caminando como un fauno muy lentamente y en instantes la sorprende aplicándole un beso en los mismos labios y ella como es de suponer con la misma sonrisa nadaísta le responde el mismo beso- Luego él va diciendo: que formidable acuarela tu definitivamente eres el paraíso en cuerpo y gloria del espíritu santo del nadaísmo. Qué tal si vamos a un lugar profundo y soñado que Juan Matamoros me hablado con insistencia que es el nadaísmo mismo personificado en un lugar- Ella (sin dejar de manipular el pincel sobre el papel) De qué lugar se trata…- Él: por lo que me asombro quiere ver es nada menos que el pozo la vieja- De que vieja se trata…, acaso donde vive una bruja- No si, nadaísmo. Es un río donde se quiere trasparentar ese bello cuerpo de diosa que posees. Que se manifieste no jodamos más y vámonos. Sin importarles un bledo la realidad se despojan de sus escasas ropas para quedar estampados en un verso nadaísta, tal cuales y pascuales. Ella toma su mochila de ese mismo modo bajan las gradas de madera y salen a la intemperie protegidos por la borrabilidad del nadaísmo, en la calle empedrada disponen de su andar y al pasar delante de un par de abuelas que al verlos una le dice a la otra: mira eso que está pasando ante nosotras, es que será que todavía existen los ángeles- La amiga: de que existen no lo dudes y por lo menos tienen cubanito de jovenzuelos. Con ese mismo esplendor del amor caminan sin que nadie se atreva a decir nada, incluso al pasar a un costado de la estación de policía uno de los uniformados al verlos pierde la gravedad de la realidad quedando como una hormiga del paraíso nadaísta, o sea más allá de los sueños disolviéndose en la acuarela paradisiaca que pintara Angelita; siguen los pasos campantemente y al pasar a un lado del cementerio sale de la propia puerta una vaca tan libre como ellos ya que esta ya al otro lado de los muertos, siguen la marcha lenta y audaz perseguidos por el animal femenino de cuernos y de cuatro estómagos loma arriba; al salir de su vivienda de adobe  un campe-con su ruana y su sombrero no puede creer lo que está viendo, como lo imaginable puede más que la realidad, sin demora llama a su mujer y a sus dos hijos que no ven lo que él viera- pronuncia la señora: si es Rosita la cuadrúpeda de Miquel el vecino y ellos seguramente les robaron la ropa que podemos hacer dejemos eso como esta y punto. Ya en el alto se detienen viendo la vaca que hace lo mismo, se sientan al lado de un arbusto protegidos por los rayos solares viendo la vista mañanera del pueblo y de cuando en vez dirigiéndole la mirada a la vaca que come tan tranquila el pajal ya que este territorio es supremamente seco y arrido- Angelita (posando la mano en el cabello largo de su nadaísta) Que extraña esta vaca, como así que salió del barrio de los muertos y de una a seguirnos- Gonzalo (luego que la besa) si le escribo un poema de pronto se aburre y el nadaísmo va a parar algún cesto de basura, si lo que hay que hacer es tirarlo como hace Fernando el pinta, pinta en un avión al memos le caerá a un niño- Angelita: está vaca sí que te va a enloquecer con ese poema, de cual Fernando me hablas del que pinta gordas o del de otra parte- No mi amor Fernando ese que de tanto pintar a Villa de Leyva- A sí ya comprendo el que sin quererse pintar un día de estos, en que salga el arcoíris va surgir caminando en una de sus perspectivas Villa Leyvunas- Gonzalo (luego que le besa uno de los senos Angelita) si nos quedamos aquí seguramente nos vamos a marchitar o si nos va a tragar este polvo soplador- Angelita: sin ese pozo refrescante no me puede tragar nadita nada, sigamos. Al avanzar perseguidos por la majestad del sonambulismo hindú, descendiendo por el camino de tierra se les cruza un monje en alpargatas que al verlos se da la bendición y va promulgando: estos desertores del infierno- Angelita (gritándole) no somos desertores de ningún infierno, somos entrados y concentrados en el nadaísmo, por  favor  si usted es santo nosotros somos
seres de la poesía porque después que nos inscribimos en el amor y en la libertad suprema de las palabras hacemos simplemente lo que usted no se permite que es nadaísmo, nadaísmo y nadaísmo. No acabado de girar sus cabezas y el cura ya está corriendo. Angelita saca como una bala rodante la cámara y toma una fotografía de espaldas el cura corriendo. Al aproximarse a su objetivo sienten el frescor procedente de los árboles, luego el murmullo del río y al tomar un pequeño sendero ven el río bordeado de extrañas y bellas piedras que sobrepasa sus tamaños, en la distancia observan arboles con espesas barbas que están como dispuestos en una grama de un encendido verde- Angelita soltando la lengua: este es el lugar elegido por nosotros los consortes del nadaísmo, poeta a correr que quiero matricularlo en mis ideas o si no lo muerdo. Al verlo correr ella saca la cámara lo persigue tomándole imagen por imágenes en que descubre las poses naufragadas del nadaísmo, lo paraliza en la imagen saltando, tirándose de las piedras aparentando volar; en un momento dado Gonzalo le arrebata la fabulosa obteniendo cada imagen de su belleza, siendo este preludio de tiempo él que la persigue a ella y logra desplazarla en el tiempo en variadas posiciones, ya cansada se lanza con todas las ganas sobre la espesura del pastizal y cerrando los ojos logra sentirse flotar en el habitante espejismo de colores internos, el poeta suavemente la acaricia besándola en la frescura de su cuerpo hasta que ella consentida se queda en la inmensidad del sueño, el nadaísta se retira a recolectar de las diferentes plantas sus coloridas flores que logra juntar y sin que ella lo perciba la rodea de esa gama florística, con la cual le toma varias fotografías y de último en el momento que siente  su  cuerpo  repleto de esas bellas flores abre la visión de sus ojos color firmamento y levantándola suavemente la alza para dejarla en la extensión del pozo de agua y lanzarse a jugar entremezclados en esa agua fría que en la incostumbre y en la sumatoria solar se vuelve calidad de amor, en el amor y por el amor al nadaísmo.
TRES EXTRAÑOS PERSONAJES
En un  amanecer arriban tres personajes ala pequeña población de Cucaita, aparecen como surgidos de la espesa niebla ya que el panorama esta vestido completamente de gris. Estos personajes con peculiares ropas: el  primero que lleva un sobre todo abierto donde se aprecia un delantal algo manchado de pintura y sobre su cabeza luce una boina y sobre sus ojos unas gafas predominantemente sicodélicas; el segundo de pantalones campanudos con cabello supremamente largo, que posee unas gafas redodas y el tercero con un chaleco de los indígenas siux de Norteamérica con una barba espesa y un cabello largo que le lleva más allá de la espalda. Agilizan sus pies por la angosta vía pero cuando los ve algunos de los pobladores campesinos que por lo general llevan puesto largas ruanas y sombreros, estos se esconden ya que los asustan estos tres personajes. En el momento que llegan a la pequeña plaza donde está ubicada la pequeña iglesia colonial, una de las campesinas llega donde están ellos y le va invocando con sus palabras: ustedes no serán los tres reyes magos, claro que por lo que veo falta el negro- El pintor le contesta: no somos magos- Entonces debido a que son tan extraños, no ve que este pueblo vive de las tradiciones y las personas como ustedes aquí no pegan, a que vienen...- El barbado le contesta: venimos a buscar a una amiga que se llama Dorotea, por casualidad la conoce usted señora- La campesina pensativa va mur- murando: yo conozco a todos los habitantes de Cucaita y solo existen aquí dos mujeres con ese nombre, son relativamente jóvenes una vive a dos cuadras hiendo por esa cuadra encontraran una casa amarilla mate y la otra vive en el camino que va a Sora- El personaje de cabello largo y de gafas circulares: gracias señora por la información- La señora (arrugando las cejas) es mejor que cuando encuentren a la muchacha se vayan ya que personas como ustedes son aves de mal agüero- El pintor: no le pongamos cuidado a esta señora y vamos a lo que vinimos. La señora con esas palabras los interpreta con otro sentido y apura sus pasos perdiéndose en la distancia. Los tres doblan por la cuadra y al encontrar la casa amarilla  mate no dudan en tocar la puerta al responderle una vocecita de viejita: quien es…- El de gafas circulares: estamos buscando a Dorotea- Ya veo, mi nieta salió a comprar algo a la tienda ya regresa. Inmediatamente les abro la puerta. Al abrirla la viejita al verlos perpleja pierde el conocimiento, al ver que se desploma entre los tres la sostienen para que no se caiga de espaldas, en ese momento llega la joven que al verlos como sostienen a su abuelita comienza a gritar de tal modo que inmediatamente salen los vecinos y un hombre les apunta con una escopeta y les va diciendo: ustedes que le hicieron a doña Elvia- El de barba: no le hemos hecho absolutamente nada, sino cuando nos vio se desmayó- La joven: con esa facha que llevan ustedes quien no se asusta. Entre dos campesinos toman a la señora y cargándola la introducen dentro de la casa- El señor sin dejar de apuntarles les va diciendo: si no se van ya les disparo. Al terminar de pronunciar esas palabras los tres personajes salen disparados como si fueran las balas de la escopeta, corriendo asustados llegan por un sendero a una pequeña vivienda en la cercanía están amarradas dos ovejas que al verlos se sueltan llevándose por delante a un viejo que venía caminando, he inmediatamente sale una señora que al verlos se arrodilla, diciendo: de donde salieron estos santos- El pintor: no somos ningunos santos, somos gamines que venimos en busca de una amiga que se llama Dorotea- La señora no les creo, si me hacen el milagrito les doy guarapo. La señora desaparee de la escena y vuelve con un balde repleto de guarapo, los dos personajes se sirven y de esa forma empiezan hacerse la fiesta con la complicidad del pintor que los ve con cara de aterrado- La señora: usted no bebe- No tengo el hábito de tomar, mis amigos toman por mí- Muy bien que usted este sobrio así mientras sus amigos se emborrachan usted me hace el milagrito no se mueva de aquí que ya mismo voy a traer al enfermo. Al introducirse la señora por la puerta vuelve a los segundos cargando un gallo fino, al ver a los peculiares que toman como bestias y al pintor rígido como una estatua, el gallo al asustarse reacciona soltándose de los brazos de la señora y sale prácticamente volando. Este hecho hace que la señora se agache y le bese los dedos que sobresalen de las alpargatas al pintor- Él: no vale que me bese los dedos de los pies- La señora: pero no se dio cuenta que me hizo el milagro, será jóvenes que me ayudan a agarrar al gallo. Los tres se miran y sin gestar palabra corren a perseguir al gallo que entre los tres logran agarrar y de esa forma entregárselo a  la campesina. Al despedirse salen los prendidos caminando en zigzag y el pintor con sus pasos firmes- Él último va mascullando: con todos los inconvenientes que hemos tenido y ahora ustedes dos ebrios que calamidad. Andan y encuentran al lado de una loma escarpada por la erosión la casa donde pareciere que vive Dorotea, el pintor toca la puerta y al abrir la puerta la hermana pone cara de dramatismo y va diciendo: ustedes seguramente están buscando a mi hermana- contesta el de cabello larga con una voz de ebrio: si claro- La chica: ya voy a llamarla. Al rato aparece Dorotea diciendo: que bueno verlos sigan que está es su casa. Siquen a la enorme construcción que consta de una zona destapada semejando un patio en cementado, luego entran a la enorme sale y se sientan ocupando los tres sofás- Dorotea hablándoles: la empleada ya está cocinado las gallinas que les prometí allá en Villa de Leyva, si encontraron fácil la casa- El pintor: fue un poco complicado ya que primero encontramos muy cerca de la plaza a otra Dorotea y fue terrible ya que la que nos abrió la puerta de esa vivienda fue una anciana, que al vernos se desmayó, cuando llego la hija hizo tal escándalo que acudieron los vecinos, uno de estos nos apuntó con  una escopeta que tuvimos que salir rajando. Dorotea (luego que se ríe) pero si yo les hice un croquis de esta casa- Si se lo diste a Gabriel el poeta el cómo es un distraído lunático como veras lo perdió- Ella: que cosas, lo importante es que están aquí- Gabriel: que guarapo más enloquecedor, todo me da vueltas- El de barba: con este licor para que un carrusel. Al quedarse ensimismados llega la empleada luciendo un delantal y va palabreando: sigan a la mesa. Haciendo caso se sientan los tres en un lado y el papá, la hermana y Dorotea en el otro lado, la señora sirve plato por plato y al estar todo dispuesto el pintor va diciendo: tomemos de las manos y hagamos el honor por este espectacular almuerzo a los dioses- El padre de la chica: yo solo creo en nuestro señor Jesucristo- El poeta y yo en el nadaísmo que es estar entre el todo y la nada- Dorotea que lío- El pintor: yo no veo ningún lío si no al contrario entre más religiones mejor- Gabriel: el nadaísmo no es ninguna religión es una filosofía de vida- El pintor: no nos compliquemos más y ofrezcamos  estos  alimentos  a dios no importa quién sea y al nadaísmo, yo digo que este almuerzo se lo ofrecemos a nuestros campesinos ya que si ellos esto no sería posible y a dios y por supuesto al nadaísmo. Comen en silencio siendo roto por el padre que va murmurando con su voz: ustedes parecen que hubieran salido de algún manicomio- El poeta: la vida misma es un loquero yo creo que el que se sienta cuerdo está más loco que todos nosotros juntos. Todos se ríen menos el padre que solamente los mira sin chistar palabra. Concluido con la gallina, las papas y la ensalada- El pintor que llenura lo mejor sería caminar- Dorotea: vamos a Sora que no está muy lejos- El barbado: con estos alimentos se me quito la embriaguez que tenía y lo de caminar me parece lo más conve-niente- El poeta: vamos que va a oscurecer. Todos se paran dándole las gracias a la empleada y salen por la mismas puertas por donde entraron a la cocina, mueven sus pies a un solo ritmo y al pasar ante un grupo de árboles unos niños al verlos a grito herido: de donde salieron estos fantasmas- Otro más pequeño: seguramente de alguna película de miedo. Dejan los niños atrás caminando sin decirse nada ven como se oscurece para tornarse el firmamento de astros- El poeta: que inmensidad más extraordinaria- Dorotea: es increíble cómo se aprecian las estrellas, parecen tan cercanas. De esas llegan al pueblo donde los pocos postes centellean su luz sobre las casas de tejas de barro, en esa instancia se cruzan con un entierro, al verlos los campesinos se impresionan de tal forma que ponen el ataúd sobre el piso y salen corriendo a meterse en sus casas- Dorotea: como salieron corriendo y que vamos hacer con este ataúd- El pintor: nada, sigamos como si no hubiéramos visto nada. Al terminar de decir el cajón mortuorio comienza a moverse de tal forma que los logra asustar, lentamente se va abriendo y al estar completamente abierto surge del ataúd un campesino que lleva una larga ruana, con una cara pálida de muerto y que al verlos se asusta más que ellos que rápidamente sale a perderse adentro de la floresta. Se hace un silencio prolongado, luego no sabe de qué lugar surge una luz que al iluminarlos los hace desaparecer entre las tinieblas. 
                           
UNA MUJER INVEROSÍMIL
Un camión se detiene en medio del parque de Iza, en instantes se baja de la parte de atrás una joven completamente blanca, de cabello más allá de la cintura y con un pequeño morral sobre su espalda. El automotor vuelve a tomar su rumbo por la carretera. Ella se detiene en la circunferencia del parque y se sienta sobre una de las bancas de madera, saca del morral un libro de astrología que concentradamente se pone a leer, en esas se le pasa el tiempo hasta que oscurece. Mira a su alrededor enterándose que es de noche, medita sobre su situación decidiéndose levantar, tal cual camina y en la  esquina donde en la casa colonial sobresale un enorme balcón se encuentra con un campesino que como todos luce una ruana y le pregunta: de donde viene señorita- Ella con ojos desorbitados le va respondiendo: según mis coordenadas vengo de la latitud sur y 220 grados al noroeste- El campesino (insistente) de donde… De un lugar impreciso para usted- Señorita usted está más desubicada que una nube- Déjese de nubeses y déjeme tranquila que mis coordenadas saben muy bien donde me llevaran. Al ver al tipo alejarse por el andén del restaurante, ella toma en el otro sentido pasando por un costado de la iglesia, al leer un letrero con una flecha que le indica que por esa ruta podrá llegar a la biblioteca pública. Anda trémulamente pensado que en la biblioteca segura-mente  encontrara  otros  libros  de astrología, sin inmutarse  en las  horas que son, como es de suponer está más que cerrada. Al llegar sufre tal desilusión que se comienza a tirar del cabello y grita irrumpiendo en la paz de los vecinos, que al verla uno que otro campesino en el estado que se encuentra salen corriendo por donde vinieron. Ya después del suplicio se relaja, al retirarse de la moderna construcción entra por un portón sin enterrarse que es el cementerio, cuando ve los primeros mausoleos y luego las tumbas se dice a si misma: que pasa con estas coordenadas. Al tratar de devolverse detrás de una de las tumbas sale una oveja embistiendola, ella la ve como un fantasma del susto salta el muro saliendo a parar a una calle empinada donde corre cuesta arriba y en su alucinación al atravesar un portón derruido entra a un establo donde están  pastando un par de bovinos, viéndolos como algo extraño se aparta al otro extremo del establo y al ver un cubo de pasto seco no duda en tirarse a dormir con todo y mochila sobre su espalda. Al amanecer llegan al establo una pareja de campesinos cargados cada uno con un balde, con intención de ordeñar las dos vacas. En el momento que la ven como duerme, la señora decide llamarla tocándole el morral y le va diciendo: joven que hace aquí durmiendo. Ella de una abre los ojos, al presenciar a la campesina y luego a su marido va mascullando tapándose los ojos: donde estoy…, acaso que pasa con estas coordenadas de mierda- La señora que es eso de cordones- El marido (con cara de inocente) yo solo veo los cordones de sus zapatillas- La chica: cordones no, que con esto me basta y sobra, lo que dije fue coordenadas que es para explicarles más o menos como el tiempo y el espacio en que me encuentro, no en que nos encontramos- El marido (viendo a su campesina) ella lo que tiene es un hambre atroz- La  chica:  ni me lo recuerde el hambre que tengo, ayer solamente encontré zanahorias en el camión en el cual llegue, ya que estaba lleno de esos tubérculos- El campesino: déjeme a mi ordeñar que tu mi amor llevas a esta muchacha a la casa y le das de tragar- Si mi amor los desorbitados también comen. El hombre se queda hacer lo que dijo y la señora lleva a la muchacha a la casa. Las dos caminan por un sendero en medio del pastizal, al cruzar un puente por donde baja una cañada llegan a la pequeña vivienda de adobe y techo de paja, la campesina al abrir la puerta la encomienda a seguir, al entrar la de las coordenadas se sienta ocupando una banca de madera poniendo las manos sobre la mesa, mientras que la señora enciende la estufa de leña, al rato se siente el olor de la espesa sopa de habas, la campesina al determinar: que dicha esta sopa esta lista. Se la sirve en un plato hondo de barro y enseguida se la coloca con una cuchara sobre la mesa- La joven en segundos la devora- La campesina le va murmurando: quiere más- Si por favor que esta deliciosa. De esa misma manera se come dos platos más y queda como volando entre las nubes. Al darse cuenta que la campesina se ha ido, ni corta ni perezosa sale con su destino a cuestas.
UN TRASLADO MISTERIOSO  
Una madrugada aparece una chica en playa blanca del lago de Tota, estando dormida abre los ojos para ver otra realidad completamente diferente a su realidad. Al levantarse sin saber dónde está, trata de reflexionar el porqué, al no entender nada patea la arena y luego siente que su espíritu está más que nublado y su razón de ser no tiene el mínimo de claridad. En ese estado de cosas camina hasta el segundo muelle en el cual se sienta a apreciar la claridad del agua, que compagina en una zona azul claro y luego en la lejanía de un verde oscuro. Vuelve a intentar pensar, esta vez recuerda que estaba en otro lago muy diferente, y se le viene en la memoria: que estaba en la Patagonia en el lago Gutiérrez con unos amigos tomando vino al calor de una fogata, en el momento que todos ellos se fueron dejándola íngrimamente sola. En un momento dado de la profundi-dades del lago surgió una luz tan intensa. Hasta ahí se acuerda, trata deslumbrar que sucedió en adelante sin lograrlo. No puede evitar que se le vengan las lágrimas, llora sin poder consolarse. Estando como una virgen atormentada la encuentra sorprendiéndola una familia de campesinos- El hombre de más edad que se trata de un viejito le va pregonando al oído: por que llora una joven tan bella como usted. Ella reacciona al verse rodeada de tan bellas personas-La señora que luce un bello sombrero y largas trenzas le va hablando: usted no es de aquí. La joven intenta hablar pero se le hace un nudo en la garganta y además se le vuelven a salir las lágrimas; entre la señora y la hija la ayudan a levantarse- Esta última: si está temblando- El esposo: un caldo de trucha le sentaría de maravilla. La llevan al lado del camión que le pertenece a la familia, al lado donde están calentado una sopa de trucha- Este último viendo a sus hijos que se han encargado del fuego, que arde debajo de las piedras donde se encuentra la inmensa olla- El señor más joven va murmurando: ya está la sopa de verduras y trucha- Ya casi esta, pero quien es esa joven que han traído- No pregunte y más bien tráigame una ruana para cubrirla ya que está temblando, al instante va el mayor al interior del camión donde trae la mencio-nada ruana y entre las dos mujeres la ayudan a que se la ponga. Al estar la sopa entre la dos mujeres y una sobrina se encargan de traer los platos hondos de barro, una de ella con una enorme cuchara va sirviendo la sopa, al hacer la tarea la otra señora le va dando lenta-mente con su propia mano hasta que la joven patagónica puede ali- mentarse por sí sola; de ese modo comen para volver a repetir. Al terminar con el segundo plato ven a la joven como le vuelven los colores- El abuelo yo creo que ya puede hablar, señorita de donde viene. Ella (más despejada) soy de la Patagonia, estaba allá en una playa viendo como agonizaba una fogata y de repente una luz intensa como nunca vi antes, proveniente de la profundidad del lago Gutiérrez. Por esa razón solo sé que estoy aquí con ustedes, no sé qué relación tiene ese lago con el que estoy viendo; ni siquiera sé en qué país estoy, por lo que ven mis ojos pienso que estoy en Bolivia, o en el Perú- Una de las niñas: usted está muy chiflada ya que este país es Colombia, y usted se en el departamento de Boyacá- Ella vuelve a llorar a océano tendido- El señor: esta muchacha ya metió la pata váyase por un rato de mi vista, tranquila que se puede quedar con nosotros, en mi casa allá en Sachica tiene su propio dormitorio-Ella (reaccionando) gracias, pero será que una nave espacial me trajo hasta aquí, porque en tampoco tiempo es inexplicable el hecho que este aquí- El señor: si nos ponemos a pensar o te metes en esas cosas tan raras nos volveremos locos, digamos que fue un acto de magia y dejémoslo de ese tamaño.  Al estar listo todo en orden ella se monta al camión al lado de la familia para que el hijo del anciano conduzca, de ese modo salen de la ruta de polvo y luego toman la carretera.
LA TENTACIÓN CONSUMIDA
Siendo el día veinticinco de noviembre, del año mil novecientos setenta. Arriba de Florencia Italia el joven monje Felipe Felini de la orden franciscana, de Bogotá se traslada en bus a Sogamoso y de ahí en estandarte tirado por dos caballos a la población de Monguí. Al llegar a la plaza con su típico atuendo de monje y con el centro de su cabeza rapado, camina a la famosa catedral terminada en mil setecientos quince con la ayuda de la tribu de los Sahonas, siendo recibido con todos los honores por la comitiva de curas de su misma orden. El monseñor Urrutia ofrece una misa en su nombre, al dado por terminado la misma es trasladado al seminario de esta pequeña población, donde se dedica a la enseñada de su credo. Luego de sus clases todos los días acostumbra a caminar de la catedral al monasterio, en uno de esos paseos se encuentra de frente de una bella muchacha que luce una falda a las rodillas, un buzo café claro y un chaleco de un tono más oscuro, que lleva los cabellos trenzados y posee una cara redonda de donde brotan unos ojos del color de la esmeralda; el cura la esquiva pero termina prendido de su belleza; otra ocasión se presenta la misma chica: al bajar el cura al río a recolectar agua donde se tiene que esconder detrás de un árbol ya que ella se está bañando desnuda en un enorme charco, no puede evitar de apreciar detenidamente su esbeltez de belleza. Al darse cuenta que repetidas veces la sueña y más cuando una noche de luna llena tiene un sueño erótico que amanece húmedo por su propio semen, desde esa noche se castiga virilmente con un látigo. Pero eso no impide para que otra noche de luna llena, luego de salir de la iglesia loma arriba en dirección del campo con la intención de ver a un enfermo, luego cuando sale de la vivienda en el propio sendero se la encuentra a la hermosísima joven, sus impulsos sobrepasan a la moral cristiana y cuando la tiene en la aproximación la abraza encontrando sus labios, besándose una y otras veces. Ella  al estar excitada lo lleva al charco donde la viera por segunda vez, estando sobre las piedras ella atrevidamente le saca la túnica y todo lo que tiene como interiores y ella con sus prendas hace lo mismo, lo empuja suavemente a la suave corriente y se le lanza con una  ganas  terribles  que  él  de  inmediato  la estrecha, la besa repetida mente los senos y en un éxtasis profundo la penetra llevando a consumir el orgasmo.
Pasados los días a ella le va creciendo el estómago y él ni se lo imagina. Enterándose cuando ayuda a dar una misa, en la propia iglesia al verla ante curiosos sin importarle nada deja lo que está haciendo y con la dignidad y con la atención de todos los moralistas, sin importarle nada la toma de la mano y salen tranquilamente caminando perdiéndose del pueblo.
EL SECUESTRO
Jaime Alarcón un afamado delincuente llama al celular a su cómplice de fechorías Marcela Tobón (una reconocida paisa) y ella a su hermano Guillermo, se quedan de encontrar en la población de Sogamoso en la plaza de la Villa. El personaje llega en un pequeño taxi, al bajarse del taxi aprecia en la distancia a Marcela que está sentada sobre uno de los escaños fumando un cigarrillo; al verlo ella con una seña lo llama, al acercarse ella lo saluda de beso y Jaime mirando su reloj de pulsera va diciendo: son las tres empunto de la tarde, porque no habrá llegado tu hermano- Marcela contesta: a las tres y cuarto no quedamos de encontrar con él en el café Recoleto- Jaime vamos de una vez. Caminan viendo el volar de las palomas atravesando la plaza, al llegar al extremo atraviesan la calle y al introducirse en el mencionado café, al verlo ocupando una de las últimas mesas, con la mirada de los presentes van a donde se encuentra el hermano de Marcela, al tenerlos de frente se levanta de la silla dándole un apretón de manos a su cómplice y dándole un beso en una de las mejillas a su hermana y ocupan la mesa sentándose. Comienza hablar Jaime diciendo: aquí podemos hablar a calzón quitado, yo les propongo que secuestremos al alcalde, están de acuerdo…- Marcela: me parece que estas acertando, ya que el tipo pertenece a una ilustre familia de ganaderos, estoy enterada que tienen varias fincas, una inclusive en los llanos muy grande y además poseen varios inmuebles aquí, y en Tunja. En esas son interrumpidos por un muchacho que hace de mesero que les va soltando la lengua: que desean de tomar. Los tres se miran Guillermo están de acuerdo que sea tres tintos- Marcela y Jaime al  mismo tiempo: que así sea. Al ver que se retira el joven- Marcela: yo creo que primero estudiemos sus movimientos así será fácil atraparlo, lo más difícil es donde lo vamos a mantener oculto- Jaime yo con el robo que hicimos en Duitama de aquella prestigiosa joyería  me compre una casa en la vía a Firavitoba, ahí lo primero que hice es construir bajo tierra un escondite que incluso cuenta con un cómodo baño, ahí estará bien oculto; lo único que faltaría en que vehículo lo vamos a trasportar seguro- Marcela (interrumpiendo) en un carro que alguno de nosotros sea capaz de robar- Guillermo al decir es interrumpido por el muchacho que le pone a cada uno su tinto sobre la mesa. Al volverse a retirar el muchacho- Va diciendo Marcela: que ibas a decir hermano- Que de eso me encargo yo- Jaime: como todo está decidido nos vemos en dos días a la misma hora en el café de Javier Mora a dos cuadras de aquí- Marcela: no hay que decir más así quedamos. Salen cada uno por su lado, Marcela antes de tomar un taxi se fuma un cigarrillo.
A los dos días a la misma hora acordada, se baja de un taxi Marcela calle once con carrera doce, al pagarle al taxista como es costumbre prende un cigarrillo caminando hacia el lugar, que solo entra cuando ya lo consumió. Al estar en el interior ve a los dos hombres a la distancia que charlan, al verla a ella se paran de donde están sentados y cada uno le aplica un beso sobre un de los pómulos, ella  se sienta y va murmurando con su dulce voz: no me gusta perder el tiempo ya todo tiene que estar dispuesto- Guillermo: ya tengo el auto, eso si no les digo como me lo conseguí, solo les cuento que ya está pintado de otro color y con otra placa- Marcela: mi hermano es muy deficiente y además tiene sus secuaces, yo por mi todo lo tengo calculado, la mejor forma de agarrarlo es con un toque de feminidad que eso yo tengo de sobra y además el lugar lo tengo en mi mira- Jaime: que chica más lista donde es el lugar- Eso es muy simple es el bar Bristol a pocas cuadras de la alcaldía, en la diagonal quince con carrera diecisiete- Guillermo: ¡cuándo damos el golpe?- Marcela: hoy estamos a miércoles, eso es el sábado entre una y dos de la mañana- Jaime: entonces nosotros tenemos que estar listos para entrar en escena- Marcela: así se habla, me tengo que ir porque tengo una cita con mi amante. Se levanta y sale libremente por donde entrara, de igual manera se retiran ellos dos. Siendo el día sábado a las once de la noche llegan los tres en un mismo vehículo pintado de rojo que es el color cabalístico de Guillermo, que el mismo maneja y que parquea al lado del andén sobre la diagonal quince, se bajan viéndose muy elegante ya que la chica lleva un vestido con escote y una falda que juega sutilmente y algo corta partido al medio y ellos cada uno su traje algo vistoso, al llegar el portero cortésmente les abre la puerta, cruzan el espacio viendo primero la pista de baile con una que otra pareja bailando, luego los diferentes personajes que ocupan las diferentes mesas y por último al alcalde Julián Manrique que conversa efusivamente con dos amigotes. Los tres se sientan en la mesa siguiente dejándose  atender  por el elegante mesero que de una le trae a cada uno un whisky, lo van tomando lentamente. Al decidirse Marcela se levanta y va calculando cada paso hiendo a la mesa del alcalde y mostrando su media pierna descubierta le va murmurando al alcalde, quiere bailar con migo. El alcalde al ver lo atractiva que es no duda en pararse, la toma de la mano. Al ver los dos delincuentes que bailan, en el momento que bailan el segundo tema, se para uno por uno lentamente rodean a la pareja y Jaime saca disimulada el revolver que se le pone en la espalda al alcalde y Marcela con una amenazante voz le va murmurando al oído: mi amor esto es un secuestro, si no hace lo que le voy a indicar que haga mi amigo no tiene problema en dispararle. El señor Julián nervioso sin objetar nada se despide con un ademan de sus amigos, primero sale la pareja y luego sus dos camaradas, ella lo guía al automóvil y Guillermo pone el vehículo en marcha mientras entre Marcela y Jaime lo amaran vendándole la mirada. Lo llevan a la casa de Jaime a las afueras, hiendo hacia Firavitoba. Con el pasar de los días cobran estratégicamente una suma cuantiosa de dinero a la familia y obteniendo dicha suma disponen del personaje en la glorieta amarado a un poste, de esa forma lo encuentra una pareja de fulanos que da aviso a las autoridades.
POR ACOSO SEXUAL
Margarita Rosa que es de abuelos alemanes, que habita con su hija Claudia en la capital del departamento, después que le hacen varios robos a su vivienda del centro, decide cambiar de lugar a un pueblo. Luego que visita varias poblaciones, estando en Sotaquirá ve una vieja casona a tan solamente una cuadran del parque central “Corceles de la libertad”, al averiguar sobre la casona el propio dueño de una edad bastante avanzada, al estar viudo y que sus hijos viven en el exterior decide vendérsela a un precio módico. Al comprarla lo primero que hace es conseguir un afamado restaurador cl cual en pocos meses con su equipo de trabajadores terminan de restaurar la casona, seguidamente contrata a una empresa de trasteos la cual en un enorme camión le trasporta todo sus enceres a la dirección de la casa, que entre las dos y las dos empleadas acomodan todo donde Margarita Rosa quiere. Ella siendo aún muy atractiva con el suceder de los días, se enamora perdidamente de un señor con delirios de francés, este se aprovecha y al vivir con ella la hace sufrir ya que nada le gusta y menos está conforme. Una mañana que Margarita Rosa se ausenta ya que tiene que ir a Tunja debido a que su madre está muy enferma recluida de urgencia en una prestigiosa clínica de la ciudad. Este hombre llamado Carlos Bustamante al estar Claudia bañándose, logra forzar la puerta y va directamente a la ducha sorprendiendo a la joven, la toma a la fuerza intentándola violar pero para su fortuna logra darle tremenda patada en los lados nobles y sale corriendo a su cuarto donde cierra la puerta con seguro, le pasa a la joven uno que otro suceso con este pervertido sin lograr que su madre la escuche. Otra ocasión que la encuentra leyendo (ya que la muchacha es aficionada a los libros), el tipo la sorprende por detrás y la acomoda contra su cuerpo logrando arrancarle el brasier, en el momento que pretende acariciarle los senos la indefensa le aplica tal mordisco que hace que la suelte, ella sale corriendo huyendo por la calle. Al pasar de los días la madre trata de hallarla que inclusive notifica a la policía. Claudia que no es ninguna idiota en la ausencia de su madre y su padrastro como sabe dónde se encuentra la caja fuerte, y por su   puesto la clave. No tiene ningún problema en retirar una pintura del maestro Manzur, al  encontrar  la tal abre con la clave y se hace de una fortuna, como acaba de cumplir la mayoría de edad no tiene problema en fugarse en un avión a Buenos Aires.
UN EXTRANJERO ENAMORADO
En la época que terminaron de construir las vías del ferrocarril que comunica Cundinamarca con Boyacá, al terminar sus trabajos el joven ingeniero Peter Alsens (de nacionalidad inglesa), decide con su buen ejemplar equino recorrer Boyacá, luego que ha recorrido varios pueblos llega Monguí, al detener al alazán en plena plaza se baja de la montura, al ver a la sorprendente basílica, seguidamente  las dos cúpulas y al acercarse a un costado ve el escudo de la inquisición. Él camina diciéndose: hasta este pueblo llego la inquisición con su cacería de mujeres inocentes que denominaban con el apelativo de brujas, vuelve a donde está el alazán, cabestreando toma la calle tercera o Real, al llegar al antiguo puente Calicanto lo cruza para tomar el camino de cuesta, al encontrase con un campesino que como todos llevan su ruana le pregunta: buen hombre donde podrá alguien que tenga buenos pastos cuidarme mi bello caballo- De pronto un vecino que tiene varias cuadrillas de tierra podrá hacerle el favor- Donde quedan sus dominios…- Siga el camino que este lo llevara a su finca- Gracias. Peter sigue el sendero, al pasar por frondosos árboles halla el broche, al abrirlo encuentra una vivienda modesta- Él gritando: quien vive en esta morada. Al rato aparece una bella niñita diciéndole: mis padres se fueron pero si quiere puede esperarlos. El inglés  luego que le suelta el freno y lo amarra a un árbol, para que la espera no se haga tan larga comienza a contarle dulces historias que la niña escucha riéndose, en el momento que empieza a contarle el cuento de un leñador es interrumpido por la llegada de los padres, al verlo la señora aterrada de verlo le dice: de donde apareció usted- Peter: si le contara todo lo que me ha sucedido en esta vida me llevaría semanas- El marido que bello caballo tiene- Si, es lo que más quiero en esta vida. Estoy buscando alguien que me lo cuide si usted lo hiciera le pagaría lo que usted me diría- Con mucho gusto nosotros se lo cuidamos ya que tenemos abundante pasto y del mejor- Cuanto me cobraría- Lo que usted nos quiera dar- Le doy esta suma de dinero- Es demasiada- Por favor recíbemela- Bueno está bien. Al desensillar se retira dándole un besito a la niña, camina por donde viniera, al llegar al pueblo entra a un granero- Él (viendo a la señora) usted por casualidad sabe de una pensión ya que vengo de largo viaje y estoy supremamente cansado- La señora amable-mente le contesta- Si se le ve el cansancio, si camina por esa cuadra encontrara justo en el medio una puerta doble, de bordes rojizos, toque que seguramente estará la comadre Matilde. Gracias. Hace lo que la señora le dice así fácilmente encuentra la puerta descrita por la señora, toca una y dos veces la puerta- Al momento abre la puerta una campesina hablándole: le puedo servir en algo- Si gracias, usted por lo que me dijo la señora del granero tiene un cuarto para arrendar- Si claro- Lléveme por favor que no aguanto más este cansancio- Venga por este lado. Al caminar unos pocos pasos y la señora abrir la puerta, al ver la cama se tumba para que inmediatamente quedar profundo. Solamente abre los ojos bien entrada la mañana, se baña y se viste con la misma ropa, al querer salir se encuentra a la señora de frente que le dice: tiene mejor semblante se ve que descanso- Si de sobremanera, ahora necesito comer algo y luego comprarme algo de ropa ya que el baúl que traía se me fue por un descuido a un río- La señora (con cara de sorprendida) lo primero es lo primero ya mismo le preparo algo bien alimenticio, espere  tantico  que voy a la cocina. Él se sienta yen menos de lo que canta un gallo tiene servida la sopa de gallina en un enorme plato sobre la mesa, come con tantas ganas que al terminar la señora le vuelve a servir un segundo plato que igualmente devora- Él sintiéndose lleno le manifiesta lo siguiente: que almuerzo más delicioso usted cocina como una diosa muisca, seguramente ya pensó donde pueda conseguir ropa de mi tamaño- Si claro, la única opción es que vaya a la casa de un señor que no sé de donde es, pero debe ser de su tamaño a lo mejor él le pueda solucionar su falta de prendas- Donde lo consigo- Seguramente a esta hora estará en su casa, vamos a fuera que le indico. Al salir la señora señalando le dice: doble en la esquina hacia arriba, camine más o menos tres cuadras y en una casa de grandes ventanales encontrara la puerta del mismo tamaño, ahí debe preguntar por don Carlos- Gracias, ya mismo voy. Sale por donde le indicara la señora, dobla por la cuesta y de esa manera fatigado encuentra la casa, toca la puerta suavemente y le abre la puerta una joven de una gran belleza, que cuando fija su vista en ella si no es porque se tiene duro de lo contrario se caería de bruces- Ella: señor que pasa que no me dice a lo que vino- Que rostro más bello, que ojos más hermosos  son como el mismo firmamento, que cabello más salvaje. No sé qué decir ante tanta belleza solo se me ocurre lo que estoy viendo- Ella usted también me agrada pero dígame a que vino- Todo se me perdió en su belleza. En la distancia se escucha la voz de un hombre: Hija ¿quién es? Es un joven que seguramente quiere hablar con usted- Ya salgo. Al venir hacia la puerta el señor barbudo le va diciendo: usted quien es, que carajos viene hacer aquí?- Es que la señora donde me hospedo me dijo que usted a lo mejor me pueda vender algo de ropa- Usted está completamente chiflado salga inmediatamente de aquí, de lo contrario lo enciendo a bala. Él sale a perderse cuesta abajo, sin entender nada se sienta sobre la banca de afuera de la posada, piensa: que mujer más bella es como el mismo firmamento cuando está libre de las nubes. Camina ensimismado de amor que sin darse cuenta se estrella contra un fulano que los dos van a caer al suelo- Se levantan al mismo tiempo y el señor regaña diente le va diciendo: por andar en las nubes casi me mata, acaso no se fija por dónde camina vea su tamaño. Sin importarle nada anda como un demente solo pensando en la joven, se vuelve más loco al pensarla de un modo pasional: como se llama, si la habrá gustado mi presencia, sin hablar se la pasa el día y solo come la comida que le ofrece la señora. Todos los vecinos se preguntan sobre su delirio.
Una mañana tocan la puerta de la posada, la señora al ver a la joven se sorprende y le va palabreando: en que le puedo servir- Será que el joven extranjero esta, quiero verlo inmediatamente- Siga que él si  se encuentra. Al seguir va directamente al patio donde está práctica-mente paralizado viendo acachado la hierba- Ella tocándole suavemente la espalda, sin entender nada lentamente se voltea y cuando la ve le vuelve la vida y le va diciendo: belleza que bueno me hace verte, pensé que nunca más podría mirarte con estos ojos que tengo de amor. Le toma las manos y ella se deleita viéndolo, llora diciéndole: que su padre no la deja vivir en paz, que todo el día la acosa diciéndome que me tengo que casar con un compadre de él que tienen varios negocios juntos. Peter la abraza diciéndole: que lo mejor es que huyamos de este pueblo, vamos a buscar mi caballo- Donde está…- En la finca de un buen hombre- Vamos de una vez que me quiero fugar del infierno de mi padre y además en el momento que tocaste esa maldita puerta, es  como  si  el amor en persona se me hubiera presentado- Peter: corramos. Sin despedirse de nadie de una patada abre la puerta, salen corriendo en menos de nada llegan al antiguo puente y de esa misma forma llegan a la finca, como la primera vez solo encuentran a la niña que al verlos le pregunta: que hace con esa bella mujer, acaso son novios- Ella: yo me llamo Carolina si soy el novio de este guapo hombre y vos cómo te llamas…- Yo soy Irene- Peter: Irene tus padres yo sé que se demoran, sabes dónde está el caballo- Si él es mi amigo vamos que los llevo. Corren a los potreros y la niña con un lindo silbido llama al equino que no tarda en venir galopando, en el momento que los tiene cerca se detiene y la niña lo acaricia y la sigue hasta el lugar de la casa, así de fácil él lo ensilla y de último le pone el freno y la jáquima- Peter: dales este dinero a tu padres y compórtate siempre como una buena niña. Luego de darle cada uno un beso él la ayuda a montarse en el anca y cuando se monta Peter ella lo sujeta de la cintura, y diciéndole con un ademan adiós se fugan a todo galope por un sendero que no tienen que regresar al pueblo.
El padre al darse cuenta de la huida de su hija, pierde los estribos enloqueciéndose, sale con la escopeta apuntándole al que se va encontrando, como el que quiere carroña encuentra uno de su misma especie que este no duda en dispararle y de ese modo halla la muerte.   
SUCESO EN UN CEMENTERIO
Cierto personaje siendo una noche supremamente clara, ya que la luna está completamente llena. El personaje llamado Miguel Briseño se encuentra con un amigo en un pequeño lugar a unos pasos de la plaza, piden una tanda de cerveza se las toman hablando de sucesos de mujeres, al acabar con las cervezas piden otra tanda, hablando del mismo tema se toman varias cervezas, el amigo habla largamente de la relación que tiene con su novia Nora, acabado con el tema se despiden ya que el amigo se tiene que ir a donde vive ya que su mamá está enferma. Miquel aburrido atraviesa la calle instalándose en el parque central con ese sentido de las cosas se sienta sobre un escaño de madera, ve sobre el ramaje de los árboles y en mitad del firmamento la inmensa luna de esa forma se siente de una forma extraña, recuerda a su última amante que se fue a vivir a Tunja a estudiar bellas artes, se acuerda como si hubiera sido ayer los instantes que compartieron: los paseos, las fiestas, hasta los libros que leyeron juntos y los retratos que ella le hiciera que algunos los conserva enmarcados en su habitación. Como impulsado se levanta y vuelve al mismo lugar que compartiera con su amigo, va al mostrador pidiendo una botella de aguardiente y vuelve al parque exactamente a la misma banca de madera donde se sienta presenciando el contorno de la luna, saca del bolsillo de la chaqueta un paquete de Piel roja, al abrirlo saca un cigarrillo el cual enciende, va fumando dándose largos tragos del aguardiente. Al pasar un sujeto desconocido a la distancia lo saluda, este se le acerca, él le brinda un trago de aguardiente y luego se sienta hacerle compañía- Miguel: aquí nos conocemos todos, usted por lo que veo no es de aquí de Floresta- No para nada solo vine a visitar a unos tíos- De donde viene…- De Corrales- Claro del pueblo vecino, a que se dedica allá…- Estudie  veterinaria  en Tunja y le ayudo a mi padre con las vacas- Buena por esa, Salud. Se pasan la botella mutuamente al acabarla se despiden con un apretón de manos. Y Miguel  queda  en  la inopia sin saber que hacer ya que no hay absolutamente nadie a su alrededor, recuerda que en un pequeño estanquillo si golpea con suerte le podrán vender otra botella de aguardiente. Se levanta muy decidido pasando entre el en ramaje, las altas palmas y al caminar una y otra cuadra toca en la puerta de lata insistentemente. Del otro lado le contesta la voz de un hombre: diciendo que quiere a esta hora de la noche- Don Virgilio soy Miguel el de siempre, por favor véndame una media de aguardiente y un paquete de cigarrillos Piel roja- El señor: que cosas ya que me despertó no me queda otra cosa que venderle. Al rato abre la ventanilla de la puerta y al entregarle a miguel la media y los cigarrillos, este le entrega el dinero correspondiente. Camina media cuadra y se sienta en el borde de una acera, abre la botella de la cual se toma un trago, luego destapa el paquete sacando un cigarro el cual enciende con su mechero. De esa misma forma va fumando y tomando, en el momento que se ha tomado la mitad de la media siente un impulso extraño, haciéndolo levantar con esa reacción camina con su ebriedad en zigzag, no se da cuenta que atraviesa la puerta del derruido cementerio, camina entre la hierba seca pasando a delante de los mausoleos y al ver uno en particular, se sienta a leer el epitafio: aquí yace Clara Elena Muñoz que murió a la edad de veinticuatro años sin saberse la causa de su muerte. Luego de haber leído siente que a su espíritu se le viene la conciencia acrecentada, se queda paralizado en esa instancia ve que de la tumba surge como una especie de vapor muy anaranjado, como si estuviera iluminado por una lamparilla que diera ese color, ese vapor lentamente comienza a girar a su alrededor convirtiéndose en una mujer supremamente rubia de unos ojos penetrantes azules con una mirada ardiente, con sus manos lo toma estrechando contra su cuerpo. Él inmediatamente se queda paralizado sin tener reacción, en el momento que sensitivamente toca con sus labios dándole un beso se esfuma con el mismo vapor volviendo a donde pertenece. El al sentir y ver lo sucedido se queda de una sola pieza, al meditarlo reaccionando sale corriendo y no puede contar la historia ya que no puede detenerse y al pasar un automóvil a toda velocidad lo inviste de tal forma elevándolo que cae contra el pavimento, dándose contra el mundo de esa forma enseguida perece.
COMO SE VAN DANDO LAS COSAS
Luisa llega procedente de la capital argentina a visitar a su amiga Ana que conoció en Buenos Aires, estando en Bogotá varios días conociendo los más importantes museos, y el barrio la Candelaria una noche que están en un bar del mencionado barrio disfrutando de unas cervezas, la segunda le dice a la primera: que tal te parece si vamos a Boyacá- Luisa: que es eso de Boyacá…- No te me adelantes que te cuento, Boyacá es uno de los departamento más grandes de este país, como le dicen ustedes a los departamentos provincias- Entiendo, pero no termino de saber que pasa en Boyacá- Te sigo contando: yo tengo una muy buena amiga que tienes que conocer ya que ella es increíble, esta mañana me telefoneo invitándonos a unos pueblos de Boyacá que es un departamento muy pintoresco ya que allá los pueblos son completamente ancestrales y mágicos- Luisa: que buena invitación, ya me muero por conocer cuando salimos…- Mañana mismo. Al terminar las
últimas cervezas escuchando un tema de Charly García celebran la ida al departamento, luego se levanta cada una de su respectivo asiento, al pagar las cervezas que se tomaron salen a la calle, caminan de la tercera con décima a la trece con esa misma carrera sin desviarse y al entrar al edificio que el mismo celador les abre la puerta, suben alegremente cantando la canción: voy en avión, Ana con la llave correspondiente abre la puerta y sin pensarlo dos veces luego que se quitan la ropa se tiran las dos en la única cama quedándose inmediatamente dormidas.
Al otro día al abrir Ana los ojos despierta a su amiga, por turnos se bañan y al vestirse con bluyines, camisetas y cada una con un suéter diferente, luego que desayunan se colocan sus mochilas y con ese sentido de las cosas salen a la calle donde en menos de nada toman un taxi que a pesar del tráfico las deja rápidamente en la terminal. De una compran cada una su boleto a Tunja y en seguida abordan el autobús que en dos horas las lleva a Tunja, al bajarse la amiga de Ana la está esperando con su mochila sobre la espalda, al aproximarse se saludan de abrazo y Brenda va diciendo: ella debe ser la amiga que me hablaste- Ana: si precisamente es ella te la presento, ella es Luisa la amiga que conocí allá en Buenos Aires- Luisa: estrechándola que gusto de conocerte- Brenda yo sé que nos vamos a llevar de lo mejor. Las tres se ríen que despierta las ganas de los curiosos, luego que terminan de reírse Brenda va diciendo: vámonos de una vez a Floresta que es donde mi familia tiene la finca- Ana: cómo hacemos para ir- Brenda es simple primero vamos a Sogamoso y de ahí nos dirigimos a Floresta- Luisa entonces tomemos el ómnibus- Ana (luego que suelta la carcajada) no en ovni no en bus- Luisa: ustedes son unas burleteras ya tendré como burlarme de ustedes. En esas se estaciona un bus y al ver el letrero se suben ocupando las última sillas- Ana: como buenas latinoame-ricanas ocupamos las sillas de los músicos. Se van cantando con la complacencia  de los  otros viajeros, que  al  terminar cada canción aplauden- Una señora: estas muchachas no se cansan de cantar, así llegan a su destino, se  bajan  detrás de todos los ocupantes del bus, al poner los pies en el cemento, luego que toman de la bodega del automotor cada una su respectiva mochila entran al interior del terminal. Las tres sin saber a dónde dirigirse se ríen una y otra vez- Luisa: para donde vamos- Un muchacho (interrumpiéndolas) con esa risa en el único lugar que las reciben es en el manicomio- Ana: este tipo seguramente se cree el siquiatra pero debe estar más loco que nosotras tres- El muchacho: mejor sigo mi camino- Brenda es mejor porque no sabe de lo que se está perdiendo. Al verlo desaparecer de sus ojos- Luisa: ahora si hablemos serio, lo mejor es preguntar de donde sale el bus, para donde es…- Ana: acaso no es a Floresta- Luisa: pibas, flores al menos debe haber con estas ganas de desojar los pétalos de una margarita- Ana: está argentina sí que se quiere salir con la suya- Brenda sigamos bromeando pero preguntemos- Ana (sin terminar de reírse) que pregunte Luisa a ver cómo le va- Luisa: ya verán como las voy a informar sobre Floresta. Al pasar un policía esta última le va diciendo: señor oficial de gendarmería usted debe saber dónde podemos tomar el bus a Floresta- El policía (azarado) yo creo que si le pregunta a ese señor él le podrá decir- La misma encara al señor palabreándole mientras la otras se burlan, ella insistente: señor usted debe saber dónde tomamos el bus a Floresta- El señor (indicándole con uno de sus dedos índice) salgan allá. Al ir hacia afuera ven varios buses estacionados y él último tiene el letrero correspondiente, se suben colocando las mochilas en una de las sillas y luego se sientan en las sillas siguientes, al rato se van subiendo de a grupos los pasajeros, en el momento que el bus esta sin una silla libre, el chofer se monta arrancando el autobús, atraviesa la pequeña ciudad tomando una vía en mal estado. Ellas calladas absorbidas viendo el paisaje, en una curva  el  bus esquivando a un auto se va a una zanja que dando de medio lado y con la suerte que todos los pasajeros salen ilesos. Todos los ocupantes del bus deciden bajarse, ellas lo hacen luego que todos ponen los pies en el asfalto, como son varios deciden caminar adelantándose, en el momento que pierden de vista al pasar un automóvil le hacen auto-stop y el señor sigue como si nada, luego pasa ante ellas una camioneta enterizamente encerrada que al verlas el conductor para en seco. Se baja el chofer y su camarada que lleva el cabello largo y ensortijado abriéndoles la puerta de atrás donde ellas se montan cargando cada una su morral, y ellos se montan ocupando el mismo lugar- El de bigote pone en marcha viéndolas por el espejo- El de cabello largo: ustedes iban en el bus que se fue a la zanja- Ana: si claro, por fortuna íbamos tan absorbidas en nuestros asuntos que ni cuenta nos dimos- El conductor de bigote: el golpe tuvo que ser fuerte como no se dieron ni cuenta- Luisa: che si lo pienso me muero del susto- El de pelo largo: pero ustedes algo se fumaron. Todos se ríen incluso hasta el conductor, este último diciéndoles: por lo que veo una es argentina y las otras son de estas tierras, se puede saber sus nombres…- La de cabello negro y liso le contesta: la argentina se llama Luisa, mi amiga de Tunja Brenda y yo soy Ana- Mucho gusto mi amigo se llama Torpedo no es porque vaya a estallar si no porque su poesía es rebelde con causa y yo soy Luis Alberto Pino, no procedo de los pinos si no de los mapas ya que soy cartógrafo. A este poeta lo recogí en Villa de Leiva anteayer, no es que quiera inmiscuirme en sus vidas a donde quieren llegar- Brenda: vamos a la finca de mis padres y ustedes…- El poeta: no vamos con un destino fijo ya que simplemente vamos andando con el nadaísmo- Luisa: que es el nadaísmo,,,- Ana debe ser este vehículo o algún caballo que los está esperando- Pino (luego que suelta la carcajada) nunca se me ocurrió ponerle nombre a este traste de carro, pero ahora en adelante se llamara nadaísta- El poeta: estoy hay que celebrarlo a donde haya una tienda, señor mapamundi detenga al nadaísmo o al nadaísta que como yo soy de ese origen me corresponde invitar a cerveza y de una vez bautizamos este bello traste- Pino: que bueno es viajar con un poeta, no creen que corremos con ventajas- Luisa: nunca antes viaje con un poeta, intuyo que este viaje será el más alucinante- Brenda: ustedes dos son el mapa de la poesía, que integración más increíble. Al reírse todos pino en la lejanía distingue un pueblo que está a un costado del río que desde cuando se montaron ellas lo han estado bordeando, al cruzar el puente pino en el mismo pueblo detiene al lado de una tienda el automóvil. Todos se bajan y entran en el pequeño recinto sentándose sobre unos bultos de papa- La señora amablemente les va preguntando: por lo que veo desean tomar cerveza- El poeta: está en lo cierto denos a cada uno una cerveza y denos una de más que vamos a realizar un bautismo- La señora (riéndose) ya mismo se las llevo pero no veo al bebe- Ana: él bebe es el carro de Pino- Pero tampoco veo ningún pino- Señora Pino es mi apellido y mi nombre de pila- Ya entiendo. En esas viene con las botellas y al entregárselas brindan dándose el primer sorbo, luego todos se paran y en presencia hasta de la señora el mismo Pino vierte el líquido encima del automóvil, que asemeja a una camioneta. Luego del bautismo y que terminan el contenido de la botella todos vuelven a ocupar el mismo puesto y Pino le da rienda suelta al vehículo, de esa manera va conduciendo esquivando    hueco por hueco, luego que pasan un pequeño poblado Brenda va diciendo: es este el desvió para ir a la finca- El poeta (volteando la cabeza en dirección de Brenda) será que tus padres no nos sacaran con la de matar ovejas- No  porque ni siquiera están, siga que la vamosa pasar de película. Al entrar por una trocha en peores condiciones que la vía principal, Pino como el volante que es logra atravesar todos los obstáculos y en una loma divisan la casa. Donde Pino logra parquear, todos al mismo tiempo se bajan, ellas bajan las mochilas mientras Pino y su amigo abren el baúl de donde retiran sus cosas y el poeta saca de su morral dos cajas de vino para colocarse la tales sobre los hombros, Brenda empuja la puerta que se abre- Luisa va murmurando: cómo es posible que la puerta no tenga seguro- Ana: si aquí no pasa nada- Pino: Boyacá es lo más seguro de este país- Brenda: ella tiene razón por ese motivo prefiero este departamento que otros- Pino: en el Huila ya no hubiera ni casa. Todos de una van a la cocina donde encuentran la alacena y la nevera llena de alimentos- Brenda: con este mercado creo que podremos vivir un mes. Entre las chicas se ponen en la tarea de preparan una pasta, unas se encargan de los cebollas y los tomates, la otra pone el agua a calentar y en un santa jugada está todo preparado, ellas misma organizan las mesa y de una se encargan lentamente de darle mate a las pastas con salsa- Pino (viendo al poeta) verdad que quedan contratadas- Ana: que hombres más frescos- El poeta: sin esta frescura no podríamos realizar lo que deshacemos- La argentina (tomando al poeta de la mano) yo me encargo de este poeta ustedes verán que hacen. Salen de la casa, pero antes recogen una de las cajas de vino, van bajando la loma casi rodando al caerle ella encima al poeta, aprovecha para besarla que ella al no resistirse lo atrae dándose largos picos, ella busca la manera de sacarle el pantalón, mientras él le saca el suéter y luego le deja los senos al aire, describiendo con sus labios la redondez llegando a besarle los frágiles pezones, ella excitada le quita la camisa y prácticamente le arranca los calzoncillos y el ágilmente le saca el bluyín, él le besa los dedos subiendo sus labios de los tobillos a los pies, luego a las piernas acariciando los pelos del pubis y subiendo al estómago para volver a los senos; ella se menea buscando el pene que al estar erecto siente como la penetra con movimientos continuos e iguales llegan a consumar el deseo y estrechándose abrasadamente se duermen. En la casa Pino duda a cual chica seducir, decidiéndose por Ana sin importarle Brenda la toma alzándola, al darse cuenta de antemano sin que ella ponga resistencia la introduce en el cuarto depositandola sobre la cama sentada, él de igual mente se sienta poniéndosele al frente, se comienzan a tocar y luego se besan largamente una y otras veces, con ganas mutuamente se desvisten y al quedar desnudos se besan de la misma manera acariciándose todo el cuerpo, en el momento que él le besa los senos ella irresistiblemente hace que la penetre y en movimientos ágiles y continuos llegan al clímax consiguiendo salvajemente llegar al vértigo del orgasmo. Brenda sin saber que hacer elige desvestirse y sale corriendo en busca del río, en el momento que la ve un joven campesino, no duda en quitarse la ropa y a toda carrera le da alcance para que de un gran salto cae sobre su humanidad, al estar sobre ella con sentido común la besa una y otra vez, y al excitarla besándole los senos con furia de macho cabrío la penetra de esa forma le hace el amor una y otras veces. En la mañana sin avisar llegan los padres encontrando el auto de Pino completamente abierto, y a las tres parejas como vinieron al mundo tirados en el suelo, al darse cuenta de lo sucedido el padre de Bren-da con una expresión demencial saca del armario su pistola y sale afuera disparando, todos reaccionan corriendo y de una se trepan en el carro de Pino, que al tomar el volante rápidamente arranca cuesta abajo. 
            
LA EXCURSIÓN A UNA MINA DE CARBÓN
Javier siendo un ingeniero de minas recién egresado de la universidad pública de Tunja, sin logra conseguir trabajo porque su origen viene de una familia humilde, por lo tanto no tiene una palanca que lo haga ingresar en una empresa que se dedique a la cuestión de la minería, como le pasa a la mayoría de los colombianos. Como está bien informado que entre Tápaga y Mangua hay varias minas donde extraen el carbón, convence a una amiga que curso toda la carrera con él y que está en la misma frecuencia y situación. Con antelación quedan de encontrarse en la terminal a las siete de la mañana de un día lunes, cumplidamente llegan a la cita y al encontrase se saludan como acostumbran hacerlo de beso, seguidamente camina uno al lado del otro saliendo a donde encuentran los buses con los distintos destinos, esperan lo necesario pensando en lo que tienen que hacer en la mina, en el momento que llega el bus que va para las dos poblaciones no tienen si no que montarse ocupando los primeros dos puestos. A pesar de que solo se sube una señora con sus dos hijos, el chofer arranca el automotor saliendo de Sogamoso toma una vía en regulares condiciones, desviándose en la ye que una va para Monguí y la otra al objetivo, empezando a trepar lomas arriba en prolongadas curvas y de esa manera llegan al pueblo donde el conductor detiene el bus en un costado de la plaza. Al bajarse Diana rompe el hielo diciéndole a su amigo: esos pinos son semejantes a animales pero no se ha cuál de ellos se asemeja- El muchacho: opino lo mismo pero no pensemos en otra cosa que no sea a lo que vinimos- De acuerdo- Vamos por la carretera que yo sé muy bien por donde nos tenemos que desviar. Agilizan el movimiento de sus pies  por  la vía viendo lo erosionado del terreno gracias a los eucaliptos, se desvían tomando un pequeño sendero de esa manera ven el socavón de la mina- Diana: será Milton que entramos- Él sacando de su maletín una enorme linterna, le contesta: porque crees que he traído esta potente linterna. Se aventuran iluminados por la linterna, entrando por la boca al túnel que se prolonga hacia abajo, caminan hasta encuentran el zócalo de carbón, lo inspeccionan con el conocimiento que tienen de la materia. Estando muy concentrados en lo que están viendo, sienten  que empieza a temblar de sobre-manera, corren por donde llegaron siendo el temblor que se agudiza más, en un momento dado una enorme roca cae tapándoles la entrada. Sintiendo que este suceso accidental lentamente va acabando con el oxígeno, gritan desesperadamente logrando que un grupo de mineros los oigan, gracias a su fortuna estos hombres tienen el conocimiento del lugar, que rápidamente con picas logran abrir una abertura que les devuelve el oxígeno y entre todos esos buenos hombres logran sacarlos del suplicio y arrebatarlos de la pelona muerte. 
EN LA IGLESIA DE TÓPAGA
Un automóvil repentinamente aparece entrando al pueblo, le da la vuelta a la plaza y se detiene, se baja una mujer aparentemente extranjera y el carro se pierde por donde entro al pueblo. La mujer muy rubia, de ojos claros y de una altura considerable. Luego que se quita de su espalda una mochila la pone al lado de la banca de metal verde y se sienta, en seguida saca de su campera un paquete de cigarrillos desconocidos, al sacar uno con un encendedor lo prende, pensativa lo aspira haciendo que el humo se disperse en el ambiente. Al acabar tira la colilla apagándola con una de sus botas, camina viendo los particulares pinos, da la vuelta a la plaza y en el momento que tiene de frente la antigua iglesia se decide por entrar, cruza la puerta circular viendo detalladamente cada detalle, en particular le gusta el altar rococó y una especie de fuente, como no ve un alma aprovecha vara verla totalmente deteniéndose en un enorme pintura de la escuela quiteña que explícitamente se trata: de cristo llevando la cruz y al lado esta María acachada con expresión de dolor. Distraída en la pintura siente un ruido como si se cerrara la puerta, al voltearse lo rectifica pensando: ahora que voy hacer. Decide gritar con la intención que alguien la escuche, va hasta la puerta de madera pesada y gruesa, por más que intenta le es imposible que prefiere sentarse en el púlpito, siente en la distancia una voz como si alguien rezara. Enseguida se da cuenta que es una viejita, al acercarse se da cuenta que no hay nadie. Se toma la cabeza pensando que se está enloqueciendo y grita contestándole su propio eco quedándose como paralizada. Piensa: en su idioma que se tiene que tranquilizar. Logra persuadirse y se calma, sintiendo la paz alrededor, pero esto le dura muy poco ya que ve como se encienden los lirios y las pequeñas velitas que la gente prende dando monedas; a continuación aparecen siluetas en el techo y en las paredes blanca, seguidamente unas llamas aterradoras que se come las uñas y que desaparecen como todo lo ocurrido. Cuando siente como si abrieran las puerta se asusta aún más ya que esta suprema-mente confundida, pero para su fortuna al girar la cabeza se da cuenta que es verdad, que inmediatamente emprende a todo lo que dan sus pies la fuga llevándose al cura por delante y a otros feligreses.    
INTENTO DE SUICIDIO
En el atardecer de un día de semana en la población de Duitama, Clara sentada en la plaza central llora amargamente a lágrima  extendida, un muchacho que la reconoce ya que estudio en la misma universidad que ella. La toma de la mano acariciándosela y con su vos suave: amiga no sé si te acuerdas de mí, el caso es que terminamos nuestras respectivas carreras el mismo año. Ella: por favor déjeme llorar que me quiero desahogar- El (insistente) no llores más y cuéntame que te sucede- Ella: desde cuando le interesa mi vida- Desde que la conocí una tarde en una asamblea que al salir de la edificación hablamos sobre aspectos de vida- No lo recuerdo. Al acabar de decir vuelve a llorar- Por favor confié en mí y cuénteme lo que le pasa. Si le cuento usted no podrá remediar esta maldita situación- Cuénteme que tú siempre me has interesado- Eso dicen todos. Vuelve a lagrimear estrechándose contra el amigo diciendo no puedo aguantar más esta situación- ¿Cuál situación? En un descuido de él arranca a correr y al llegar a la avenida antes que se les tire a los carros él logra agarrarla de los hombros. y ella le implora: déjeme morir- No, porque la estimo. Más bien la invito a lo que quiera y así me cuenta lo que le pasa- Vamos, pero esto no se arregla con hablar. La toma de la mano de esa forma la ayuda a cruzar la avenida aprovechando el momento del trancón, al tomar el andén andan media cuadra y al ver el lugar solo que se trata de una pequeña cafetería entra ella seguida de él, se sientan ocupando una de las dos mesas. Casi al mismo tiempo se presenta el encargado diciendo: que  desean  de  comer  y de tomar- Ella (limpiándose las lágrimas) a mí me da un tinto bien cargado- El adelantándose con su voz: con ese estado alterado no te conviene tomar café y menos tan espeso. Ella lo mira y furiosa golpea con su puño la mesa- El señor reaccionando mal les grita: váyanse  si  vienen hacer lío. Ella reacciona peor y con toda su fuerza primeramente derriba la mesa y luego lo empuja a él, que va a dar contra el suelo y sale corriendo en la tercera cuadra toma el puente peatonal, al llegar a la parte alta se sube en el andamio pero cuando se quiere lanzarse él compañero llega a tiempo y la toma de la cintura volviéndola al piso del puente- No quiero que te mates por nada del mundo, se lo difícil de tu vida y ya me explicaras bien tu puta situación. Vamos a donde no molestemos a nadie. El prácticamente llevando a la fuerza a la flaca grandota, al mismo lugar donde la encontrara. Hace que se siente dictándole con su boca: ahora si me vas a contar- Ella está bien, mi puta tragedia es que primero mi novio me salió un falsete, lo comprendí cuando lo vi besándose con mi mejor amiga; lo segundo que me pasa es que no me aguanto al maldito padrastro, si vieras como trata a mi mamá como si fuera la empleada de servicio. He tratado hablarle pero me responde que soy una marihuanera, simplemente porque soy la que soy y me visto como me siento mejor; y la tercera: me echaron del trabajo y no tengo un solo peso partido a la mitad- A mí no me ha ido tan mal ya que no tengo novia y mucho menos nunca he podido conseguir un trabajo que valga la pena que prefiero conseguirme el dinero por mis propios medios, lo hago pintando ya que amo este trabajo y ahora que te encontré por nada del mundo voy a dejar que te me escapes, solo sé que te amado siempre y en la universidad era un cobarde ya que no tenía huevos para hablarte, y no comprendo como pude perder el tiempo pretendiendo ser un profesor. Vamos a donde vivo que no es un lugar lujoso pero si tiene corazón de sobra. Ella se le alegra la vida y sin dudarlo se va con él.
                                           INDICE 
Cuento No.1, pag. 1---------------------------Todo por el pozo la vieja
Cuento No. 2, pag. 5--------------------------Tres extraños personajes
Cuento No. 3, pag. 10----------------------------Una mujer inverosímil
Cuento No. 4, pag. 12----------------------------Un traslado misterioso
Cuento No. 5,pag 16----------------------------------------El secuestro
Cuento No. 6, pag. 19-----------------------------------Por acoso sexual
Cuento No. 7, pag. 21----------------------------El extraño enamorado
Cuento No. 8, pag  25-------------------------Suceso en un cementerio
Cuento No. 9, pag. 28--------------------Como se van dando las cosas
Cuento No. 10 pag. 35------------La excursión a una mina de carbón
Cuento No, 11 pag. 36-------------------------En la iglesia de Tápaga
Cuento No. 12, pag. 37------------------------------Intento de suicidio.